Expirquinera de Inca de Oro educa a ni帽os para la vida

Triturar el mineral una y otra vez para en un afortunado encuentro hallar oro, fue la labor artesanal que durante a帽os llev贸 a cabo como pirquinera Karen Campillay, quien debido a su perseverancia y empe帽o hoy educa para la vida a los ni帽os y ni帽as de la localidad de Inca de Oro. Es en el jard铆n infantil Pinocho donde la trabajadora se desempe帽a actualmente como agente educativa, cargo que le permite entregar aprendizajes a un grupo heterog茅neo de p谩rvulos, a trav茅s de la valoraci贸n y respeto constante por la idiosincrasia e historia de un pueblo detenido en el tiempo.

Porque el objetivo sigue siendo explotar la riqueza del territorio, pero esta vez descubriendo una veta mediante el enfoque de ni帽os y ni帽os como agentes de cambio y transformaci贸n social, sin distinci贸n de contexto ni condici贸n.

鈥淓s m谩gico trabajar con ni帽os y ni帽as. Por su autenticidad, espontaneidad, carisma y energ铆a. Est谩n en la mejor etapa de su vida, donde adquieren conocimientos y los aceptan de la mejor manera鈥, comenta respecto a su quehacer Karen Campillay.

Haciendo historia
Hace m谩s de una d茅cada, en el a帽o 2006, Karen Campillay comenz贸 a escribir su historia como pirquinera, quehacer que ejercen cientos de mujeres, minoritariamente, y hombres en distintos rincones de la regi贸n sin una condici贸n ni remuneraci贸n formal. En particular, la trabajadora se dedic贸 a la peque帽a miner铆a debido a que durante su ense帽anza media tuvo la posibilidad de formarse en esta 谩rea, adem谩s, por el hecho de haber vivido toda su vida en Inca de Oro conoc铆a en profundidad la labor a que la que dedica gran parte de la poblaci贸n de la localidad.

De esta etapa, la agente educativa destaca que le permiti贸 鈥渃onocer la vida de personas que trabajaban en el mismo oficio, con sacrificio y esmero, esperando su recompensa despu茅s de largas jornadas鈥. Donde no siempre hab铆a un resultado satisfactorio de la dura tarea que realizaban en las alturas de Atacama porque, seg煤n explica Campillay, 鈥渧arias veces el mineral no era de buena calidad y no se sacaba oro, como se dice vulgarmente se apanteonaba, debiendo regresar a la mina para volver a extraer el mineral y comenzar el proceso nuevamente鈥.

Pero gracias a las vicisitudes en la explotaci贸n del mineral, hoy puede interiorizar con conocimiento a los ni帽os y ni帽as sobre la historia local, donde muchos de sus padres y familia logran su sustento como pirquineros en Inca de Oro y sus alrededores. Porque, es preciso 鈥渃omprender que el peque帽o pirquinero hace un gran aporte a la cultura de nuestro pa铆s鈥, puntualiza Campillay.

Tras un par de a帽os dedicada a la miner铆a, Karen Campillay ingres贸 el 2012 como auxiliar de servicios al jard铆n infantil Pinocho, donde inici贸 haciendo reemplazos, hasta que un a帽o m谩s tarde se present贸 la oportunidad de desempe帽arse como agente educativa en sala. Esto debido a que constantemente se capacit贸 y form贸 para educar, por la experiencia significativa y transcendencia que represent贸 para s铆 misma trabajar con la primera infancia.

鈥淧ara m铆 es muy relevante cuando todos los d铆as los ni帽os y ni帽as de forma espont谩nea me abrazan, me incluyen en sus juegos, cuando a cada momento siento que soy parte de sus vidas. Observarlos que son felices en el jard铆n infantil es muy satisfactorio鈥, concluye la trabajadora Karen Campillay, quien est谩 titulada como T茅cnico en Educaci贸n Parvularia.

Por los derechos de ni帽os y ni帽as
Alrededor de cien kil贸metros separan Inca de Oro, en la comuna de Diego de Almagro, de Copiap贸; la localidad cuenta con un observatorio astron贸mico y puntos tur铆sticos de inter茅s. Pese a su cercan铆a geogr谩fica con la capital regional, es un sitio que todav铆a atesora su pasado minero con las fachadas sencillas de casas a煤n habitadas por escasos pobladores.

Por tanto, el jard铆n Pinocho a trav茅s de su Sello Pedag贸gico dedicado a Ni帽os y Ni帽as Promotores de sus Derechos, es una entidad primordial en la comunidad en general ya que propicia y fomenta el respeto y la importancia de la infancia en un amplio sentido.

As铆 lo asegura Lorena 脕valos, directora del establecimiento hace catorce a帽os, quien declara que 鈥渢rabajar en esta localidad es muy desafiante, ya que si bien contamos con pocos ni帽os y ni帽as, apostamos a una educaci贸n de calidad. El jard铆n infantil es un gran aporte en la comunidad, nos validan y valoran mucho鈥. Asimismo, agrega la educadora, que 鈥渉ace algunos a帽os, de manera incipiente, nos comenz贸 a llamar la atenci贸n la tem谩tica de la promoci贸n de derechos. Adem谩s, dada la particularidad de la localidad visualizamos que, por ejemplo, muchos ni帽os de primero b谩sico se van solos a la escuela, por lo que consideramos que hab铆a poca preocupaci贸n al respecto. Entonces, desde ah铆 quisimos que las familias conocieran y aprendieran los derechos de los ni帽os y ni帽as. Y ahora en la comunidad nos reconocen a trav茅s de nuestro Sello Pedag贸gico y es en nuestra historia lo que nos mueve y destaca鈥.

Por otro lado, el jard铆n infantil tambi茅n establece las bases formativas en la localidad por medio de la entrega de educaci贸n inicial, donde cuenta con un nivel heterog茅neo para una cobertura de hasta 24 p谩rvulos de diferentes edades a trav茅s de una presencia de 4 trabajadoras. Las funcionarias, por su parte, son quienes hacen propios los principios del establecimiento, a partir de la premisa com煤n de 鈥渟er un peque帽o aporte en la vida de los ni帽os, para entregarles, junto a sus familias, valores, diversi贸n y conocimiento en su primera etapa de desarrollo, prepar谩ndolos para el ingreso a la educaci贸n b谩sica y form谩ndolos como personas plenas y felices鈥, de acuerdo indica la trabajadora Karen Campillay.

Trabajadoras como agentes de cambio social
La historia de la ex pirquinera y actual agente educativa es un ejemplo de la valoraci贸n de los talentos y saberes de las trabajadoras en los jardines infantiles y salas cunas de Fundaci贸n Integra.

Esto porque, seg煤n explica Patricia Espinoza, directora regional , 鈥渃reemos en las personas, ya que todos tienen un potencial para transformar el mundo y contribuir a la educaci贸n de ni帽os y ni帽as鈥. Por lo anterior, 鈥渃apacitamos constantemente a nuestros trabajadores porque consideramos fundamental que quienes est谩n a diario con los ni帽os y ni帽as deben estar preparados, para compartir sus habilidades y competencias, y as铆 entregar una educaci贸n de calidad鈥.

Finalmente, cabe mencionar que en el caso particular de los jardines infantiles y salas cunas donde se trabaja con un nivel heterog茅neo de p谩rvulos, 鈥渓os equipos han sido capacitados en Dise帽o Universal de Aprendizaje (DUA), lo que significa que la planificaci贸n educativa se enfoca en potenciar cada una de las habilidades que tienen los ni帽os, por lo tanto, trabajar en un nivel heterog茅neo no se transforma en una dificultad, sino todo lo contrario, en una fortaleza, donde cada uno aporta, tiene saberes y construye una educaci贸n para los ni帽os y ni帽as鈥, concluy贸 Espinoza.