Para poder entender y gestionar de mejor manera las emociones, es importante saber que las emociones van y vienen siempre y que tienen un principio un fin, es decir, se acaban.
Esconder lo que nos sucede en nuestro campo emocional, puede tener consecuencias, tanto para nuestra la salud mental como física. Es importante aceptar las emociones y dejarlas fluir, ya que de esta manera pueden transformarse.
Explorar la emoción
Una vez reconocida la emoción, el siguiente paso es expresarla. Lo ideal sería expresarlas en la medida en que vienen. Se trata de aceptar las emociones que nos acontecen, sin por ello identificarnos con ellas: “siento rabia” no es lo mismo que “tengo rabia”. El resultado es que la emoción bajará su intensidad.
Para ello, proponemos algunas estrategias que te ayudarán:
- ✅ Leer cuentos o historias que, a través de símbolos y metáforas, dan valiosas informaciones sobre distintos aspectos de las cuatro emociones básicas.
- ✅ Escribir ayuda a externalizar lo que se está sintiendo, a la vez que al describirlas y profundizar en los pensamientos que las acompañan, ayudan a comprenderlas
- ✅ Hablar y expresar lo que nos pasa, también ayuda a la exploración de lo que estamos sintiendo, poner afuera y mirar con otra perspectiva.
- ✅ Explorar el cuerpo: realizar un pequeño escáner corporal, te ayudará a identificar si la emoción invade todo el cuerpo o solo una parte. Busca un lugar tranquilo y pon una música suave, y atiende a cada parte de tu cuerpo unos minutos identificando sensaciones (frio, calor, temblor etc).
Algunas preguntas para chequear el trabajo de exploración de emociones:
- ❔ ¿Me identifico con alguna emoción?
- ❔ ¿Cómo expreso normalmente mis emociones: hablando con un amigo, escribiendo un diario, haciendo alguna actividad…?
- ❔ ¿Escucho las señales que me manda mi cuerpo físico?, ¿en qué parte del cuerpo se me suelen acumular las tensiones?, ¿suelo tener dolencias repetitivas?
- ❔ ¿Cómo es mi discurso interior últimamente?, ¿qué palabras o frases suelo repetirme?, ¿son estas frases positivas y de aliento o por el contrario son destructivas y juiciosas?
Aprender de la emoción
Tras la exploración de la emoción es momento de descubrir qué lección tenía encubierta la vivencia de la emoción. Solo así podemos sentirnos en paz total con la emoción y comenzar a despedirnos de ella. Se trata de una etapa completamente personal que invita a la autoevaluación y el autoconocimiento.
Las preguntas que te pueden ayudar en esta etapa son las siguientes:
- ❔ ¿Qué me está enseñando esta emoción?
- ❔ ¿Qué me está queriendo decir?
- ❔ ¿Cómo me ayuda?
- ❔ ¿Se trata de una emoción recurrente?
- ❔ ¿Qué actividades me ayudan a gestionar esta emoción?
- ❔ ¿Puedo pensar en un plan concreto que me ayude a movilizar esta energía la próxima vez que aparezca?