Carta al Viejito Pascuero: una invitación para reconectar con el sentido profundo de la navidad

Diciembre es, sin duda, un mes particular. Al ser el último del año, pueden aparecer inquietudes en torno a lo que implica la finalización y/o evaluación de un ciclo, cansancio acumulado, preocupaciones por los gastos en las celebraciones de fin de año, o incluso pueden asomar señales de estrés por los cambios en las rutinas familiares (niñas y niños salen de clases y hay que pensar qué hacer con ellas y ellos durante las vacaciones), entre otras.

En este contexto, es esperable que las y los adultos sigamos funcionando en modo “piloto automático” y no nos detengamos a reflexionar, en el sentido profundo de esta celebración y cómo nuestro estado emocional, pensamientos, preocupaciones y/o acciones pueden incidir en el bienestar integral de niñas y niños.

¿Tenemos tiempo o nos damos el tiempo para pensar cómo nuestra visión y/o construcción de la vida puede repercutir en cómo las niñas y niños van significando su realidad y el mundo?; ¿nos detenemos a identificar qué valores y creencias les transmitimos según nuestra forma de relacionarnos con ellas y ellos?; ¿cuál es el “legado” que queremos regalarles?

Son muchas las preguntas que aparecen al finalizar un ciclo, pero más que seguir cuestionándonos, la invitación es a pensar cómo una celebración podría darnos la oportunidad de mirar y re mirar cómo estamos criando a niñas y niños y, a partir de ahí, escribir junto a ellas/os una nueva carta para el viejito pascuero.

Al recordar mis propias cartas para el viejito pascuero o escuchar las letras que canta mi hija sobre el tema hay un factor común: todo está centrado en la evaluación que hacemos del comportamiento humano y cómo esto determina el tipo de persona que “somos” (como si esto fuera algo perdurable e inalterable) y, en consecuencia, el tipo de regalo que “merecemos”. Quizás este ejercicio puede resultar “inofensivo”, pero, sabemos cómo esto repercute en la vida de niñas y niños.

Para entender cómo lo que creemos, decimos y hacemos impacta en la vida de niñas y niños, es necesario no sólo considerar la etapa del desarrollo en la que se encuentran, sino que también conocer sus características particulares, deseos, miedos, sueños, pensamientos, preocupaciones, alegrías y tristezas.

Sabemos que en la niñez el mundo de las fantasías es algo natural. De hecho, en la medida que niñas y niños aprenden a hablar van comunicándonos sus fantasías, miedos y deseos, y en las interacciones con otras y otros (pares o adultas/os) van creando su propia realidad y construyendo su propia identidad. Si ante lo fantástico que puede resultarles creer en el viejito pascuero, lo que hacemos es condicionar sus tan esperados y deseados regalos al cómo se comportaron durante el año y a lo que hacen o dejan de hacer (“si te portas mal el viejito no te va a traer nada” (…) “Si te portas bien el viejito te traerá regalos (…) “Acuérdate que el viejito pascuero está mirando cómo te portas”), ¿qué es lo que verdaderamente les estamos enseñando?

Lamentablemente, lo que sin querer les enseñamos con esas frases es que su condición y cualidad de ser humano depende sólo de su comportamiento, que el amor y la aceptación de cómo son se relaciona estrechamente con el regalo que reciben, que el amor es sinónimo de premio o castigo, que hay que comportarse de cierta manera para conseguir cosas. Preguntémonos, entonces, ¿es esa la carta que queremos escribir este año con ellas y ellos?

Este año, te invitamos a cambiar la mirada, a incentivar las fantasías de niñas y niños, a acompañar sus preguntas, explicaciones y formas de ver el mundo, a escuchar y respetar sus deseos y a mirar el mundo desde sus creencias. Para acompañarte en esto y otras temáticas, te invitamos a contactarte con Fonoinfancia de lunes a viernes de 08:30 a 19:00 horas, llamando al 800200818 o chateando en www.fonoinfancia.cl

 Por: Carolina Diez Pastene, psicóloga, supervisora del Programa Fonoinfancia.

Presidenta de Integra encabezó charla que revisó historia del sector parvulario y su aporte a la niñez

Un recorrido por la historia de la educación parvularia en nuestro país y sus aportes a la niñez, fue lo que ofreció la presidenta de Fundación Integra y Premio Nacional de Educación 2019, María Victoria Peralta, en la charla “Niñas y niños como sujetos de aprendizaje: El aporte de la educación parvularia chilena a su reconocimiento”, instancia que contó con la asistencia de trabajadoras/es de salas cuna, jardines infantiles y modalidades no convencionales, además de la subsecretaria (s) de Educación Parvularia, Paula Olavarría; y la vicepresidenta ejecutiva de Junji, Daniela Triviño.

A través de esta instancia, organizada por Fundación Integra, se buscó reconocer y valorar a quienes son parte de los equipos educativos como “agentes de cambios social“, capaces de transformar el mundo y de entregar educación pública de calidad, invitándonos a reflexionar respecto de la importancia de la educación parvularia y recordando la evolución de este nivel educativo y a quienes, con inmensa vocación, han trabajado por entregar aprendizajes significativos, bienestar y cuidados a niñas y niños en Chile.

En sus palabras de bienvenida, el director ejecutivo de Fundación Integra, Carlos González Rivas, expresó que “en el contexto del mes de la educación parvularia, quisimos transmitir la importancia de este sector en nuestro país y, a partir de esto, bajo el liderazgo de la presidenta de Fundación Integra, María Victoria Peralta, diseñamos esta actividad. Seguiremos construyendo estos espacios de diálogo para poder relevar la importancia de la educación parvularia para tener un país más inclusivo, justo y democrático”.

Por su parte, la presidenta de Integra indicó: “La historia nos enseña, entrega todo lo bueno que se ha hecho y todo con lo que hay que tener cuidado. La historia también nos dignifica como carrera, porque todas y todos somos herederas de ese trabajo de ya casi 160 años de la educación parvularia en nuestro país”.

“Quiero que, al repasar esta historia, se sientan orgullosas de esta lucha que muchas mujeres y también algunos varones han hecho para que los niños y niñas sean reconocidas como personas, sujetos, ciudadanos y, sobre todo, un niño maravilloso que confía en nosotros, al que le vamos a abrir un mundo. Nosotros tenemos que honrarlo y tributar nuestros mejores conocimientos, amores y saberes para que él sea ojalá el niño más feliz en esta etapa de la vida”, cerró la también directora del Instituto Internacional de Educación Infantil de la Universidad Central.

Con 33 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

“Cuadernos Viajeros” de Fundación Integra visitan a familias en la región de O’Higgins

Vida activa, alimentación saludable, cuidado del medio ambiente y salud bucal son las cuatro temáticas que aborda esta iniciativa de Fundación Integra, creada para apoyar a las familias en el desafío de ser los primeros modelos para sus niños y niñas.

Así es como este cuaderno invita a jugar en familia, realizando distintas actividades relacionadas con el tema elegido, además de compartir sus experiencias y costumbres con otras familias, pues la idea es que este material les pertenezca a todos.

“Los Cuadernos Viajeros son una metodología que enriquece las oportunidades de comunicación, colaboración y participación con las familias, en pro de favorecer el bienestar y aprendizaje de los niños y niñas, abordando determinados contenidos”, señaló la directora regional de Fundación Integra, Ximena Ortega.

Escribir, dibujar, pegar fotos o recortes es lo que contempla la realización de las actividades propuestas, donde también encontrarán datos útiles que pueden aportar en la vida cotidiana. Javiera Gaete es apoderada del jardín Santa Ana, de la comuna de Palmilla, para ella “fue una instancia muy linda, nos sirvió para conectarnos como familia, tener un espacio de diálogo, en las tardes, después de la rutina diaria. Junto con esto, hemos podido generar un lazo más afectivo con Ema (su hija) donde escuchamos y consideramos su opinión y todo lo que puede imaginar con las ideas que le damos como adulto”, afirmó.

Los jardines infantiles también tienen un rol clave en la difusión y promoción de este material, ya que cada uno desarrolla diferentes iniciativas innovadoras relacionadas a las cuatro temáticas. De hecho, este año Integra reconoció a once establecimientos de la región por sus destacadas actividades: Dulces Sonrisas (Quinta de Tilcoco), Santa Ana (Palmilla), Bam Bam (Mostazal), La Estrellita (La Estrella), Zancudín (Chépica), Creadores de Sueños (Graneros), Piececitos de Ángel (Rengo), Trencito de sueños (San Vicente), Las Abejitas (Quinta de Tilcoco), San Nicolás (Requínoa) y Rinconcito de Amor (Peralillo).

“Nosotros trabajamos estos Cuadernos Viajeros a través de una estrategia: los enviábamos cada tres días a los hogares, en bolsitas recicladas, pintadas por las familias y luego regresaban al jardín. Tras esto organizamos una feria para exponer y compartir su contenido con el resto de las familias. Ese trabajo fue reconocido, por lo que estamos muy contentas, ya que nos permite continuar avanzando con la misma energía y, sobre todo, con el mismo cariño hacia la primera infancia”, resaltó la directora de Jardín Dulces Sonrisas, Jisel Parraguez.

A quienes reciban este cuaderno en su casa, le deseamos mucha suerte y los invitamos a sacar el máximo provecho a esta experiencia de compartir la hermosa tarea de educar a los niños y niñas.

Con 33 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Director Ejecutivo de Fundación Integra: Carlos González Rivas

El viernes 17 de noviembre de 2023, la presidenta de Fundación Integra, María Victoria Peralta Espinosa, propuso al Consejo Nacional el nombre del señor Carlos González Rivas como Director Ejecutivo de la institución, nombramiento que fue ratificado por los consejeros y consejeras de forma unánime. Esta decisión cuenta con el respaldo del Ministro de Educación y de la Subsecretaria de Educación Parvularia.

Carlos González Rivas, oriundo de la región del Biobío, es de formación profesional Ingeniero Civil Industrial con mención Gestión en la Universidad del Bio-Bío y especialización en Gobierno y Gestión Pública de la Universidad Alberto Hurtado.

“Asumo este importante desafío de liderar Fundación Integra con una alta responsabilidad, ética y convicción, situando a las niñas y niños en el centro de la gestión institucional, reconociéndolos como sujetos de derechos y ciudadanos activos de la sociedad…”, afirmó el Director Ejecutivo.

Con una trayectoria profesional de casi 9 años en importantes cargos estratégicos de Fundación Integra, el Director Ejecutivo inicia su desarrollo de carrera en la Dirección Nacional de Personas cumpliendo un rol de asesor y coordinación de proyectos transversales de la dirección, y luego, a través de una promoción, asume como asesor de desarrollo estratégico de la Dirección Ejecutiva por más de 4 años, destacando entre sus principales logros la coordinación del desarrollo de prácticas de liderazgo y convivencia bientratante para la calidad educativa a nivel institucional, la articulación del proceso de formación continua AprendeS y la implementación de una asesoría integral a la gestión de direcciones nacionales y regionales, entre otros.

Posteriormente, en el mes de julio de 2020, fue promovido como Director Nacional de Promoción y Protección de la Infancia, con un foco principal en el fortalecimiento del enfoque derecho, el bienestar y la protección integral de la niñez, el vínculo con las familias y el trabajo colaborativo entre los equipos regionales y centrales.

El Director Ejecutivo asume este nuevo desafío con la convicción de que Fundación Integra es un referente en educación parvularia de calidad, garante de derechos y que trasciende en la vida de las niñas y niños; con el compromiso, profesionalismo y dedicación de los equipos de trabajo y la colaboración de las familias.

“Asumo este importante desafío de liderar Fundación Integra con una alta responsabilidad, ética y convicción, situando a las niñas y niños en el centro de la gestión institucional, reconociéndolos como sujetos de derechos y ciudadanos activos de la sociedad. Mi compromiso estará puesto en el fortalecimiento de la institución como un referente en educación parvularia en el país, garantizando su sostenibilidad, con la colaboración de los equipos de trabajo y las familias”, destacó el director.

Fundación Integra inauguró dos jardines infantiles en Puerto Natales y Punta Arenas

Junto a las comunidades educativas de las salas cuna y jardines infantiles “Los Conejitos” y “Vientos del Sur”, Fundación Integra inauguró sus nuevos espacios físicos en Puerto Natales y Punta Arenas, respectivamente, los que cuentan con ambientes seguros, confortables y potenciadores, tanto en infraestructura como equipamiento y materiales a disposición de las niñas y niños, que permiten fortalecer sus aprendizajes y bienestar integral.

“Para Fundación Integra, es motivo de gran alegría inaugurar una nueva infraestructura. Y lo hacemos con la convicción de que, en este nuevo espacio educativo enriquecido, niñas y niños desplegarán y potenciarán todas sus habilidades para la vida, acompañados de un equipo educativo que media sus aprendizajes, reconociéndolos como sujetos de derechos y ciudadanos activos de la sociedad”, afirmó el director ejecutivo de Fundación Integra, Carlos González Rivas, quien participó en ambas actividades junto al director regional, Alan Carrasco Concha.

Las obras efectuadas en los dos establecimientos permitieron la obtención del Reconocimiento Oficial (RO), otorgado por el Ministerio de Educación en septiembre de este año, un sello de calidad, seguridad y bienestar que acredita el cumplimiento de la normativa en términos pedagógicos, de infraestructura y jurídicos, que entrega mayor confianza y tranquilidad a las familias.

“La inauguración de estos dos jardines infantiles es una excelente noticia, que refleja el importante desarrollo que ha tenido la educación parvularia, llevándonos a realizar una invitación muy especial a las familias de la región a que confíen en los jardines públicos y que los niños y niñas puedan ser matriculados en estos espacios, ya que es muy relevante para su desarrollo en los siguientes niveles educacionales. En el marco de la Reactivación Educativa, es un desafío para nuestro gobierno que más niños y niñas y sus familias se sumen a la oferta pública y asistan regularmente a estos espacios que cuentan con un importante sello de calidad pedagógica”, expresó el seremi de Educación, Valentín Aguilera Gómez.

Jardín infantil Los Conejitos

El proyecto de normalización y reposición del establecimiento, ubicado en la Población Nueva Esperanza de Puerto Natales, contempló una inversión de Fundación Integra por más de $1.600 millones de pesos, el que permitió ampliar su infraestructura inicial de 367,10 m2 en un edificio de un piso, a una superficie de 524,83 m2 en dos pisos, con una capacidad de atención a 56 párvulos y 20 lactantes.

Inauguración JISC Los Conejitos_Puerto Natales-Región de Magallanes_15nov2023-07064

“Sin duda, esta remodelación de infraestructura y espacios de juegos están pensados en nuestros hijos e hijas, para que se desarrollen en un ambiente didáctico, sano y feliz, con salas llenas de juegos y un entorno que favorece sus aprendizajes en ámbitos como la inclusión, la solidaridad y el respeto. Agradecemos estar aquí hoy, en este renovado jardín, y agradecemos también a todo el personal por su gran vocación y entrega”, expresó la presidenta del Centro de Padres del jardín infantil, Carolina Gómez Alarcón.

Inauguración JISC Los Conejitos_Puerto Natales-Región de Magallanes_15nov2023-07332

El proyecto educativo del jardín infantil tiene como sello pedagógico “Ciudadanos con derechos”, respetando las características y singularidades de las niñas y niños, promoviendo la solidaridad, el aprendizaje colaborativo e inclusión, en estrecha alianza con las familias y comunidad.

Acompañaron la inauguración del jardín infantil Los Conejitos, la delegada presidencial provincial, Romina Álvarez Alarcón; el seremi de Educación, Valentín Aguilera Gómez; la alcaldesa de Natales, Antonieta Oyarzo Alvarado; representantes de las Juntas de Vecinos N⁰21 y N⁰9, el Centro de Padres e invitados especiales.

Jardín infantil Vientos del Sur

En Punta Arenas, las obras contemplaron la ampliación, mejoramiento y renovación de los espacios físicos del jardín infantil, ampliando su infraestructura inicial en 210 m2, alcanzando más de 1.000 m2 en un edificio de dos niveles, con una capacidad de atención de 192 párvulos y 36 lactantes.

Inauguración JISC Vientos del sur_Punta Arenas-Región de Magallanes_16nov2023-01348

Cabe mencionar, que este proyecto de normalización fue financiado por el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) del Gobierno Regional, con la Dirección de Arquitectura del MOP como Unidad Técnica.

El gobernador regional de Magallanes y de la Antártica Chilena, Jorge Flies Añón, destacó que “Estamos muy contentos como Gobierno Regional de inaugurar un nuevo jardín infantil de Integra, con lo que significa para las familias, para el equipo educativo y, especialmente, para los niños y niñas que van a recibir el cariño, la educación y el acompañamiento en esta primera etapa de sus vidas. Es una inversión de 1.400 millones pesos, también en un convenio con Integra y el Ministerio de Obras Públicas para la normalización de sus establecimientos”.

Inauguración JISC Vientos del sur_Punta Arenas-Región de Magallanes_16nov2023-01644

“Educar en democracia”, es el sello pedagógico de este jardín infantil, valorando el respeto, la inclusión, la participación, la libertad y el reconocimiento de las capacidades y habilidades de cada niñas y niño para lograr una educación de calidad.

Estuvieron presentes en la ceremonia de inauguración, el gobernador regional de Magallanes, Jorge Flies Añón; el delegado presidencial regional, José Ruiz Pivcevic; el seremi de Educación, Valentín Aguilera Gómez; el seremi del MOP, José Luis Hernández Vera; la directora regional de Junji, Paola Valenzuela Pino, el Centro de Padres e invitados especiales.

Con 33 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Cambio y Currículo

Con motivo de la realización del Congreso Pedagógico y Curricular convocado por el Mineduc en agosto con el apoyo de la oficina de OREALC/UNESCO, y, por tanto, la difusión del llamado a remirar nuestra sociedad, repensar sus avances, sus muchas necesidades y carencias y obtener los insumos para reconstruir los currículos educacionales de nuestro país, han surgido voces que este macro proceso no debería realizarse. Ello, sustentado en que hay problemas más urgentes que atender y que no hay diagnósticos sobre qué hacer.

En el ámbito de las ciencias sociales y considerando el paradigma de la complejidad, sabemos que la educación es uno de los grandes factores de mejoramiento de la sociedad (Michel Apple), a través de la formación de las nuevas generaciones y por ello, debemos estar siempre alertas a observarla y analizarla permanentemente. Se suma, considerar que la educación es un sistema, que no puede funcionar bien, si sólo se aborda alguno de los muchos factores que inciden en el todo.

Desde décadas, nuestros grandes pensadores e investigadores como el Dr. Claudio Naranjo, el Dr. Humberto Maturana, la Dra. Amanda Céspedes, el Dr. Abraham Magendzo (Curriculista y Premio Nacional de Educación), Gastón Soublette, sicólogos destacados como Felipe Lecannelier, entre otros profesionales, han estado haciendo el llamado que nuestra educación tiene serios problemas. “Es deshumanizante” expresaba el Dr. Naranjo, lo que se agudizó con la pandemia en los aspectos de salud mental, y con la pérdida de referentes valóricos e institucionales positivos.

¿Quién podría decir que no tenemos serios problemas de falta de ética, comunicación, respeto, responsabilidad, honestidad, cuidado de nuestros patrimonios naturales y culturales entre otros muchos aspectos? Francesco Tonucci, el gran pedagogo italiano que ha venido a Chile varias veces, nos hacía una gran pregunta: ¿Es posible hacer lo mismo de siempre, cuando todas las condiciones han cambiado?.

Todas estas situaciones y preguntas son las que se hacen cuando se reconstruyen los currículos educacionales, por ello, no podemos esperar a hacerlo. Claro que, si continuamos en la desconfianza, en la descalificación del otro por pensar distinto, no vamos a poder nunca avanzar en ser un país más humano, donde haya un ambiente de paz, bienestar, de mayor igualdad, de respeto a la diversidad, donde surja ese ser profundo de los chilenos que, en estos días de los Juegos Panamericanos, se ha asomado tímidamente por momentos.

¡Hagamos currículos para los complejos tiempos actuales, queridos compatriotas! Tenemos los especialistas, las experiencias, los aportes de muchos, ¡hagamos algo bueno por favor! Lo necesitamos todos, y en especial nuestros niños y niñas. No les podemos dejar este país en las condiciones de desencuentro en que permanentemente estamos. Humanicemos Chile nuevamente, como nos diría nuestra Gabriela maestra.

Estas palabras tienen más de 70 años, y ella decía, “el tiempo es ahora”. ¿Podremos aceptar este desafío? Como educadora siempre esperanzada en las capacidades del ser humano, pienso que sí. Espero que todos piensen así y aporten a ello.

María Victoria Peralta,
Premio Nacional de Ciencias de la Educación, presidenta de Fundación Integra
y académica de Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Universidad Central

Modalidades no convencionales: el desafío de entregar a la niñez los saberes del jardín infantil cuando no hay uno

Ante más de 150 trabajadoras y trabajadores de educación inicial, provenientes de todas las regiones del país, el pasado 06 de septiembre la educadora de párvulos Francisca Toledo realizó una exposición rodeada de pinturas de Vincent Van Gogh y usando una vestimenta inspirada en la obra del maestro neerlandés, con la que recorre la Isla de Chiloé interactuando con niñas, niños y sus familias. En esa oportunidad, la también educadora de párvulos Pamela Rebolledo mostró su labor pedagógica en el Hospital Herminda Martín de Chillán, capital de Ñuble.

Ambas profesionales de Fundación Integra, además de presentar dos de las 17 experiencias que dieron vida al seminario Comparte Educación 2023, tienen en común una característica muy especial: su trabajo se desarrolla de forma no tradicional. Mientras una, semanalmente, cambia el clásico jardín infantil por un vehículo cargado de material educativo, la otra se adapta diariamente a la realidad médica de las y los párvulos.

Tanto el Jardín Sobre Ruedas (JSR) y Mi Jardín al Hospital (MJAH), respectivamente, son algunas de las Modalidades no Convencionales de Fundación Integra, cuyo propósito es ampliar y diversificar la oferta educativa a niñas y niños que, por diversos motivos, no pueden acceder a un jardín infantil, respondiendo a los contextos sociales y geográficos existentes en el territorio con un programa que considera a las familias y un aprendizaje en ambientes lúdicos, afectuosos y seguros.

DIFERENTES CAMINOS PARA EDUCAR

La evolución de la civilización humana va de la mano con la búsqueda de formas para transmitir el conocimiento y educar a las nuevas generaciones. Con el correr de los años, esto generó el surgimiento de diversos formatos, sistemas y teorías –unas con mayor documentación y otras con escaso material de referencia–, que trataron de responder en su minuto a este desafío.

En el caso de la educación parvularia, tanto a nivel nacional e internacional, se pueden encontrar precedentes de los modelos de educación formal, como también de la llamada no formal las que, sin importar su origen, buscan el mismo objetivo: entregar educación. Ya sea en la antigua Grecia o la corriente occidental del siglo XVII, el camino ha sido diverso, aunque no exento de dudas.

En el número nueve de los “Cuadernos de Educación Inicial” (Ediciones Junji, 2018), María Victoria Peralta, presidenta de Fundación Integra y Premio Nacional de Educación 2019, consigna que a fines del siglo XIX se retomó el debate teórico sobre cómo definir y diferenciar a la educación formal de la informal, el que se profundizó durante el siglo XX. De hecho, en 1967, Philip H. Coombs, por entonces director del Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación de la Unesco, marcó un hito al compartir durante la Conferencia Internacional de Crisis Mundial en Educación un texto que ya hacía referencia a la “educación no formal”.

En años posteriores, y en colaboración con otros expertos, Coombs definió con mayor precisión la educación formal, como un “sistema educativo altamente institucionalizado, cronológicamente graduado y jerárquicamente estructurado que se extiende desde los primeros años de la escuela primaria hasta los últimos años de la Universidad”, y no formal, señalando que se refiere a “toda actividad organizada, sistemática, educativa, realizada fuera del marco del sistema oficial, para facilitar determinadas clases de aprendizajes a subgrupos particulares de la población, tanto adultos como niños”.

Ya en la década de los 80, también logró categorizar el “proceso a lo largo de la vida, en el cual cada persona adquiere y acumula conocimientos, habilidades, actitudes y percepciones de las experiencias cotidianas y de la exposición al entorno –en el hogar, en el trabajo, en el juego– de los ejemplos y actitudes en la familia y de los amigos, de los viajes, leyendo diarios y libros, o escuchando radio y viendo películas o TV”, denominándolo educación informal.

El desarrollo de estos conceptos tiene un impacto que se extiende incluso a nuestros tiempos. Por ejemplo –y citando un caso local–, la Ley General de Educación de Chile (2009), consigna algunos de estos elementos, ya que hace referencia a la existencia de una enseñanza formal, no formal e informal.

VINCULÁNDOSE CON LAS COMUNIDADES

Durante sus 33 años de existencia, el desafío permanente de Fundación Integra ha sido entregar a lo largo del país educación parvularia de calidad y gratuita, relevando el protagonismo de niñas y niños en sus procesos de aprendizaje, considerándolos siempre como sujetos de derechos. Para cumplir con esto, en especial cuando por factores demográficos, densidad poblacional o geográficos no se cuenta con infraestructura permanente, se han generado diversas iniciativas innovadoras.

Por 25 años, los móviles del Jardín Sobre Ruedas de Integra han recorrido distintas localidades para acercar la educación parvularia a más niños y niñas. Desde hace 29 años, las Veranadas Pehuenche en La Araucanía se adaptan a las necesidades de niños, niñas y sus familias, para dar continuidad al proceso educativo con pertinencia cultural, aunque ya en décadas pasadas existían en el país programas que respondían a necesidades especiales de las comunidades.

Ya sean las aulas hospitalarias para niños escolares en Concepción (en los años 60), los jardines comunitarios –en zonas como Lo Hermida– (1970), el programa Padres e Hijos (1973), los Centros Comunitarios de Atención Preescolar (1980), la Educación Preescolar de Comunidad (1982) o los Jardines Estacionales Junji (1991), entre otros, los programas de educación parvularia no formal comparten el responder a necesidades educativas específicas de niños y niñas de manera flexible, apuntando a grupos específicos con un rol preponderante de las familias.

Francisca Toledo resalta –desde Chiloé– que el Jardín Sobre Ruedas le permitió descubrir que “sí se puede hacer educación de una forma distinta a lo tradicional y que funciona, que trasciende y deja huellas, tanto para niños y niñas como también para las familias. El equipo llega a ser un modelo y, de esa manera, también se fortalecen las competencias parentales para una crianza afectiva y respetuosa que todo niño y niña debe experimentar, generando espacios de cariño y amor”.

Una opinión similar tiene Pamela Rebolledo, quien es parte de la Modalidad no Convencional Mi Jardín al Hospital en la Región de Ñuble. Según su experiencia, con las y los párvulos que tienen un mayor tiempo de hospitalización, “los vínculos que se establecen son aún más significativos, nos convertimos en parte de su familia, los acompañamos en todo su proceso de hospitalización dando soporte en situaciones difíciles a niños, niñas, sus familias y también celebrando los logros tanto en los aprendizajes como en aquellos aspectos relacionados con su salud”.

En la Región Metropolitana, aún es posible apreciar el impacto que tiene en las comunidades la implementación de este tipo de iniciativas. A pesar de la oferta de educación formal que tiene la capital, hay zonas donde aún se requiere llevar al territorio la enseñanza parvularia. Uno de los encargados de esto es Alexis Catribil, técnico profesional en párvulos de Fundación Integra y parte del equipo del Jardín Infantil Sobre Ruedas de la zona Norponiente.

“Las diferencias de esta modalidad itinerante con el jardín infantil tradicional son varias. Funciona una vez a la semana en espacios que otorga la comunidad, los adultos significativos están en la sala, son parte del proceso educativo, son el modelo para los niños y niñas, además tienen que llevar estos aprendizajes al hogar. El equipo pedagógico, si bien está a cargo del jardín, también tiene otras funciones como conducir, transformar los espacios de acuerdo a los períodos, para la entrega de aprendizajes significativos”, señaló el profesional.

El desafío es permanente y va más allá del hecho de recibir diariamente a niños y niñas –tarea en sí misma ya compleja– en un recinto acondicionado para la experimentación y el juego. Hay ocasiones donde, tanto por factores demográficos o geográficos, es necesario responder de forma innovadora a la necesidad de entregar educación parvularia fuera de las paredes tradicionales, para lo cual la creatividad, vocación, recursos pedagógicos y materiales deben conjugarse para que niños y niñas reciban los saberes del jardín infantil donde, literalmente, no hay uno.

Integra celebra sus 33 años relevando que niñas y niños sean protagonistas de sus aprendizajes

Con diversas actividades a nivel nacional, Fundación Integra celebra durante el mes de octubre sus 33 años de existencia, instancias que buscan reconocer a niñas y niños como ciudadanas/os sujetos de derecho, además de recordar a las familias la importancia de la educación parvularia.

En la Región Metropolitana, el hito central se realizó el sábado 14 en el Parque de la Familia de Quinta Normal, donde se desarrollaron experiencias lúdicas para promover el juego y la exploración del entorno. Con el lema “Juego y aprendo todos los días”, se buscó relevar a la niñez y también visibilizar el rol de educadoras y educadores como garantes de derechos y agentes de cambio social.

La jornada contó también con la participación de la subsecretaria de Educación Parvularia, Claudia Lagos; el superintendente de Educación, Mauricio Farías; el director ejecutivo de la Fundación de las Familias, Marcelo Bahamondes; y la vicepresidenta ejecutiva de Junji, Daniela Triviño.

El director ejecutivo (i) de Fundación Integra, Carlos González Rivas, indicó que “al cumplir 33 años, reafirmamos el compromiso de entregar a Chile una educación parvularia de calidad y gratuita, que promueva el bienestar, participación y protagonismo de niñas y niños. También es el momento para revisar nuestra historia, tener una nueva comprensión del presente y construir un futuro que nos permita, de forma innovadora, ubicar a la niñez al centro de nuestra gestión”.

HITOS DEL AÑO

La autoridad aprovechó la instancia para recordar algunos de los hechos que marcaron el último año. Uno fue la llegada de la educadora de párvulos, académica de la Universidad Central y Premio Nacional de Ciencias de la Educación (2019), María Victoria Peralta Espinosa, a la presidencia de la fundación, luego del cambio de estatutos de la institución.

El pasado mes de mayo, Fonoinfancia, cumplió 22 años promoviendo el buen trato hacia niñas y niños, entregando herramientas para una crianza respetuosa. Por ejemplo, en septiembre presentó una animación que invita a escuchar y contener a niñas y niños durante un proceso de separación.

A continuación, la subsecretaria de Educación Parvularia, Claudia Lagos, aseguró que “Fundación Integra cumple 33 años de un trabajo permanente y sostenido, ofreciendo oportunidades de aprendizaje, desarrollo y bienestar a los niños y niñas de nuestro país, lo que es muy trascendental para nuestra sociedad. Es muy importante que desde el sistema educativo acompañemos a las familias en esta tarea”.

A nivel de cifras, de acuerdo con el reporte presentado en la pasada Cuenta Pública 2023, son 81.739 las niñas y niños que asisten a las 1.247 salas cuna y jardines infantiles de la institución en todo el país. Además, Fundación Integra posee una dotación total de 27.337 trabajadoras y trabajadores, sumando tanto los equipos educativos, como personal de las oficinas regionales y Casa Central.

“En los espacios educativos promovemos la participación de niñas y niños por medio de la escucha activa y la disposición de instancias para que se expresen, sean opinantes y co-constructores de sus aprendizajes. Hitos como la actividad en el Parque de la Familia y otras desarrolladas en regiones, son una muestra de la búsqueda de caminos para no perder de vista que el trabajo de todas y todos en Fundación Integra, impacta en el desarrollo de la niñez en Chile”, cerró el director ejecutivo (i).

En este sentido, la presidenta de Fundación Integra, María Victoria Peralta, destacó que “iniciar el aniversario de Integra en espacios abiertos que permiten lo lúdico, el acercamiento y el trabajo permanente de este primer educador que es la familia es fantástico; y que las mismas madres, padres y cuidadores vean el trabajo donde el niño es el protagonista, el centro del aprendizaje, ha sido un muy buen inicio de cumpleaños de Fundación Integra”.

Por último, la vicepresidenta ejecutiva de Junji, Daniela Triviño, señaló que “estamos muy felices de poder celebrar junto a Integra, sus 33 años. Compartir con las familias, los niños y niñas, en este espacio, es un aporte para seguir reforzando la importancia de la educación parvularia de calidad”.

La invitación es que las familias participen de las actividades que Fundación Integra realizará en todo Chile, recordando que son actores vitales, junto a los equipos educativos de las salas cuna, jardines infantiles y modalidades no convencionales, en el proceso de aprendizaje de niñas y niños.

Animación de Fonoinfancia resalta la importancia de la comunicación con las niñas y los niños ante un proceso de separación

Fonoinfancia, programa gratuito y no presencial de apoyo a la crianza de Fundación Integra, estrenó junto a familias de la comuna de Lo Prado su más reciente animación “Dejen de pelear delante de nosotras/os”, a través de la cual se busca resaltar de forma didáctica y educativa, lo importante que es la comunicación entre las adultas/os y las niñas/os; junto con atender las distintas vivencias que puedan experimentar especialmente cuando se produce y hay que enfrentar un proceso de separación.

La pieza audiovisual muestra que cada integrante de la familia puede vivir este hecho como un duelo, sintiendo diversas emociones. Por ello es clave acompañar a niñas y niños, contándoles lo que ocurre. Esto busca prevenir, por ejemplo, que la falta de información de paso a pensamientos donde ellas/os se atribuyan algún grado de responsabilidad o culpa.

Esta presentación se realizó en la sala cuna y jardín infantil Santa Anita y contó con la presencia del director ejecutivo (i) de Fundación Integra, Carlos González Rivas; las directoras nacionales de Fundación Integra Marcela Fontecilla y Marcela Vida –Educación y Promoción y Protección de la Infancia, respectivamente–; la jefa del Departamento de Promoción y de Fonoinfancia, Alicia Varela Hidalgo; además las y los profesionales de este programa, quienes junto con revisar el video realizaron un conversatorio con las familias y el equipo educativo del establecimiento.

Durante la instancia se recalcó que las y los adultos deben estar disponibles e interesados en lo que puedan necesitar o sentir las niñas y niños. Junto a ello, es relevante transmitirles con claridad que lo que se termina es la relación amorosa entre adultas y adultos; y no el amor hacia ellas y ellos.

El director ejecutivo (i) de Fundación Integra, Carlos González Rivas, indicó que “abordar junto a las familias y equipos educativos este tipo de temáticas, nos permiten resaltar que como adultos y adultas debemos acompañar y escuchar a niños y niñas en este tipo de procesos, velando por su bienestar y seguridad. Por ello, destacamos el poner junto a Fonoinfancia este material a disposición de las familias y los equipos educativos de jardines infantiles, el cual busca ser un apoyo y una orientación ante este tipo de situaciones”.

Alicia Varela Hidalgo, jefa del Departamento de Promoción y de Fonoinfancia, expresó que “para las niñas y niños no es fácil transmitir con palabras lo que sienten, por ello suelen expresar sus emociones de diferentes formas. Esto es un llamado a que las y los adultos estemos alerta y podamos responder oportunamente ante estas señales. Para ello, es clave contar con insumos que nos permitan esto, buscando siempre el bienestar de las niñas y niños”.

La animación cuenta además con materiales complementarios dirigidos a equipos educativos, familias y público en general, consistentes en un documento de apoyo, un díptico y dos propuestas de talleres, con sus respectivas orientaciones para abordar esta temática. La animación quedará disponible en el canal de YouTube de Fonoinfancia y en la página web www.fonoinfancia.cl

Según cifras de Fonoinfancia, entre los meses de enero y agosto de este año, se cuentan en total 4.845 intervenciones psicológicas, de las cuales un 20,5% corresponden a inquietudes relacionadas con el impacto que tiene en niñas y niños un proceso de separación, en el contexto de su crianza y desarrollo.

Desde el 2007, además, este programa es parte del subsistema de Protección Integral a la Infancia Chile Crece Más (exChile Crece Contigo), dependiente del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, lo que se traduce en la implementación de acciones de carácter universal, focalizando apoyos especiales a quienes presentan una vulnerabilidad mayor.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Mónica Manhey: “En educación parvularia participar es ser parte esencial del proceso”

Para Mónica Manhey Moreno -educadora de párvulos, doctora en Educación de la Universidad de Granada y magíster en Educación con mención en Educación Parvularia-, uno de los principales desafíos del nivel, es aprender a observar a las infancias y reflexionar en torno a las prácticas pedagógicas, un ejercicio que va de la mano con la empatía y la posibilidad de atender las diversas inquietudes y necesidades de niños y niñas, con el fin de que éstos se conviertan en verdaderos protagonistas de sus aprendizajes.

La participación y el protagonismo de niños y niñas, fueron parte de la ponencia y taller que la académica realizó en el marco del seminario Comparte Educación de Fundación Integra, en que participaron cerca de 150 trabajadoras y trabajadores de salas cuna, jardines infantiles y modalidades no convencionales provenientes de todo el país, realizado en Santiago los días 6, 7 y 8 de septiembre, temáticas que quisimos profundizar en esta entrevista.

– ¿Cuáles son las principales características que debe tener un equipo educativo para favorecer el aprendizaje de los niños y las niñas? 

– Tiene que ser sensible ante las necesidades de los niños y niñas, debe empatizar con ellos. Es sumamente importante empatizar con las emociones y respetar lo que desean hacer.

También tiene que ser creativo, y no me refiero a la manualidad, sino a qué ofreciendo soluciones a problemas del día a día, de manera que los niños y niñas se sientan en este caso más protagonistas. También en el caso de las familias preguntarse cómo lo hago para que la familia participe más. Entonces, la creatividad tiene que estar presente para poder innovar.

Durante su presentación en el seminario Comparte Educación, mencionó que hay que observar la infancia, ¿cómo debería ser este proceso?

– A mí me preocupa que a veces los tiempos, que son escasos, se utilicen para hacer más manualidades y regalitos, porque el imaginario social que hay detrás del ser educador de párvulos, es muy fuerte: qué tierna, qué creativa (por la manualidad que hace) y tenemos que eliminar esos estigmas. Por eso, creo que, ante su pregunta, observar a la infancia es realmente necesario, porque aprendemos de los niños y niñas. ¡Pero observarlos bien!

Porque si observas a un bebé que está caminando para un lado y tú lo llevas a otro lado, no ves que él tiene una inquietud, que él quiere saber y explorar. Si está interesantísimo en algo y abruptamente lo llevas a otro camino o a otra necesidad, adultocéntricamente hablando, eso es lamentable.

No se necesita más tiempo, el tiempo está, pero sin embargo tenemos que ver cuál es la prioridad: el niño o la niña o nuestra comodidad. Es más cómodo planificar algo y apriorísticamente, pensar cuál es el objetivo, la experiencia al inicio, desarrollo y cierre, y enfrentarse con los niños con un libreto. Por el contrario, es más incómodo, desafiante y difícil, observar a los niños y modificar lo que uno tiene planificado.

Por lo tanto, más que tiempo, necesito detenerme en lo que estoy haciendo y entender cuál es su relevancia, porque si queremos aumentar el vocabulario o mejorar la expresión u otro objetivo, eso se logra, muchas veces, con esas ideas que traen los niños de la casa, con esa fantasía, y no con temas planteados por los adultos que, a lo mejor, no los atrae.

¿A qué nos referimos con el protagonismo y la participación en la niñez?

– Hay que hacer una diferencia: una cosa es que tú asistas a una actividad o iniciativa, y eso es estar; y otra es participar, que es, por ejemplo, dar ideas, modificar en algo lo que estaba establecido. Pero ser protagónico, eso es el más importante. Uno podría decir, fueron protagonistas las personas que presentaron en Comparte y hablaron de sus experiencias, por ejemplo.

Los niños y niñas asisten a los jardines infantiles y participan. Pero hay diferentes niveles de participación y hay unos a los que llaman participación, pero que no lo es. Por ejemplo, cuando las educadoras dicen: “Ya niños, vamos a elegir: unos van a escuchar un cuento, otros van a cantar una canción y otros van a hacer rimas”. Todas las alternativas tienen que ver con el lenguaje, pero, además, está diseñado desde el adulto y los niños asisten a esas actividades, pero simplemente eligen y no participan verdaderamente, porque, reitero, participar es modificar.

Si uno quisiera desarrollar el lenguaje, podría preguntarle a los niños y niñas qué les gustaría hacer, y esto no quiere decir que nunca más planifico. Por ejemplo, me acuerdo que ayer alguien dijo que su mamá le compró un paraguas y otro dijo que lo trajera; entonces, podríamos conversar sobre cuál es el peligro de tener los paraguas abiertos en la sala o para qué sirven e, incluso, hacer rimas sobre el tema. En conclusión, el objetivo que tenías lo favoreciste.

La idea es, cómo los niños pueden flexibilizar las experiencias, por lo tanto, se ven más comprometidos, porque la mayor participación ofrece mayor compromiso y eso es sumamente importante. Por tanto, el niño va estar enganchado afectiva y cognitivamente.

¿Cómo definirías a los niños y niñas de hoy?

– Siempre han sido curiosos, exploradores, preguntones, pero todo lo que pasa es en la medida que les das posibilidades. Los niños y niñas son sujetos de derecho y ante esta pregunta no hay una respuesta única. No es lo mismo un niño de Arica que uno de Punta Arenas, y en Punta Arenas, no es lo mismo un niño de una familia que de otra. Cada niño es único, tiene una historia de vida, un contexto, una familia, pero todos son sujetos únicos, curiosos, activos, exploradores y sensibles, entre otras características.

El gran desafío es no olvidarnos de que no es la infancia sino las infancias, con “s”. Son los niños y niñas diversos. Por lo tanto, eso nos demanda hacer experiencias diversas y tener objetivos diversos. No más la hoja con el objetivo de planificación del mismo núcleo, el mismo objetivo para todos los niños y niñas, porque no todos los niños aprenden lo mismo, en la misma semana, en la misma hora, el mismo día. Entonces eso es lo importante, ofrecer un currículo diverso.

¿Qué tiene que pasar para que suceda este cambio de paradigma en la educación parvularia?

– Lo importante es la reflexión de las prácticas pedagógicas. Porque lo demás está todo escrito. Estamos en un muy buen momento, con una buena Subsecretaría que impulsa con buenas orientaciones y en una institución que lleva más de 30 años como es Fundación Integra.

Pero cada adulto debe ser garante de los derechos de los niños y niñas y eso no se cumple con orientaciones institucionales, sino con voluntades individuales y de un colectivo comprometido. A veces se observan demandas personales y olvidamos el bien Superior del Niño y la Niña.

Aprovecho de decir que debemos de avanzar en esta sociedad a que sea una educación parvularia menos feminizada, bienvenidos los hombres a esta carrera y al trabajo en los Jardines Infantiles.

¿Cuál es el mensaje que entregarías a las familias? Sobre todo, considerando los aprendizajes que nos dejó la pandemia

– El estar encerrados fue terrible para todo el mundo y la lección es no tener miedo a vincularnos, no tener miedo a estrechar vínculos, acercarnos, comunicarnos. Incluso el mensaje también es que la educación parvularia no sea tan áulica, es decir, que la experiencia de aprendizaje no sea entre cuatro paredes, sino que se convierta en una ciudad educativa, que hagamos las experiencias más al aire libre, con más contacto con la naturaleza.

Digámonos también cosas lindas, porque es importante autocuidarnos y cuidarnos entre todas y todos. Hagamos que las familias no se tensen por tratar de llenar a los niños de contenido, que sepan que aprenden en forma cotidiana, por ejemplo, cuando lo estás vistiendo, y aunque estés apurada, decirle: “te voy a poner un chaleco azul”, y sobre todo “te ves hermoso con esta ropa y son tu linda sonrisa”.

Decirles a las familias que escuchen más a sus hijos y que el error es parte del aprendizaje. No corregirlos, no violentarlos ni exigirles que sean como otros u otras. Ellos ya son una persona con derechos, con deberes también, por supuesto, pero no olvidarse de que esta es una etapa trascendente para toda la vida. Así como crece su cuerpo, sus manos, también crece su autoestima y ojalá que ésta no se vaya achicando producto de las interrelaciones con los adultos y adultas que lo rodean, sino por el contrario y que disfruten de su familia, amigos, del juego y del aprendizaje.