El juego es la manera en que ni帽as y ni帽os conocen su entorno, desarrollan habilidades y expresan su mundo interno, aprendiendo a regular sus emociones, tolerar la frustraci贸n, resolver conflictos y establecer l铆mites respetuosos. En la experiencia de jugar ir谩n desplegando capacidades cognitivas, psicomotoras y habilidades sociales, al ensayar roles e incorporar valores y creencias que les transmite la cultura a la que pertenecen.
El juego habilita ese espacio psicol贸gico seguro, donde ir谩n ensayando y aprendiendo a transitar los desaf铆os que se presentan en las distintas etapas de su desarrollo. Bajo esta perspectiva, los juguetes les ayudar谩n a proyectar sus deseos, necesidades, temores y a elaborar sus vivencias, por lo que es importante que como adultas y adultos podamos detenernos a pensar en los juguetes que estamos eligiendo regalar, considerando que cuando asignamos un juguete en funci贸n de las caracter铆sticas que se atribuyen socialmente a lo que debiese jugar una ni帽a o un ni帽o, podr铆amos estar ejerciendo cierta influencia en estos procesos del desarrollo.
En el caso de las ni帽as, socialmente, se espera que utilicen juguetes que promueven habilidades para cuidar, en funciones de crianza y trabajo dom茅stico, lo que podr铆a restringir su creatividad, imaginaci贸n y su despliegue en el espacio p煤blico. Al facilitar solamente juguetes de este tipo 鈥搖na mu帽eca, de aseo o cocina鈥 probablemente promovemos que se identifiquen con un rol cuidador, pudiendo aprender a relegar sus propias necesidades y mostrar conductas m谩s sumisas y pasivas, restringiendo la expresi贸n de su malestar y/o la capacidad de poner l铆mites, a diferencia de los ni帽os.
En ellos, en cambio, se espera que se diviertan predominantemente en espacios p煤blicos con juegos de competencia, destrezas f铆sicas o cognitivas. Incluso, se suele validar el uso de juguetes b茅licos, naturalizando en ellos, juegos bruscos o de guerra. Esto podr铆a tener implicancias en la subjetividad de ellos, si consideramos que podr铆amos estar normalizando comportamientos violentos como una manera valida de expresar su rabia o frustraci贸n.
Tambi茅n es posible deducir ciertas limitaciones que podr铆an condicionar su desarrollo emocional y habilidades como la empat铆a, asertividad y resoluci贸n de conflictos. Incluso, podr铆an reforzar diferencias en la asignaci贸n de roles en la crianza, que dificulten que, en su adultez, puedan desarrollar competencias parentales y asumir una paternidad activa y de crianza respetuosa.
Al analizar lo que ni帽as y ni帽os estar铆an incorporando a ra铆z de estas creencias y estereotipos, podr铆amos pensar que la asignaci贸n de un juguete basada restrictivamente en su sexo, podr铆a perpetuar din谩micas de poder, desigualdad y violencia en las relaciones de hombres y mujeres.
No es que debamos prohibir que las ni帽as jueguen con mu帽ecas, ni tampoco negar a los ni帽os que jueguen a la pelota, porque no es el juguete lo que normaliza esta ideolog铆a, sino que son las creencias sociales desde donde restringimos las posibilidades que ni帽as y ni帽os jueguen libremente.
El desaf铆o es ampliar sus oportunidades de jugar libremente, sin limitar sus propias elecciones en funci贸n de lo que聽鈥渦na ni帽a debiese jugar por ser ni帽a鈥聽o lo que聽un 鈥渘i帽o debiese jugar por ser ni帽o鈥.聽Facilitar juguetes diversos, espacios y tiempos de juego no solamente permitir谩 garantizar el derecho a jugar de ni帽as y ni帽os, tambi茅n posibilita el despliegue de su potencial creador como sujetos de derecho en pos de la transformaci贸n de su realidad hacia una cultura inclusiva.
Estamos insertos en un sistema de mercado que utiliza estrategias de marketing para seducir a ni帽as y ni帽os como consumidores que, al estar transitando su Ni帽ez, se encuentran m谩s sensibles a las influencias de la publicidad. Pero el mercado no entrega valores, ni educar谩 desde una cultura de equidad y respeto, tampoco considerar谩 las implicancias que pueda haber en el desarrollo infantil. Y si no es el mercado 驴Qui茅n o quienes tomar谩n esta responsabilidad?
Es importante reflexionar y preguntarnos qu茅 les estamos regalando al comprar el juguete de moda. 驴Estamos dispuestos a perpetuar la naturalidad con que se viven y reproducen las desigualdades de g茅nero y el valor social que se le atribuyen a mujeres y hombres? 驴Qu茅 queremos entregar a las nuevas generaciones?
La invitaci贸n es a tomar una posici贸n responsable como figuras significativas de ni帽as y ni帽os, al asumir el valor trascendental que aporta el juego libre de estereotipos de g茅nero en la crianza respetuosa, y en fomentar valores, actitudes y v铆nculos bien tratantes.
Por Ilona Bartibas Fern谩ndez, psic贸loga,
profesional del Programa Fonoinfancia
Fundaci贸n Integra