Educación Parvularia Pública: un estándar que debemos cuidar

Este año la Educación Parvularia Pública se encuentra conmemorando 160 años, desde que en 1864 se iniciara en Santiago la primera Escuela de Párvulos, a cargo de una directora, Hija de la Caridad de San Vicente de Paúl especialista en el tema, y de dos maestras egresadas de la Escuela Normal de Preceptoras, por instancia del gobierno de la época. Esto fue renovador y transformador, pues permitió comenzar a sentar las bases de una perspectiva educativa en la manera de vincularse el mundo adulto con las niñas y niños de la primera infancia.

Con un largo camino recorrido y el compromiso de varias generaciones, hoy nuestra Educación Parvularia cuenta con una red de salas cunas, jardines infantiles y escuelas con calidad educativa, que permiten posicionarnos a nivel internacional, como referentes en Latinoamérica. También, con una institucionalidad que, a través de la Subsecretaría de Educación Parvularia, ha permitido generar lineamientos para avanzar hacia una mirada sistémica de los desafíos del nivel.

Los avances de la Educación Inicial en los diferentes aspectos de la calidad han permitido alcanzar un estándar que debemos cuidar y fortalecer, el que se traduce en espacios educativos de bienestar integral y desarrollo, donde niñas y niños son protagonistas y aprenden a través del juego, la exploración y el descubrimiento. El gran desafío es ver cómo avanzamos para que esto sea también para el resto del sistema educativo.

Ante la discusión del proyecto de Ley de Sala Cuna, es importante poner en el centro el bienestar, aprendizaje y derecho de las niñas y niños a acceder a una Educación Parvularia de calidad con todos los aspectos que ello involucra, sin que ello colisione con otros derechos relevantes. Así como hace 160 años se inició el camino para avanzar desde una manera de relacionarse desde lo asistencial a lo educativo, hoy debemos abordar los desafíos pensando en resguardar el estándar que hemos logrado construir, apuntando a un fortalecimiento integral de este primer nivel educativo.

¿Hay algo mejor en que el país pueda invertir? Como educadora, pienso que no.

 

María Victoria Peralta Espinosa,
Presidenta de Fundación Integra, Premio Nacional de Educación 2019 y
académica Universidad Central

Mónica Manhey: “En educación parvularia participar es ser parte esencial del proceso”

Para Mónica Manhey Moreno -educadora de párvulos, doctora en Educación de la Universidad de Granada y magíster en Educación con mención en Educación Parvularia-, uno de los principales desafíos del nivel, es aprender a observar a las infancias y reflexionar en torno a las prácticas pedagógicas, un ejercicio que va de la mano con la empatía y la posibilidad de atender las diversas inquietudes y necesidades de niños y niñas, con el fin de que éstos se conviertan en verdaderos protagonistas de sus aprendizajes.

La participación y el protagonismo de niños y niñas, fueron parte de la ponencia y taller que la académica realizó en el marco del seminario Comparte Educación de Fundación Integra, en que participaron cerca de 150 trabajadoras y trabajadores de salas cuna, jardines infantiles y modalidades no convencionales provenientes de todo el país, realizado en Santiago los días 6, 7 y 8 de septiembre, temáticas que quisimos profundizar en esta entrevista.

– ¿Cuáles son las principales características que debe tener un equipo educativo para favorecer el aprendizaje de los niños y las niñas? 

– Tiene que ser sensible ante las necesidades de los niños y niñas, debe empatizar con ellos. Es sumamente importante empatizar con las emociones y respetar lo que desean hacer.

También tiene que ser creativo, y no me refiero a la manualidad, sino a qué ofreciendo soluciones a problemas del día a día, de manera que los niños y niñas se sientan en este caso más protagonistas. También en el caso de las familias preguntarse cómo lo hago para que la familia participe más. Entonces, la creatividad tiene que estar presente para poder innovar.

Durante su presentación en el seminario Comparte Educación, mencionó que hay que observar la infancia, ¿cómo debería ser este proceso?

– A mí me preocupa que a veces los tiempos, que son escasos, se utilicen para hacer más manualidades y regalitos, porque el imaginario social que hay detrás del ser educador de párvulos, es muy fuerte: qué tierna, qué creativa (por la manualidad que hace) y tenemos que eliminar esos estigmas. Por eso, creo que, ante su pregunta, observar a la infancia es realmente necesario, porque aprendemos de los niños y niñas. ¡Pero observarlos bien!

Porque si observas a un bebé que está caminando para un lado y tú lo llevas a otro lado, no ves que él tiene una inquietud, que él quiere saber y explorar. Si está interesantísimo en algo y abruptamente lo llevas a otro camino o a otra necesidad, adultocéntricamente hablando, eso es lamentable.

No se necesita más tiempo, el tiempo está, pero sin embargo tenemos que ver cuál es la prioridad: el niño o la niña o nuestra comodidad. Es más cómodo planificar algo y apriorísticamente, pensar cuál es el objetivo, la experiencia al inicio, desarrollo y cierre, y enfrentarse con los niños con un libreto. Por el contrario, es más incómodo, desafiante y difícil, observar a los niños y modificar lo que uno tiene planificado.

Por lo tanto, más que tiempo, necesito detenerme en lo que estoy haciendo y entender cuál es su relevancia, porque si queremos aumentar el vocabulario o mejorar la expresión u otro objetivo, eso se logra, muchas veces, con esas ideas que traen los niños de la casa, con esa fantasía, y no con temas planteados por los adultos que, a lo mejor, no los atrae.

¿A qué nos referimos con el protagonismo y la participación en la niñez?

– Hay que hacer una diferencia: una cosa es que tú asistas a una actividad o iniciativa, y eso es estar; y otra es participar, que es, por ejemplo, dar ideas, modificar en algo lo que estaba establecido. Pero ser protagónico, eso es el más importante. Uno podría decir, fueron protagonistas las personas que presentaron en Comparte y hablaron de sus experiencias, por ejemplo.

Los niños y niñas asisten a los jardines infantiles y participan. Pero hay diferentes niveles de participación y hay unos a los que llaman participación, pero que no lo es. Por ejemplo, cuando las educadoras dicen: “Ya niños, vamos a elegir: unos van a escuchar un cuento, otros van a cantar una canción y otros van a hacer rimas”. Todas las alternativas tienen que ver con el lenguaje, pero, además, está diseñado desde el adulto y los niños asisten a esas actividades, pero simplemente eligen y no participan verdaderamente, porque, reitero, participar es modificar.

Si uno quisiera desarrollar el lenguaje, podría preguntarle a los niños y niñas qué les gustaría hacer, y esto no quiere decir que nunca más planifico. Por ejemplo, me acuerdo que ayer alguien dijo que su mamá le compró un paraguas y otro dijo que lo trajera; entonces, podríamos conversar sobre cuál es el peligro de tener los paraguas abiertos en la sala o para qué sirven e, incluso, hacer rimas sobre el tema. En conclusión, el objetivo que tenías lo favoreciste.

La idea es, cómo los niños pueden flexibilizar las experiencias, por lo tanto, se ven más comprometidos, porque la mayor participación ofrece mayor compromiso y eso es sumamente importante. Por tanto, el niño va estar enganchado afectiva y cognitivamente.

¿Cómo definirías a los niños y niñas de hoy?

– Siempre han sido curiosos, exploradores, preguntones, pero todo lo que pasa es en la medida que les das posibilidades. Los niños y niñas son sujetos de derecho y ante esta pregunta no hay una respuesta única. No es lo mismo un niño de Arica que uno de Punta Arenas, y en Punta Arenas, no es lo mismo un niño de una familia que de otra. Cada niño es único, tiene una historia de vida, un contexto, una familia, pero todos son sujetos únicos, curiosos, activos, exploradores y sensibles, entre otras características.

El gran desafío es no olvidarnos de que no es la infancia sino las infancias, con “s”. Son los niños y niñas diversos. Por lo tanto, eso nos demanda hacer experiencias diversas y tener objetivos diversos. No más la hoja con el objetivo de planificación del mismo núcleo, el mismo objetivo para todos los niños y niñas, porque no todos los niños aprenden lo mismo, en la misma semana, en la misma hora, el mismo día. Entonces eso es lo importante, ofrecer un currículo diverso.

¿Qué tiene que pasar para que suceda este cambio de paradigma en la educación parvularia?

– Lo importante es la reflexión de las prácticas pedagógicas. Porque lo demás está todo escrito. Estamos en un muy buen momento, con una buena Subsecretaría que impulsa con buenas orientaciones y en una institución que lleva más de 30 años como es Fundación Integra.

Pero cada adulto debe ser garante de los derechos de los niños y niñas y eso no se cumple con orientaciones institucionales, sino con voluntades individuales y de un colectivo comprometido. A veces se observan demandas personales y olvidamos el bien Superior del Niño y la Niña.

Aprovecho de decir que debemos de avanzar en esta sociedad a que sea una educación parvularia menos feminizada, bienvenidos los hombres a esta carrera y al trabajo en los Jardines Infantiles.

¿Cuál es el mensaje que entregarías a las familias? Sobre todo, considerando los aprendizajes que nos dejó la pandemia

– El estar encerrados fue terrible para todo el mundo y la lección es no tener miedo a vincularnos, no tener miedo a estrechar vínculos, acercarnos, comunicarnos. Incluso el mensaje también es que la educación parvularia no sea tan áulica, es decir, que la experiencia de aprendizaje no sea entre cuatro paredes, sino que se convierta en una ciudad educativa, que hagamos las experiencias más al aire libre, con más contacto con la naturaleza.

Digámonos también cosas lindas, porque es importante autocuidarnos y cuidarnos entre todas y todos. Hagamos que las familias no se tensen por tratar de llenar a los niños de contenido, que sepan que aprenden en forma cotidiana, por ejemplo, cuando lo estás vistiendo, y aunque estés apurada, decirle: “te voy a poner un chaleco azul”, y sobre todo “te ves hermoso con esta ropa y son tu linda sonrisa”.

Decirles a las familias que escuchen más a sus hijos y que el error es parte del aprendizaje. No corregirlos, no violentarlos ni exigirles que sean como otros u otras. Ellos ya son una persona con derechos, con deberes también, por supuesto, pero no olvidarse de que esta es una etapa trascendente para toda la vida. Así como crece su cuerpo, sus manos, también crece su autoestima y ojalá que ésta no se vaya achicando producto de las interrelaciones con los adultos y adultas que lo rodean, sino por el contrario y que disfruten de su familia, amigos, del juego y del aprendizaje.

Directora ejecutiva visita a equipos educativos de jardines Integra en la región de Arica y Parinacota

La directora ejecutiva de Fundación Integra, Red de Salas Cuna y Jardines Infantiles de Chile, llegó hasta Arica para conocer en terreno el trabajo que esta institución educativa realiza en la zona, donde funcionan 12 de sus establecimientos para la primera infancia, distribuidos en las comunas de Arica, Putre y General Lagos.

Nataly Rojas Seguel asumió la conducción de Integra en septiembre del año pasado y esta semana visitó por primera vez nuestra región ejecutando en Arica una agenda de reuniones y encuentros con autoridades regionales, medios de comunicación, funcionarias/os de oficina regional y trabajadoras de equipos educativos de jardines infantiles.

“Me quedo con las mejores sensaciones sobre todo en aquellos espacios y oportunidades en donde puedo reunirme con trabajadoras, saber las vivencias que ellas tienen, los sueños, los anhelos, las dificultades que nos permiten de alguna manera pensar en mejoras y también en tomar decisiones de manera más permanentes y por supuesto, el encuentro con niños y niñas siempre va a ser muy positivo”, expresó la directora ejecutiva.

En tal sentido, una de sus primeras actividades fue reunirse con los trabajadores de oficina regional de Fundación Integra, cuyas dependencias se ubican en la población Magisterio, para posteriormente hacer lo mismo con el equipo de trabajadoras del jardín infantil y sala cuna Milagro de Amor, ubicado en la población Guañacagua 3, establecimiento que próximamente será parte de una importante remodelación con una inversión de 932 millones de pesos.

Esa misma tarde, llegó hasta las dependencias del jardín infantil y sala cuna Nueva Esperanza, ubicado en calle Los Artesanos de la población Cardenal Silva Henríquez, recinto educativo que tiene una matrícula de 127 niños y niñas y un equipo de educadoras, técnicas, auxiliares y administrativa de 32 personas. En el lugar, recorrió cada una de las aulas, saludando a los equipos educativos y a los niños y niñas, de los cuales recibió un dibujo como regalo, de parte de Francisca, alumna del nivel medio mayor 2.

Al día siguiente, su agenda de actividades continuó en la sala cuna Los Castorcitos, que funciona en la sección femenina del Complejo Penitenciario de Acha, lugar que desde mediados de los ’90 alberga a este recinto educativo que hoy tiene 11 párvulos menores de 2 años hijos e hijas de las reclusas que cumplen condena en el lugar.

La visita de la directora ejecutiva a nuestra región también contempló reuniones con el gobernador regional subrogante Leonel Huerta Fernández, el delegado presidencial Ricardo Sanzana Oteíza, el delegado provincial de Parinacota, Wagner Sanhueza Guzmán y el seremi de Educación, Francisco Valcarce Llancapichún, todas orientadas a conseguir el apoyo y trabajo conjunto en beneficio de iniciativas y proyectos para el mejor funcionamiento de los jardines infantiles y salas cuna de Integra en la región.

Junto con lo anterior y en el último de los tres días que recorrió nuestra zona, Nataly Rojas Seguel expuso en el Seminario Internacional “Desarrollando Entornos Neuroamigables para la Infancia”, a través del cual se buscó aportar una mirada desde la educación socioemocional y la neurodidáctica al ámbito de la primera infancia.

Jorge Yáñez Castro, director regional de Fundación Integra, destacó la importancia de la presencia de la directora ejecutiva en la región remarcando lo positiva que fue para el trabajo de todos y cada uno de los funcionarios institucionales ya sea de oficina regional o jardines infantiles y en especial para los propósitos de aumento de cobertura regional que se proyectan para los próximos dos años, en donde se espera materializar la construcción de dos nuevos jardines infantiles.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Jardines infantiles de Integra en O’Higgins reciben material didáctico inclusivo de Senadis

Cojín sensorial que promueve la calma, autorregulación, atención y concentración; pelota medicinal que facilita la estimulación sensorial, coordinación motriz gruesa y equilibrio; paracaídas sensorial que fomenta el trabajo en equipo, resolución de conflictos y planeación ideomotora; y espejos que permiten identificar el estado de ánimo de forma individual y autónoma, son parte del material didáctico que recibieron 12 jardines infantiles de Fundación Integra.

Esto como parte del Programa de Atención Temprana, PAT, 2022-2023, que Senadis ejecuta en establecimientos que cuentan con niños y niñas, menores de seis años, con discapacidad. El objetivo es contribuir a la inclusión social y equiparación de oportunidades, procurando el acceso a los sistemas de educación regular (que incluye la educación parvularia), salud y bienestar social a través de asesoría, apoyo técnico y coordinación del territorio con diferentes actores.

“Este material es un aporte al trabajo que Fundación Integra realiza y que va a permitir que los jardines beneficiados puedan realizar una labor más minuciosa, acorde a los tiempos que estamos viviendo. Hoy los niños y niñas necesitan y reciben diferentes estímulos, por lo que este material, de algún modo, les permitirá canalizar esas energías”, señaló la directora regional de Senadis, María Eliana Urquizar.

Por su parte, Alejandra Toro, jefa de Calidad Educativa de Fundación Integra, sostuvo que “desde el año 2012 hemos estado trabajando con Senadis, son muchos años de experiencia, donde el foco siempre ha estado en el fortalecimiento de nuestras comunidades educativas a través de la inclusión. Estamos comprometidos con ese trabajo, así lo plasma nuestra Carta de Navegación, debemos generar planes de acción que nos permitan valorar y responder positiva y adecuadamente a la diversidad de niños, niñas y sus familias”.

Son cerca de 100 niñas y niños de los jardines infantiles Bam Bam (Mostazal), San José Obrero (Rancagua), Zancudín (Chépica), Santa Ana (Palmilla), Los Almendritos (San Vicente), Trencito de Sueños (San Vicente), Los Cachorritos (San Vicente), El Molino de Colores (Rancagua), Sol del Valle (Machalí), Peumayén (Requínoa), Codegua Centro (Codegua) y Diego Portales (Rancagua), los beneficiados.

Para Ximena Donoso, directora del jardín infantil Santa Ana de Palmilla, “este programa ha sido muy beneficioso tanto para el equipo como para las familias y los niños y niñas. Las estrategias para trabajar con ellos han sido valoradas al interior del establecimiento, pues es lo que necesitábamos. Sin duda, es un gran aporte”, afirmó.

De esta manera, Fundación Integra continúa avanzando en la entrega de una educación de calidad, oportuna y pertinente a las necesidades e intereses de los niños y niñas, aportando a una mejor educación parvularia y contribuyendo como fin último en la construcción de una sociedad y un país más justo y democrático.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Fundación Integra entrega recomendaciones para prevenir accidentes en las casas este invierno

Durante el invierno, las familias adoptan una serie de medidas –tanto al interior de las casas como al estar en espacios abiertos–, para que niños y niñas puedan realizar diversas actividades de forma segura, buscando prevenir la ocurrencia de accidentes o la presencia de enfermedades estacionales.

Daniela Araneda Aros, jefa nacional (i) del Departamento de Prevención de Riesgos en Fundación Integra, recuerda que “por ejemplo, ante las bajas temperaturas, las familias recurren a diversas fuentes de calefacción. Un caso son los guateros para temperar las camas, los que deben colocarse entre las frazadas evitando el contacto directo con el cuerpo o pies. La recomendación es llenarlos sólo a tres cuartos de su capacidad, junto con verificar su estado antes de introducir el agua”.

Dependiendo de la temperatura ambiental, es necesario que niños y niñas utilicen gorros, abrigos, calcetines gruesos, botas, guantes o mitones, especialmente si jugarán al aire libre. Hay que prestar especial atención a las bufandas, para prevenir que se enganchen en juegos u otras superficies.

Al momento de andar en bicicleta, patines u otros rodados, los niños/as deben utilizar casco, junto con no permitir que se trasladen solos/as cuando usen estos dispositivos. Si se registran ráfagas de viento en la zona donde residen, la recomendación es mantenerlos al interior de las casas.

CALEFACCIONAR LAS VIVIENDAS

Las familias también deben adoptar en las casas medidas de cuidado, en especial al utilizar estufas, ya sean eléctricas, a gas o las que operan con parafina –kerosene–. Este tipo de artefactos no deben utilizarse cerca de elementos potencialmente inflamables, como por ejemplo cortinas, junto con evitar que niños y niñas los manipulen, especialmente si están encendidos.

En el caso de los equipos que requieran parafina y gas, es vital mantener una adecuada ventilación de los espacios durante su funcionamiento, para prevenir episodios de peligro con el monóxido de carbono. Tampoco deben usarse en baños y dormitorios, evitando cocinar o secar ropa con ellos.

Si en las casas existe una estufa eléctrica, la recomendación es conectarla directamente al enchufe de pared, evitando usar alargadores (denominados también “zapatillas”). Pero, si es indispensable utilizar estos elementos, hay que verificar que estén en buen estado y debidamente certificados.

“Es vital también recordar que cilindros de gas y envases para comprar y almacenar parafina deben estar en lugares seguros, protegidos de la lluvia y alejados de los niños/as. Por último, bidones u otros elementos autorizados por la autoridad competente, deben contar con medidas de seguridad que dificulten, por ejemplo, que puedan ser abiertos o se derrame su contenido”, cerró Araneda.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Jardín Sobre Ruedas de Integra visita albergues de Doñihue y San Fernando

Este móvil desde el fin de semana ha llegado con sus cinco integrantes: Catalina Valdivia, Belén González, Susan Lizana, Vicente Espinoza y Bryan Acuña, hasta los albergues habilitados en el Liceo Eduardo Charme, de San Fernando, y en el colegio Laura Matus, de Doñihue, para entregar entretención a los niños y niñas que aún permanecen en ellos.

“La idea es poder acompañar a las familias, entregar a los niños un espacio de juego, de diversión, para sacarlos un poquito de la situación que están vivenciando hoy en sus casas. Hemos tenido muy buena recepción, están contentos, les gusta, se divierten y nos agradecen mucho”, señaló Catalina Valdivia, supervisora del Jardín Sobre Ruedas.

Por su parte, Nelly Pérez, quien permanece desde el viernes en el colegio Laura Matus, agradeció la realización de esta iniciativa, destacando que “me parece muy bien, por todas las cosas que han pasado acá. Los niños se entretienen, juegan, mi hija se siente muy feliz cuando llegan”.

El Jardín Sobre Ruedas es una modalidad no convencional de Fundación Integra que entrega educación parvularia gratuita a los niños y niñas de zonas rurales y urbanas de difícil acceso. En la región, existen dos móviles, equipados completamente con materiales pedagógicos, que recorren ocho localidades durante la semana para llevar el jardín infantil a aquellos lugares que no cuentan con un establecimiento formal, ya sea por baja densidad poblacional y/o por dispersión geográfica.

Para Ximena Ortega, directora regional de Fundación Integra, “ha sido muy importante contar con la disposición, voluntad y gran compromiso de este equipo para brindar acompañamiento a los niños y sus familias en este momento tan complicado. Y es que como Integra estamos preocupados por el bienestar no solo de los niños y niñas de nuestros jardines infantiles, sino que también de aquellos que no lo están pasando bien”.

Junto a los jardines infantiles Manchitas de Colores, de Doñihue, y Ayekanún y Los Peques, de San Fernando, el Jardín Sobre Ruedas ha podido entregar momentos de distensión, a través del juego y diferentes actividades, a quienes no lo han pasado bien tras las intensas lluvias que afectaron a la región.

La “oveja Nanai” de Integra enseña a niños y niñas importancia de conocer y explorar sus emociones

Está presente en todos los jardines infantiles y modalidades no convencionales de Fundación Integra del país. A través de experiencias educativas, la “oveja Nanai” acompaña a niños, niñas y equipos pedagógicos en el proceso de descubrir y comprender de forma lúdica qué son y cómo expresar las distintas emociones que experimentamos día a día; por ejemplo, el miedo, alegría o tristeza.

Así, se busca el desarrollo de competencias socioafectivas, las que nos permiten estar bien con nosotros mismos y relacionarnos e interactuar con otros de una forma saludable.

El Modelo de Educación Emocional de Fundación Integra se basa principalmente en el modelo de Competencias Emocionales del español y doctor en Ciencias de la Educación, Rafael Bisquerra, al cual se realizaron ajustes y revisiones por expertos nacionales, para que cumpliera con los lineamientos estratégicos de la institución.

Este modelo plantea cinco competencias centrales –conciencia emocional, regulación emocional, autoestima y autonomía emocional, compromiso social/ético y vínculos bientratantes– y 23 micro competencias adicionales. Acá, las familias y equipos educativos tienen un rol clave, ya que ellos, a través de diversas prácticas pedagógicas, permiten que niños y niñas se acerquen a ellas, las identifiquen y desarrollen aptitudes para canalizarlas de buena forma.

Es aquí donde emerge la “oveja Nanai”, que día a día recibe a los niños y niñas en salas cuna y jardines infantiles de Integra y los acompaña a vivir las emociones, a través de juegos sencillos, que tienen como objetivo, contener, consolar, ayudar a expresar y comprender sus propias emociones.

La directora ejecutiva de Fundación Integra, Nataly Rojas Seguel, indicó que “la implementación de este modelo es un paso clave de la fundación para responder a los retos que presenta la educación parvularia actualmente. Estamos en un contexto donde la pandemia aún nos presenta el desafío de reencontrarnos en el jardín infantil, reactivar los procesos de aprendizaje y potenciar las habilidades de niños y niñas”.

Y… ¿QUÉ SON LAS EMOCIONES?

Existen diversas definiciones para intentar explicar qué son las emociones, las que están marcadas por el contexto en que se consultan y aplican. En Fundación Integra, se determinó seguir lo señalado por el académico Rafael Bisquerra, quien las define como respuestas neurofisiológicas, que surgen a partir de la valoración que se hace de ciertos acontecimientos externos o internos, las cuales además forman parte indisoluble de la vida humana.

Si bien diversos investigadores e investigadoras coinciden en que las emociones pueden clasificarse como positivas o negativas, esto no implica necesariamente que alguna de ellas sea buena o mala. Entender este proceso, permite expandir nuestro lenguaje emocional, yendo así más allá de las emociones básicas y ampliando nuestro mundo de posibilidades afectivas.

“Aunque el Modelo de Educación Emocional describe diversas competencias a desarrollar en las y los párvulos, no debemos olvidar que los primeros destinatarios de la educación emocional deben ser las y los adultos. Este es un proceso que dura toda la vida, lo que compromete a los actores de las comunidades educativas, los que deben trabajar en conjunto para alcanzar el desarrollo integral y aprendizajes significativos en las y los párvulos”, cerró la directora ejecutiva de Fundación Integra.

La primera infancia es un momento clave en el desarrollo de los niños y niñas, donde se despliegan competencias que les permitirá desenvolverse a lo largo de toda su vida, incluyendo la construcción de su “biografía emocional”, la que se transformará en la base de su aprendizaje socioemocional.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Fundación Integra plantea nuevo desafío para InnovaFOSIS 2023

Desde Fosis indicaron que este año el programa contará con un presupuesto de $300 millones para la ejecución de seis pilotos. Cada piloto recibirá $50 millones y acompañamiento de FOSIS para guiarlo en la ejecución del modelo de pilotaje, con el objetivo de escalarlos a políticas públicas. Es importante destacar que InnovaFosis busca soluciones innovadoras que generen nuevas respuestas para distintos desafíos vinculados a la superación de la pobreza.

En la ceremonia de lanzamiento el Director Nacional de FOSIS, Nicolás Navarrete Hernández, destacó que “desde el FOSIS hacemos un llamado a la sociedad civil, el sector privado y la academia para que postulen con ideas innovadoras para mejorar las políticas públicas en materia de superación de la pobreza. Los invitamos a informarse y postular en innova.fosis.cl hasta el 20 de marzo. Chile necesita una sociedad comprometida con derrotar la pobreza”.

Por su parte, la Directora Ejecutiva de Fundación Integra, Nataly Rojas Seguel, se mostró entusiasta con este nuevo desafío “el ecosistema de innovación que propone FOSIS nos parece que es una tremenda oportunidad no sólo para resolver la problemática que enfrentamos, sino que, además, lo vemos como oportunidad en la búsqueda de fortalecer la relación público-privada, y avanzar en el diseño, transformación e implementación de programas e innovaciones basadas en la evidencia”.

Los desafíos 2023 de Innova FOSIS son:

– Espacios seguros de aprendizaje, junto a Fundación Integra.

– Comunidades que promueven el compromiso educativo, junto a la Subsecretaría de Educación.

– Fortalecer lazos para la prevención sociodelictual, junto a la Subsecretaría de Prevención del Delito.

Puedes encontrar más información en https://innova.fosis.cl/es/

 

 

 

Integra se une a red para acercar la educación parvularia a familias migrantes

 

Acercar a las familias migrantes a la oferta de educación parvularia para sus hijos e hijas, es lo que busca Fundación Integra a través de un trabajo colaborativo con diversas instituciones y organismos gubernamentales de la región.

Para Integra el fenómeno de la migración en la región es prioridad, principalmente para que niños y niñas puedan acceder a la educación parvularia y potenciar sus aprendizajes, desarrollo y bienestar.

Al respecto, la directora regional, Pamela Ramirez, sostiene que “estamos muy preocupados en tratar de acogerlos en la medida de nuestras posibilidades, pero también de articularnos con las distintas organizaciones y dependencias gubernamentales que nos permitan, por un lado, caracterizar muy bien este fenómeno, pero también establecer redes para llegar de mejor manera a todos estos niños, niñas y sus familias”.

En la región contamos actualmente con 256 niños y niñas extranjeros que representan el 14,1 % de la matrícula regional; 155 de nacionalidad boliviana, 35 peruanos, 31 venezolanos, 17 colombianos, 9 ecuatorianos, 3 haitianos, 3 argentinos, 2 brasileños y un paraguayo.

Y agrega: “estamos recorriendo diversos lugares como el dispositivo transitorio de playa Lobito y recabando información para gestionar el apoyo a una nueva respuesta migratoria integral que va de la mano con la visión de gobierno y nos parece que es un excelente avance y oportunidad para nosotros como institución garante del bienestar y la protección de los niños y niñas, aportar en esta materia acercándonos a las familias que están en tránsito para informar sobre nuestros establecimientos y abrir toda la red de jardines infantiles y salas cuna que tenemos en el país”, acotó.

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Entre las acciones desarrolladas en los operativos, destacan la difusión de matrícula de salas cuna y jardines infantiles, acompañamiento en el proceso de traslado o gestión de vacantes en otras regiones, entrega de información sobre el proceso SAE 2023 y la generación de Identificador Provisorio, IPE – para todos los niños y niñas del grupo familiar, lo que les permite inscribirse y matricularse en establecimientos de la red Integra.

El equipo regional, liderado por su directora, ha visitado además diversos programas para sumarse al trabajo colaborativo, como el Centro de Acogida Transitorio para niños, niñas y adolescentes del Hogar de Cristo y el de Espacios Temporales de Aprendizaje, ETA que coordina World Vision y Unicef y que contribuye a la garantía del derecho a la educación, así como consolidar una red de apoyo para las familias que les permita continuar con su plan migratorio y puedan, paulatinamente, integrarse al nivel social y económico.

En la región contamos actualmente con 256 niños y niñas extranjeros que representan el 14,1 % de la matrícula regional; 155 de nacionalidad boliviana, 35 peruanos, 31 venezolanos, 17 colombianos, 9 ecuatorianos, 3 haitianos, 3 argentinos, 2 brasileños y un paraguayo.

Con 31 años de experiencia y más de mil 200 salas cuna y jardines a lo largo de todo Chile, Integra es uno de los principales prestadores de educación parvularia en el país y una institución de derecho privado sin fines de lucro, que pertenece a las fundaciones de la Presidencia.

¿Cómo ayudar a los niños y niñas a integrarse al jardín infantil o la sala cuna?

El ingreso de los niños y las niñas al jardín infantil o sala cuna es un hito social muy importante y les exige incorporarse repentinamente a una cultura distinta a la vivida por ellos hasta ese momento. Esto representa importantes desafíos tanto para las niñas/os, como sus familias y cuidadores. Aquí te indicamos cómo apoyar mejor a los niños y niñas en este proceso:

¿Qué les sucede a los niños y niñas?

Las diversas manifestaciones que el/la niño o niña puede expresar en su adaptación al jardín infantil, se explican a partir de las propias características de la etapa del desarrollo en que se encuentre. Los niños y niñas de sala cuna, podrían no llorar al desapegarse de su cuidador/a pero sí estar más irritables o tener problemas para conciliar el sueño, mientras que los niños y niñas más grandes, podrían llorar, sentirse tímidos, “hacer una gran pataleta” o entrar al jardín infantil sin despedirse de quien lo/la lleva.

¡No hay reacciones únicas o esperables frente a este periodo de adaptación, cada niño/a manifiesta sus emociones de acuerdo a su singularidad!

Es normal que algunos niños y niñas vivencien esta experiencia como una suerte de “abandono”, pues les es complejo, aún, comprender algunas nociones de espacio y tiempo, razón por la cual la separación es vivenciada de manera angustiante, ya que no saben por cuánto tiempo ésta se va a extender. Lo importante es darle un mensaje de seguridad y confianza: “te vamos a dejar y en un rato te vamos a buscar”.

¡El periodo de adaptación depende de cada niño y niña, no hay un tiempo definido para ello!

 

¿Cómo apoyar a los niños y niñas en este proceso?

Es fundamental que los niños y niñas puedan vivir esta transición de forma positiva. Para que así suceda es muy importante apoyarlos/as. Por otra parte, ¡es esperable sentir culpa por dejarlo/a, miedo o dudas frente a sus cuidados, pena y/o preocupación por sus reacciones!

✔️ Converse con su hijo/a sobre el jardín infantil. No importa si él/ella no le contesta. Por ejemplo, en el caso de los niños y niñas que van a la sala cuna, transmítale con mensajes cariñosos seguridad y confianza, ¡todo va a estar bien!

✔️ Coméntele a su hijo/a sobre algunos hitos del día a día en el jardín infantil. De esta forma y de manera progresiva los niños y las niñas irán comprendiendo qué sucederá, que viene después de… “Te voy a dejar al jardín, vas a jugar con los niños, luego almorzarás, después de eso nos veremos” ¡Recuerde que anticiparse a lo que sucede les da confianza!

✔️ Explíquele que tendrá nuevos amigos y aprenderá cosas nuevas. ¡Es una oportunidad para aprender de manera entretenida a través de juegos y nuevas experiencias!

✔️ Transmítale la importancia de ser constante con los hábitos y horarios de alimentación y sueño, que seguro se modificarán con la entrada al jardín infantil. ¡Recuerde que una rutina organizada les da seguridad, ya que el niño/a puede anticiparse a lo que vendrá!

✔️ Evite traspasarle sus miedos y aprensiones a los niños y niñas. Tener conciencia de que nos pasan cosas nos permite -por una parte- empatizar con el proceso de los niños/as, lo que facilitará abrir el diálogo de las emociones que nos van surgiendo con él o ella.

✔️ ¡Recuerde que el lenguaje corporal dice mucho, si está tenso/a o preocupado/a su hijo/a lo notará. Si se muestra seguro, tranquilo y confiado su hijo/a estará bien y será más fácil este proceso para ellos/as!

 

Documentos de apoyo sobre adaptación:

Cartilla Adaptación al jardín infantil Versión español 

Cartilla Adaptación al jardín infantil Versión creolé

Cartilla Adaptación al jardín infantil Versión aymara

Cartilla Adaptación al jardín infantil Versión mapudungun

Cartilla Adaptación al jardín infantil Versión rapa nui