Cambio y Currículo

Con motivo de la realización del Congreso Pedagógico y Curricular convocado por el Mineduc en agosto con el apoyo de la oficina de OREALC/UNESCO, y, por tanto, la difusión del llamado a remirar nuestra sociedad, repensar sus avances, sus muchas necesidades y carencias y obtener los insumos para reconstruir los currículos educacionales de nuestro país, han surgido voces que este macro proceso no debería realizarse. Ello, sustentado en que hay problemas más urgentes que atender y que no hay diagnósticos sobre qué hacer.

En el ámbito de las ciencias sociales y considerando el paradigma de la complejidad, sabemos que la educación es uno de los grandes factores de mejoramiento de la sociedad (Michel Apple), a través de la formación de las nuevas generaciones y por ello, debemos estar siempre alertas a observarla y analizarla permanentemente. Se suma, considerar que la educación es un sistema, que no puede funcionar bien, si sólo se aborda alguno de los muchos factores que inciden en el todo.

Desde décadas, nuestros grandes pensadores e investigadores como el Dr. Claudio Naranjo, el Dr. Humberto Maturana, la Dra. Amanda Céspedes, el Dr. Abraham Magendzo (Curriculista y Premio Nacional de Educación), Gastón Soublette, sicólogos destacados como Felipe Lecannelier, entre otros profesionales, han estado haciendo el llamado que nuestra educación tiene serios problemas. “Es deshumanizante” expresaba el Dr. Naranjo, lo que se agudizó con la pandemia en los aspectos de salud mental, y con la pérdida de referentes valóricos e institucionales positivos.

¿Quién podría decir que no tenemos serios problemas de falta de ética, comunicación, respeto, responsabilidad, honestidad, cuidado de nuestros patrimonios naturales y culturales entre otros muchos aspectos? Francesco Tonucci, el gran pedagogo italiano que ha venido a Chile varias veces, nos hacía una gran pregunta: ¿Es posible hacer lo mismo de siempre, cuando todas las condiciones han cambiado?.

Todas estas situaciones y preguntas son las que se hacen cuando se reconstruyen los currículos educacionales, por ello, no podemos esperar a hacerlo. Claro que, si continuamos en la desconfianza, en la descalificación del otro por pensar distinto, no vamos a poder nunca avanzar en ser un país más humano, donde haya un ambiente de paz, bienestar, de mayor igualdad, de respeto a la diversidad, donde surja ese ser profundo de los chilenos que, en estos días de los Juegos Panamericanos, se ha asomado tímidamente por momentos.

¡Hagamos currículos para los complejos tiempos actuales, queridos compatriotas! Tenemos los especialistas, las experiencias, los aportes de muchos, ¡hagamos algo bueno por favor! Lo necesitamos todos, y en especial nuestros niños y niñas. No les podemos dejar este país en las condiciones de desencuentro en que permanentemente estamos. Humanicemos Chile nuevamente, como nos diría nuestra Gabriela maestra.

Estas palabras tienen más de 70 años, y ella decía, “el tiempo es ahora”. ¿Podremos aceptar este desafío? Como educadora siempre esperanzada en las capacidades del ser humano, pienso que sí. Espero que todos piensen así y aporten a ello.

María Victoria Peralta,
Premio Nacional de Ciencias de la Educación, presidenta de Fundación Integra
y académica de Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Universidad Central

María Victoria Peralta: “Es un reconocimiento a la Educación Parvularia”

Con una ovación fue recibida María Victoria Peralta, la reciente Premio Nacional de Ciencias de la Educación 2019, al llegar al jardín infantil VTF “Poyentu Mapu” de San Bernardo, por ser la primera educadora de párvulos en recibir el más importante reconocimiento en educación que se entrega en nuestro país.

“La educación parvularia es un nivel muy difícil, pues para trabajar en él se requiere de un gran sentido de responsabilidad y compromiso. Hoy me toca recibir este Premio Nacional, que no es solo un reconocimiento para mí, sino que para todo el nivel. Esperamos que este no sea el último, sino que el primero de muchas más educadoras que alcancen este reconocimiento por su contribución a nuestra educación”, aseguró María Victoria Peralta al conversar con los asistentes.

Sobre el reconocimiento, la subsecretaria de Educación Parvularia, María José Castro, destacó que “El Premio Nacional a María Victoria Peralta es, por una parte, un reconocimiento a la trayectoria de una educadora que ha dedicado su vida a la primera infancia y, por otra, nos permite visibilizar y relevar la Educación Parvularia ante la opinión pública. No esperemos que la valorización de la profesión venga de afuera, asumamos juntos el desafío de posicionar el nivel en el lugar que se requiere”.

María Victoria es educadora de párvulos y profesora de Estado en educación musical, ambos en la Universidad de Chile. Es doctora en Educación por la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, Magíster en Ciencias de la Educación, mención Currículum por la Universidad Católica y Magíster en Ciencias Sociales.

Actualmente es directora académica del Magíster en Educación Infantil de la Universidad Central de Chile, además de directora del Instituto Internacional de Educación Infantil de la Facultad de Educación de la misma casa de estudios. También, es directora del Comité Chileno de la Organización Mundial de Educación Preescolar (OMEP).

En el homenaje participaron, niños, niñas, familias y equipos educativos del jardín infantiles, además, de la alcaldesa de San Bernardo, Nora Cuevas, la vicepresidenta Ejecutiva de Junji, Adriana Gaete, la directora de Educación de Fundación Integra, Marcela Fontecilla, el decano de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Universidad Central, Jaime Veas.