Niñas y niños de Renca se reúnen con el alcalde de la comuna

¿Se come toda la comida? Fue una de las preguntas que sorprendió al alcalde de Renca, Claudio Castro, al reunirse con las niñas y niñas del jardín infantil Papelucho, ubicado en la misma comuna. El edil respondió que sí y que su comida favorita son las ensaladas y frutas.

La actividad, que consideró la visita a la sala del concejo, la oficina del alcalde y un recorrido por el patio del edificio municipal, se enmarca en el Mes de las Infancias ¡Hoy jugamos, mañana también!, desarrollada por Fundación Integra, durante el mes de agosto, para relevar a los niños y niñas como ciudadanos activos, sujetos de derechos y protagonistas de sus aprendizajes en todos los ámbitos de la sociedad.

“Los niños y niñas del jardín Papelucho lo pasaron muy bien, ellos tenían claro que iban al municipio, que es la casa de la comuna y qué hace el alcalde. Fue una excelente oportunidad para que pudieran desarrollar su conciencia cívica y participar desde la primera infancia en las decisiones de su comuna y de su país”, agregó la directora del establecimiento.

Durante el encuentro, el alcalde Castro les comentó a los párvulos que su principal tarea es trabajar para mejorar la calidad de vida de las personas de Renca. Asimismo, afirmó que: “Poner en el centro a niños y niñas implica no solo velar por la protección de sus derechos, sino que incentivar su participación en la comunidad”

Por su parte, Alejandra Troncoso, directora del jardín infantil Papelucho, señaló: “Esta es una instancia muy importante para los niños y niñas, para que creen conciencia de lo que es vivir en comunidad, el municipio es el primer acercamiento que tiene que ver con la democracia. Los más cercano para participar en comunidad, sentirse parte de un sistema donde todos importamos es el municipio, es lo más cerca que tienen los niños y niñas al sistema político y de organización civil que tenemos”.

“Los niños y niñas del jardín Papelucho lo pasaron muy bien, ellos tenían claro que iban al municipio, que es la casa de la comuna y qué hace el alcalde. Fue una excelente oportunidad para que pudieran desarrollar su conciencia cívica y participar desde la primera infancia en las decisiones de su comuna y de su país”, agregó la directora del establecimiento.

Integra pertenece a las Fundaciones de la Presidencia de la República. Con más de 31 años de experiencia, es uno de los principales prestadores de educación parvularia en el país y cuenta con más de 1.200 establecimientos gratuitos, a los que asisten más 85 mil niños y niñas en todo Chile.

Irina Karamanos visita jardines infantiles de Integra en Puerto Aysén

La mañana del jueves 18 de agosto, Irina Karamanos, presidenta de Fundación Integra, visitó la sala cuna y jardín infantil Los Chilcos que se encuentra ubicada en la ciudad de Puerto Aysén, con el fin de conocer el trabajo del equipo educativo y compartir experiencias pedagógicas con niños y niñas que asisten al establecimiento con sello pedagógico artístico cultural.

Posteriormente, se dirigió al jardín infantil Gotitas de Lluvia en la misma localidad, donde participó en actividades con los párvulos relacionadas con el Mes de las infancias que durante agosto la Fundación ha estado conmemorando.  Es así como en conjunto con la Educadora de Lengua y Cultura Indígena, (ELCI), realizaron una actividad de cuidado y protección al medioambiente en la que conocieron las diversas partes de las plantas, además de reconocer lo que se necesita para que estas puedan crecer.

“Como equipo estamos muy contentas y agradecidas de la visita que realizó la presidenta de Fundación Integra a nuestro jardín. Ella fue muy cercana, le dio la importancia que se merecen, a las niñas y niños y, además, participó de una actividad que realizamos con Conadi. Creo que es fundamental que autoridades como ella vengan a los establecimientos y se preocupen de poner a las niñas y niños en el centro”, afirmó Francisca Mendoza Arias, directora del jardín Gotitas de Lluvia.

La presidenta de la Fundación recorrió las dependencias de Gotitas de Lluvia junto a Francisca Mendoza Arias, directora del establecimiento que en 2021 obtuvo el Reconocimiento Oficial y al que asisten 28 niños y niñas para recibir educación parvularia de calidad.

Karamanos destacó el sello “Activo saludable” del jardín Gotitas de lluvia, que busca fomentar la participación de los niños y niñas en actividades deportivas, artísticas, lúdicas y medioambientales, señalando que: “Lo que nos importa es conocer y reconocer el trabajo que despliega Integra en cada localidad, conversar con toda la comunidad educativa para así tomar decisiones fundadas en la experiencia, con pertinencia local y cultural, y entendiendo que respetar los derechos de los niños y niñas es verlos como sujetos sociales y ciudadanos”.

Y agregó: “Es necesario recorrer estas distancias, compartir el mismo terreno y los mismos tiempos, escuchar cara a cara como se vive aquí. Nuestra prioridad es garantizar el quehacer de la fundación en el mediano y largo plazo, trabajando por una educación parvularia integral”.

Según Francisca Mendoza Arias, directora del jardín infantil, “como equipo estamos muy contentas y agradecidas de la visita que realizó la presidenta de Fundación Integra a nuestro jardín. Ella fue muy cercana, le dio la importancia que se merecen, a las niñas y niños y, además, participó de una actividad que realizamos con Conadi. Creo que es fundamental que autoridades como ella vengan a los establecimientos y se preocupen de poner a las niñas y niños en el centro”, dijo.

Es importante mencionar que el establecimiento Gotitas de Lluvia es uno de los 4 jardines infantiles de Integra en Puerto Aysén y, a través de su sello pedagógico, favorece aprendizajes por medio de la exploración del entorno y la importancia de la actividad física, para el desarrollo equilibrado de las niñas y niños, promoviendo estilos de vida saludables en armonía con su contexto.

Integra pertenece a las Fundaciones de la Presidencia, y es la red más grande de salas cuna y jardines infantiles del país que entrega educación de calidad y gratuita a más de 86 mil niños y niñas.

Integra lanza libro sobre historias de vida de mujeres

Este jueves 11 de agosto, con la presencia de Irina Karamanos, Fundación Integra lanzó el libro “Yo nunca dejé de quererme, siempre mujer”, en el Centro Cultural La Moneda. La obra recoge 71 testimonios de trabajadoras de salas cuna, jardines infantiles y oficinas de todo el país, quienes por medio de sus historias de vida, cuentan cómo han superado barreras sociales, inequidades de género, desigualdades, violencia, pobreza y estereotipos.

Los relatos evidencian la relevancia que ha tenido la institución en sus vidas, y son un reconocimiento a las mujeres de Fundación Integra como modelos de rol, referentes y líderes naturales, capaces de reconocerse y de inspirar a otras personas, a través de sus relatos de esfuerzo, superación y resiliencia. De hecho, durante la actividad, las trabajadoras de Integra: Andrea Casanueva, Juana de Dios Paine, Alejandra Esquivel y María Angélica Cornejo, entregaron sus testimonios.

Claudia Lagos, Directora Ejecutiva de Integra, destacó que el lanzamiento de este libro es un hito para la institución, ya que pone en evidencia una realidad que viven las mujeres tanto de la Fundación, como de la sociedad. “Más allá de lo emocionante que pueden ser estos relatos, son un aliciente para poder avanzar en la perspectiva de la igualdad y de ir construyendo caminos, con el objetivo de que las mujeres cada vez tengan más y mejores oportunidades en el ámbito personal y profesional y así puedan reparar episodios de postergación que se reflejan en esta obra”, dice.

Y añade: “Hoy, afortunadamente, estamos con una disposición y condición que nos permite avanzar para transformar la sociedad y, para que experiencias de esa naturaleza, no vuelvan a ocurrir o sucedan cada vez menos”.

Andrea Casanueva es coordinadora de Modalidades No Convencionales de Integra en la región de Tarapacá, y es una de las trabajadoras de la institución que dio su testimonio en el libro. “El poder participar en este libro, me reconectó con las mujeres de mi familia y me permitió mirar la trascendencia que ha tenido Integra durante toda mi vida, así como el impacto que hoy puedo provocar en las niñas, niños y familias de mi región que son parte de las Modalidades No Convencionales”, dijo y agregó: “Y, cómo a través de este libro y de todas las historias que contiene en sus páginas, podemos trascender e impactar en otras mujeres y otras niñas”.

El Departamento de Gestión Social y Beneficios de la Dirección de Personas con el apoyo de la Dirección de Asuntos Institucionales y Comunicaciones de Fundación Integra, estuvo a cargo de la recopilación de las historias. Mientras el financiamiento para su realización corresponde a un concurso realizado por la Caja de Compensación Los Andes.

Fundación Integra forma parte de las Fundaciones de la Presidencia y lleva 31 años entregando educación gratuita de calidad a través de una amplia red de salas cuna, jardines infantiles y modalidades no convencionales presente en las 16 regiones del país. Más de 25 mil trabajadoras y trabajadoras se desempeñan en la institución.

Descargar PDF  libro libro “Yo nunca dejé de quererme, siempre mujer”

Please wait while flipbook is loading. For more related info, FAQs and issues please refer to DearFlip WordPress Flipbook Plugin Help documentation.

Presidenta de Fundación Integra visita a niñas y niños de jardín puertomontino

La presidenta de Fundación Integra, Irina Karamanos, realizó un recorrido para conocer la sala cuna y jardín infantil Nueva Cumbre, de la comuna de Puerto Montt, donde participó junto con niñas, niños y el equipo educativo en una entretenida actividad en torno al arte.

En su primera visita a Puerto Montt, en su calidad de Presidenta de la Fundación, Karamanos visitó las dependencias del establecimiento de educación parvularia, que cuenta con dos niveles salas cuna y dos niveles medios, para brindar atención a 52 niñas y niños.

En la ocasión, Karamanos destacó el trabajo que realiza el equipo del jardín, que cuenta con un sello pedagógico artístico y señaló que “ha sido una muy buena experiencia poder visitar las salas y a los niños y niñas haciendo muchas actividades relacionadas al arte y sus derechos “.

Durante su visita, Karamanos también enfatizó que “en este Mes de las Infancias se busca visibilizar a los niños y niñas relevando los derechos, poniéndolos en el centro de las actividades lúdicas, recreativas, que permitan también que sean protagonistas de sus experiencias y así ejercer activamente su ciudadanía, porque es importante que nosotros entendamos también cual es la agencia que tienen y el rol que juegan las infancias en la sociedad y promover una mirada más plural e inclusiva que permita dar cuenta de las múltiples maneras de vivir la niñez”.

Paola Figueroa, directora del jardín Nueva Cumbre, agradeció la presencia de Irina Karamanos,  en su primera visita a un establecimiento en la región. “Este tipo de instancia nos permite dar a conocer el trabajo diario que desarrollamos los jardines infantiles y salas cuna de Integra y mostrar que los niños y niñas son protagonistas y sujetos de derechos que crecen y se desarrollan de manera plena y feliz”, señaló Figueroa.

El jardín Nueva Cumbre, que comenzó a funcionar el año 2017 y que cuenta con Reconocimiento Oficial desde el año 2019, recientemente recibió certificado de la Unesco por su participación en Semana de la Educación Artística, entre otras iniciativas para potenciar el desarrollo integral de niñas y niñas.

Actualmente, Integra cuenta en la región de Los Lagos con 98 salas cuna y  jardines infantiles, además de 12 modalidades no convencionales (Jardín Sobre Ruedas y Jardín Entre Islas), que brindan educación parvularia a más de 6 mil niños y niñas.

Integra pertenece a las Fundaciones de la Presidencia, y es la red más grande de salas cuna y jardines infantiles del país que entrega educación de calidad y gratuita a más de 86 mil niños y niñas.

Volver al jardín: un proceso de adaptación de toda la familia

El receso de actividades por vacaciones de invierno, fue tiempo suficiente para que niños y niñas adquirieran una rutina distinta a la acostumbrada en la sala cuna y jardín infantil. Por lo anterior, la ansiedad y el temor son emociones que se pueden presentar en las familias durante los primeros días del regreso de los niños y niñas a los establecimientos educativos.

Así como los lactantes y párvulos pueden experimentar angustia por la separación de los adultos que los cuidaron y con quienes, probablemente, pasaron la mayor parte del tiempo, lo mismo puede suceder con las mamás, papás y otros integrantes del grupo familiar que pueden tener sentimientos de culpa por dejarlos en el jardín. Ante esta situación, Schlomit Creixell, profesional del área de Currículum de la Dirección de Educación de Fundación Integra, nos invita a estar alertas y anticipar los cambios.

“Estos sentimientos son habituales en los procesos de adaptación que niñas y niños vivirán durante toda su vida. En lo primero que podemos apoyarles es ajustando sus rutinas, por ejemplo, puede que durante el receso invernal las comidas hayan cambiado el horario habitual que tenían durante su asistencia al jardín infantil, por lo que es importante volver a modificarlos pensando en la organización del tiempo que tendrán en los establecimientos, por ejemplo, desayuno, almuerzo y horarios de siesta”, agrega Schlomit Creixell.

Volver a un espacio de juego y aprendizaje

Cuando niños y niñas vuelvan a los establecimientos se producirá un proceso de resocialización con sus pares, a través de interacciones mediadas o no por los equipos educativos. Estas experiencias serán, para muchos de ellos pilar de sus relaciones futuras, así como de adaptabilidad social y cultural.

adaptacion_retorno_vacaciones_invierno (3)

Durante los primeros días, es común que los equipos educativos de las salas cuna y jardines infantiles Implementen diversas estrategias y planifiquen actividades lúdicas para propiciar que niñas, niños y bebés se sientan cómodos sientan cómodos en el nuevo entorno y disminuyan su ansiedad, explica la profesional de la Dirección de Educación de Fundación Integra.

Para la mayoría de los niños y niñas, el retorno a las aulas será un proceso de continuidad, luego del receso invernal. Aunque también, puede ser la primera experiencia de cuidados con un adulto diferente a la familia nuclear, en este caso puede que la adaptación requiera más apoyo y contención.

Anticiparse y transmitir tranquilidad son claves

Alicia Tapia, profesional Familia y Comunidad de la Dirección de Promoción y Protección de la Infancia (DPPI) de Fundación Integra, nos recuerda que, “como adulto siempre debemos tener presente que todo lo que digamos y hagamos es un modelo a seguir para los niños/as, por tanto, si nuestras actitudes y comportamientos hablan de lo difícil que es el proceso de retorno, ellos/as lo vivirán de la misma manera. En este caso, la invitación es a ver el proceso como una oportunidad para aprender y experimentar día a día”.

La profesional del Área de Familia y Comunidad, confirma que entre los factores que inciden en el éxito del proceso de adaptación está la tranquilidad que los padres o adultos responsables les transmitan a los niños y niñas, antes, durante y después de la transición.
“Para los adultos a veces las adaptaciones son más complejas que para los niños, por lo tanto, si necesita hacer nuevas coordinaciones en su grupo familiar, converse y prográmese para buscar soluciones que les acomoden a todos, si las tiene, acuda a sus redes de apoyo”, añade la profesional de Familia y Comunidad, Alicia Tapia.

adaptacion_retorno_vacaciones_invierno (1)

Además, se debe tomar en cuenta la personalidad y carácter de niñas y niños, que desde temprana edad pueden dar signos de mayor independencia o, por el contrario, de una menor capacidad de adaptación a nuevos escenarios, aunque es importante recordar que no hay un tiempo asociado al periodo de adaptación y va a depender de cada niño o niña. Se suma a lo anterior, el trabajo de contención y apoyo que los equipos educativos de las salas cuna y jardines infantiles lleven a cabo durante los primeros días del retorno a las aulas. En definitiva, el trabajo coordinado entre familias y equipos educativos harán que este retorno a las salas cuna y jardines infantiles sea una experiencia de aprendizaje y desarrollo para todos los involucrados.

Para tener en cuenta

Los profesionales de Fundación Integra, nos entregan algunas buenas ideas para poner en práctica y lograr que este retorno sea lo más natural posible para todos los actores involucrados:
✔️ Hable con el niño y niña sobre el proceso que vivirá y explíquele con palabras simples que volverá a jugar con sus amigos/as del jardín infantil y a compartir con el equipo educativo.
✔️  En la medida de lo posible, se sugiere que durante los primeros días de regreso al jardín los párvulos y lactantes vayan adaptándose paulatinamente a las rutinas, para moderar la ansiedad que causa la separación de la familia. Sin embargo, debe ser un proceso continuo, todos los días a la misma hora, para entregar certidumbre y predictibilidad al niño.
✔️  Recuérdele al niño o niña que regresa a un espacio seguro, donde lo cuidarán y tendrá la oportunidad de jugar con sus amigos.
✔️  Explíquele que puede llevar al jardín o sala cuna algún objeto con el que se sienta seguro y que le recuerde a su hogar.
✔️  Nunca le mienta, ni le haga promesas que no podrá cumplir. No desaparezca de forma abrupta, diciendo cosas como “voy a comprar y vuelvo”. Estos mensajes generan ansiedad, porque el niño o niña espera que usted vuelva y harán que desconfíe de sus acciones en el futuro.
✔️ Al retirarse del jardín infantil, diga adiós con naturalidad y enfatice el hecho de que volverá.

 

El derecho al ocio en la infancia

Los períodos de vacaciones o receso educativo suponen, en el pensamiento de muchos adultos, momentos en los que se debe “asegurar” la entretención de niños y niñas, generando un sin fin de actividades y panoramas que impidan que el aburrimiento infantil asome. Es como si las capacidades parentales se jugaran en ello.

Hay varios supuestos detrás de esta idea que se sustentan más en las comprensiones y expectativas de la vida adulta, que en un verdadero conocimiento de las capacidades y maneras de actuar y disfrutar de niños y niñas.

Por un lado, está la idea de que la capacidad de generar diversión es externa y adulta, y por otro, que la entretención se sustenta principalmente en estar “activos”.

Contrario a lo que se pueda pensar, la disposición al ocio es una capacidad humana útil y necesaria, que puede ser cultivada y desarrollada desde los primeros años de vida. Permite descubrir habilidades propias, conocerse a sí mismo, orientarse hacia algún propósito, desarrollar la autonomía y la capacidad de tomar decisiones, por nombrar solo algunas de sus potencialidades. Porque no tener un plan da la opción de generarlo y con ello desplegar estas capacidades.

Crear, explorar, experimentar y disfrutar pueden ser consecuencias del ocio, y la generación a partir de ello, de experiencias desafiantes y entretenidas, el punto de partida en el desarrollo de un pensamiento divergente e innovador, clave para desenvolverse en el mundo hoy.

En el actual contexto de sobre carga mental y física generado por la pandemia, en el que el descanso es fundamental para un adecuado desarrollo y bienestar, la invitación es a confiar más en las capacidades de niños y niñas, acompañar su creatividad, observarlos y escucharlos, seguir su compás, pero, sobre todo, reconocer al ocio como su derecho.

Columna de opinión escrita por Claudia Lagos Serrano, Directora Ejecutiva de Fundación Integra (4 de abril al 8 septiembre de 2022). Educadora de párvulos de la Pontificia Universidad Católica, con doctorado en Educación de la Universidad ORT de Uruguay.

Niñas y niños de Hogar Santa Catalina disfrutaron en el MIM

Robótica, percepción, energía, luz, fueron algunas múltiples sensaciones para una gran experiencia de aprendizaje que vivieron de manera lúdica y muy entretenida en el Museo Interactivo Mirador (MIM). A través del movimiento y probando cada uno de los juegos y módulos, niñas y niños del Hogar Santa Catalina de Quinta Normal aprendieron de ciencia, arte y tecnología.

La actividad fue organizada por el equipo de educativo de Fundación Integra a cargo de esta modalidad: Miriam Saavedra, supervisora, Paulina López, educadora de párvulos y Marcela Quilodrán, asistente de párvulos.

Desde el 2014 el Hogar Santa Catalina es una de las modalidades no convencionales que tiene Integra en la Región Metropolitana Norponiente y se implementa a través de un convenio con Fundación Acoger. Denominada “Mi Jardín, Mi Hogar”, se trata de una modalidad que permite apoyar a niñas y niños en su etapa de educación inicial, entregándoles atención por subgrupos de acuerdo a las necesidades de cada uno/a y proponiendo experiencias globalizadoras e inclusivas con énfasis en el vínculo, la conciencia y la regulación emocional.

En estos centros de atención las educadoras y técnicos en educación parvularia desarrollan actividades centradas en el juego y la recreación y ponen énfasis en el promoción de los derechos de las y los niños, además de incorporar a las familias y cuidadores en la medida de los posible.

600 salas cuna y jardines infantiles de Integra tienen Reconocimiento Oficial

 Una noticia para celebrar, entregó esta semana Claudia Lagos, directora ejecutiva de la institución, quien dio a conocer que Fundación Integra suma 600 salas cuna y jardines infantiles con Reconocimiento Oficial, certificación estatal que confirma que nuestros establecimientos cumplen con estrictos estándares pedagógicos, jurídicos y de infraestructura.

La certificación número 600 se cumplió con el Reconocimiento Oficial entregado a la sala cuna y jardín infantil Oasis de Niños, ubicado en la localidad rural de Los Pozos, en la comuna de Canela, mediante la Resolución Exenta 1492 del 24 de junio de 2022, firmada por la Seremi de Educación de la Región de Coquimbo, Cecilia Ramírez.

Por su parte, la Directora Regional (I), Susana Veas, felicitó a todos quienes han contribuido a este logro en la región y comentó: “Estamos muy contentos porque a nivel país en Fundación Integra ya contamos con 600 establecimientos con Reconocimiento Oficial, y más aún porque el número 600 resulta ser de nuestra región, con el jardín Oasis de niños. Esto, de alguna manera, nos permite valorar todavía más el trabajo educativo que se desarrolla en las zonas rurales, donde se superan obstáculos como la distancia o la sequía, por ejemplo, con el objetivo de entregar a las niñas y niños aprendizajes de calidad y con condiciones de bienestar y afecto”,

Reconocimiento Oficial

El Reconocimiento Oficial del Estado es un acto administrativo mediante el cual el Ministerio de Educación otorga a un establecimiento educacional la facultad de certificar la aprobación de cada uno de los ciclos y niveles que conforman la educación regular. Para alcanzarlo, los establecimientos deben cumplir la normativa educacional en lo relativo a aspectos pedagógicos, jurídicos y de infraestructura, con el fin de ofrecer a las niñas y niños un ambiente propicio para el aprendizaje, con un elevado estándar de calidad.

“Sueño con un Chile que valore y proteja la infancia”

Marcia Olhaberry es psicóloga y licenciada en psicología de la Universidad Chile y Doctora en Psicoterapia de la Pontificia Universidad Católica de Chile y de la Universidad de Heidelberg. Actualmente, forma parte de los claustros académicos del Programa de Doctorado en Psicoterapia y del Programa de Magíster en Psicología Clínica UC. Es la representante de la Sra. Marcela Cornejo Cancino, Directora de Escuela de Psicología de la UC, en Consejo Nacional de Fundación Integra.

Como consejera, Marcia señala que puede compartir conocimientos desde su disciplina, principalmente, desde la mirada de la salud mental, el desarrollo, la parentalidad y los vínculos tempranos.

Desafíos en torno a las infancias: “Generar condiciones laborales adecuadas y de formación continua para quienes trabajan directamente con niños/as, otorgando el valor que estas labores tienen para toda la sociedad”.

 ¿Cuáles cree que son las funciones más relevantes que cumplen los consejeros y consejeras de Fundación Integra, pensando en el bienestar de niñas y niños?

El Consejo Nacional a los directivos de la Fundación Integra desde su trayectoria profesional y conocimiento basado en la evidencia. También contribuye a la toma de decisiones informadas en torno al diseño, implementación y evaluación del proyecto educativo. Otras funciones relevantes son: velar por la calidad de la educación preescolar desde una mirada integral, inclusiva y respetuosa de las necesidades infantiles y familiares; enfatizar la relevancia de las experiencias interaccionales y los contextos en que estas ocurren durante la primera infancia, y por tanto de la calidad de la educación preescolar, para el desarrollo y la salud mental infantil, así como para el retorno de la inversión que realiza el Estado (la evidencia muestra que es mayor en esta etapa que en etapas posteriores de la vida); promover en la toma de decisiones una mayor equidad y oportunidades desde la primera infancia, tanto para preescolares y sus familias como para quienes trabajan en la Fundación; contribuir a resguardar condiciones dignas de trabajo para quienes realizan labores de servicio, técnicas y profesionales en la fundación; y velar por procesos transparentes y ajustados a las necesidades de la Fundación y sus usuarios en las licitaciones y asignación de recursos.

 ¿Por qué es importante que exista el Consejo y qué valor le entrega al hecho que sea integrado por miembros con diferentes miradas (tanto del mundo académico, como representantes del Estado)?

Permite recoger miradas de la primera infancia y la educación preescolar desde distintas disciplinas, enriqueciendo la comprensión de esta etapa. Favorece, además, el diálogo entre la academia, la evidencia científica y las políticas públicas, intentando acortar la brecha entre “lo que se sabe y lo que se hace” en la educación de los/as niños/as entre 3 meses y 4 años.

“Sueño con un Chile que valore y proteja la infancia, que tome conciencia de los primeros años de vida como un “período crítico” que requiere atención y cuidados específicos”.

¿Qué importancia tiene para usted integrar este Consejo?

Lo considero una oportunidad para impactar positivamente desde el conocimiento de mi disciplina y mi trayectoria profesional, la toma de decisiones orientadas a asegurar una educación preescolar integral y de calidad para las niñas, niños y familias de menores ingresos en nuestro país.

¿Qué espera realizar como Consejo durante estos cuatro años?

Contribuir con conocimientos desde la psicología infantil y la evidencia sobre desarrollo y relaciones familiares tempranas para promover la calidad de la educación preescolar. También espero favorecer redes de colaboración entre académicos UC con experiencia en primera infancia y la Fundación.

¿Cómo sueña el Chile de las y los niños?, ¿cómo los consejeros/as y usted en particular, pueden aportar a realizar esa visión?

Sueño con un Chile que valore y proteja la infancia, que tome conciencia de los primeros años de vida como un “período crítico” que requiere atención y cuidados específicos, que logre desarrollar políticas de Estado que permitan definir objetivos a largo plazo y cambios sustantivos para los niños/as en educación, salud, calidad de vida y oportunidades, más allá de los intereses de cada gobierno durante su período de ejercicio.

Como consejera puedo compartir conocimientos desde mi disciplina, principalmente, desde la mirada de la salud mental, el desarrollo, parentalidad y los vínculos tempranos.

¿Cuáles son, a su juicio, los principales desafíos hoy en día en torno a las infancias?

Entre estos desafíos, se encuentran lograr mayor igualdad de oportunidades para todos los niños/as que viven en Chile en salud, educación y derechos básicos que permitan un desarrollo saludable y la expresión de sus potencialidades. Desinstitucionalizar la infancia vulnerada, generando programas de apoyo a las familias, con familias de acogida entre otras estrategias. La evidencia muestra que la institucionalización no da buenos resultados y favorece nuevas vulneraciones.

También, considero clave brindar mayor apoyo a los cuidadores primarios durante la crianza temprana, entendiendo que durante los primeros años se construyen las bases de los años siguientes y es muy difícil criar en contextos carenciados (bajos ingresos, empleos precarios, condiciones de vida desfavorables, bajo acceso a prestaciones en salud mental entre otros). Se requiere incluir la noción de trauma y transgeneracionalidad para comprender las dificultades y fallas de madres/padres que fueron en su infancia también niños/as vulnerados, que no recibieron apoyo y no pudieron elaborar sus propias historias.

Debemos avanzar en una mayor cobertura de atenciones en salud mental y creación de prestaciones desde el nacimiento en adelante incluyendo a los cuidadores primarios. La salud mental sigue siendo uno de los aspectos que hay que resguardar en infancia, por eso tenemos que visibilizar el sufrimiento psicológico de los niños/as y generar alternativas de atención diádica y tríadica junto a sus cuidadores. Tratar tempranamente permite cambio en tiempo acotado y la prevención de problemas de salud mental y del desarrollo de otros de mayor   envergadura.

Finalmente, se requiere mayor inversión y cuidados durante el período periparto, dado que constituye un momento de alta vulnerabilidad tanto para el niño/a como para su madre y las/os cuidadores primarios, así como crear políticas de estado (a largo plazo) a favor de la protección, el cuidado y las condiciones necesarias para un desarrollo infantil saludable y generar condiciones laborales adecuadas y de formación continua para quienes trabajan directamente con niños/as, otorgando el valor que estas labores tienen para toda la sociedad.

“Una sociedad que se ocupa de sus niños y niñas es una sociedad sana”

Miguel Ángel Rozas Reyes es profesor y experto en el desarrollo de políticas públicas en la línea del mejoramiento de los aprendizajes e inclusión educativa. Desde hace dos años, es director ejecutivo del Programa Interdisciplinario de Investigaciones en Educación, PIIE, y forma parte del Consejo de Fundación Integra. Con humildad afirma que su paso por la educación ha marcado profundamente su visión del mundo.

En el pasado fue Coordinador Nacional de la Estrategia LEM (Lectura, Escritura y Matemática) y del Programa de Becas de Desarrollo de Talentos Académicos del Ministerio de Educación. Además de Coordinador Nacional del Programa Escuelas del Ministerio de Educación, por lo que conoce muy bien la forma en que surge la política pública.

A continuación, te invitamos a conocer la mirada y análisis realizado por el consejero Miguel Ángel Rozas, sobre el desafío de visibilizar las infancias y cómo su rol en el Consejo de Integra puede ser un aporte en este reto.

Tenemos el desafío de asegurar, más allá de las contingencias sanitarias, climáticas, culturales y otras, el diseño de una estrategia para que los niños y niñas tengan las oportunidades de ir constituyéndose como ciudadanos y ciudadanas

¿Cuáles cree que son las funciones más relevantes que cumplen los consejeros de Fundación Integra, pensando en el bienestar de niñas y niños?

Me parece importante y valioso que exista una instancia que acompañe a la Fundación y, particularmente, a la Dirección Ejecutiva, que es quien tiene que llevar a cabo las iniciativas, proyectos y programas. En este sentido, hay una fuerza y energía en el Consejo que se suma a lo que se hace cotidianamente.

Otra de las funciones que destaco es asesorar en el proceso de toma de decisiones. Es decir, que estas siempre tengan norte o foco en ofrecer lo mejor para niños y niñas, en los programas educativos, pedagógicos, gestión institucional, infraestructura y otras áreas de desarrollo de la Fundación.

¿Por qué es importante que exista el consejo y qué valor le entrega al hecho que sea integrado por miembros con diferentes miradas (tanto del mundo académico, como representantes del Estado)? (más allá de un tema legal)

Es bueno y positivo incorporar una mirada externa, porque muchas veces los árboles no nos dejan ver el bosque. La posibilidad de tener una mirada en perspectiva, más de largo plazo, más integral, más estratégica, a veces se ve nublada por el día a día, por resolver las urgencias o emergencias.

Valoro el hecho de tener una mirada crítica, en el sentido de hacerse las preguntas que son necesarias para poder ir mejorando, para ir haciendo una labor más efectiva que acompañe al logro de los propósitos de la Fundación.

Es importante ir analizando cómo somos capaces de interrogar y hacer preguntas inteligentes, para identificar problemas, cualificarlos y apoyar en la solución.

Si uno pudiera hacer una pirámide, entendiendo por la cúspide de la pirámide a quienes están más visibles, serían primero los hombres adultos, después los hombres jóvenes, las mujeres adultas y jóvenes, luego la tercera edad y finalmente los niños y niñas.

¿Qué importancia tiene para usted integrar este Consejo?

Yo asumí hace dos años mi función en el PIIE, y me encontré con esta labor de consejero que, debo reconocer, que me encantó.

En este punto, me quiero permitir una reflexión personal: creo que una sociedad que se ocupa preferentemente, de manera prolija de sus niños, niñas y de sus jóvenes y por supuesto de la educación, es una sociedad que está sana, es una sociedad que tiene horizontes, es una sociedad que puede pensar en el hoy, pero también puede pensar hacia adelante, hacia el mañana y preguntarse qué queremos construir.

En este sentido, ser parte del Consejo de Fundación Integra -que tiene como propósito ofrecer a la comunidad un servicio para niños y niñas en etapa inicial-, me parece que es muy consonante con lo que he dicho anteriormente.

Hay también una convicción de mi parte de incidir en el escenario actual. Nos quejamos mucho en Chile de lo mal que está la educación y usamos como parámetros las pruebas estandarizadas, como el Simce o resultados de pruebas estandarizadas en las que Chile participa a nivel internacional, vemos los resultados y decimos que estamos mal. Pero hay una inversión económica en primera infancia, que muchas veces dejamos de lado. Probablemente, todas esas deficiencias en educación podrían superarse si tuviéramos una educación de calidad en primera infancia.

Ser consejero de una institución que se dedica a trabajar en infancia es un privilegio y tengo la convicción profunda de que, si hacemos un buen trabajo en primera infancia, tendríamos que dejar de preocuparnos de las pruebas estandarizadas. Nos ha costado en Chile, apropiarnos de aquello. Hago aquí una referencia al Presidente Gabriel Boric, porque él hizo algo que no hacemos normalmente los adultos, que es nombrar a los niños y niñas, ya nombrarlos es un avance importante, porque están ausentes de todo, de los discursos políticos, de la inversión pública y privada.

¿Qué espera realizar como Consejero durante estos cuatro años?

Creo que hay una cuestión en la que a mí me parecería muy interesante avanzar, que tiene que ver con cómo la Fundación mejora su quehacer. Por ejemplo, en el tema de la asistencia de los niños y niñas durante el período de invierno, cuando existe un alto índice de enfermedades respiratorias. La pregunta que tenemos que hacernos es cómo suplir esta situación, lo más probable es que no tengamos presencialidad, pero tenemos que ver la manera de asistir a los niños y niñas, ver cómo les seguimos ofreciendo un espacio educativo de calidad, que es fundamental para su socialización, crecimiento, aprendizaje, para su vinculación con el mundo y su descubrimiento del mismo. En definitiva, para su constitución, desde que están en el vientre, como ciudadanos y ciudadanas con todos los derechos y todo lo que ello implica.

Tenemos el desafío de asegurar, más allá de las contingencias sanitarias, climáticas, culturales y otras, el diseño de una estrategia para que los niños y niñas tengan las oportunidades de ir constituyéndose como ciudadanos y ciudadanas. Hay que ver cómo incorporamos a las familias en ese desafío y creo que la experiencia de la pandemia nos puede ayudar, por ejemplo, retomando las experiencias con los niveles medios, intermedios y los primeros niveles de educación básica. Aunque está claro que esto supone una preparación adicional de los equipos educativos.

Una de las prácticas que no son tan usuales en educación, pero que la Fundación realiza, es mirar las políticas públicas desde una mirada interdisciplinaria: si no nos vinculamos con otros, con las áreas de deportes, cultura, salud, no hay una educación integral.

¿Cómo sueña el Chile de las y los niños?, ¿cómo los consejeros y usted en particular pueden aportar a realizar esa visión?

Si uno pudiera hacer una pirámide, entendiendo por la cúspide de la pirámide a quienes están más visibles, serían primero los hombres adultos, después los hombres jóvenes, las mujeres adultas y jóvenes, luego la tercera edad y finalmente los niños y niñas.

Yo sueño un país donde los niños estén presentes. El Presidente Boric los ha puesto en el centro, ya que se relaciona, se vincula y habla con ellos, y esas acciones hacen que ese sueño sea hoy posible. Sueño un país y una fundación con los niños y niñas visibles, que estén en la cúspide de la pirámide.

¿Cuáles son, a su juicio, los principales desafíos hoy en día en torno a la infancia?

En la última reunión con la Directora Ejecutiva, ella nos planteó un desafío: que las políticas públicas consideren la participación. En educación existe una idea bien enraizada, en que solo unos pocos saben de educación, pero mucha evidencia e investigación demuestra que eso no es así. Hay planteamientos teóricos notables, como los de Paulo Freire, en ese contexto es importante la participación de los actores, en los distintos niveles, en lo pedagógico, en lo institucional. Sería lindo que hubiera niños y niñas participando de los procesos, con su voz.

¿Cuál cree Ud. que es su principal aporte, desde su experiencia o quehacer, al Consejo de Fundación Integra? ¿Qué lo motiva a ser parte de este equipo?

Mi aporte es ser un “Pepe Grillo”, cuestionar la obviedad. Afortunadamente, en este Consejo hay hartos “Pepe Grillo” que cuestionamos la obviedad. Por ejemplo, algo tan fundamental para los niños y niñas como el horario y la jornada escolar están pensados en función de las necesidades y los tiempos de los adultos.

Yo trabajé varios años en el Ministerio de Educación y cada vez que pensábamos y diseñábamos la política, yo planteaba la necesidad de tener siempre presente la voz de los niños. En ese momento, la respuesta siempre era la misma, obvio que es por los niños, pero muchas veces la obviedad no lo es tanto, hay que explicitar lo que hacemos y por quién lo hacemos.

Cuando estamos pensando en formar y capacitar a los profesores, cómo hacemos que ese aprendizaje sea en beneficio de las y los niños.

¿Existe algún gran tema “olvidado” relacionado con la infancia, que considere oportuno develar?

La visibilidad. En términos de cómo se mediatiza el discurso, en la participación de los niños y cuidadores, en ese sentido hay que avanzar.

¿Pero cómo se hace realidad ese discurso?, se pregunta Miguel Ángel, “en las formas de organizar las prácticas, esos son los desafíos en el aula. La educación es para toda la vida y en el caso de los niños debe tener un foco puesto en sus necesidades e intereses. Por qué todos los niños van a tener que aprender al mismo tiempo y los mismos contenidos, porque no mejor que aprendan en función de sus intereses y luego los adultos gradúan.

Creo que hay una mezquindad y un desprecio hacia los niños. Algunos se preguntan: ¿Cómo vamos a hacer política con los niños, cuando la política la hacen los adultos?, ¿cómo vamos a promover la participación si la misma Constitución dice que los ciudadanos son mayores de 18 años?, ¿qué queda para los niños que asisten a la sala cuna y jardín infantil?