Directora ejecutiva visita a equipos educativos de jardines Integra en la región de Arica y Parinacota

La directora ejecutiva de Fundación Integra, Red de Salas Cuna y Jardines Infantiles de Chile, llegó hasta Arica para conocer en terreno el trabajo que esta institución educativa realiza en la zona, donde funcionan 12 de sus establecimientos para la primera infancia, distribuidos en las comunas de Arica, Putre y General Lagos.

Nataly Rojas Seguel asumió la conducción de Integra en septiembre del año pasado y esta semana visitó por primera vez nuestra región ejecutando en Arica una agenda de reuniones y encuentros con autoridades regionales, medios de comunicación, funcionarias/os de oficina regional y trabajadoras de equipos educativos de jardines infantiles.

“Me quedo con las mejores sensaciones sobre todo en aquellos espacios y oportunidades en donde puedo reunirme con trabajadoras, saber las vivencias que ellas tienen, los sueños, los anhelos, las dificultades que nos permiten de alguna manera pensar en mejoras y también en tomar decisiones de manera más permanentes y por supuesto, el encuentro con niños y niñas siempre va a ser muy positivo”, expresó la directora ejecutiva.

En tal sentido, una de sus primeras actividades fue reunirse con los trabajadores de oficina regional de Fundación Integra, cuyas dependencias se ubican en la población Magisterio, para posteriormente hacer lo mismo con el equipo de trabajadoras del jardín infantil y sala cuna Milagro de Amor, ubicado en la población Guañacagua 3, establecimiento que próximamente será parte de una importante remodelación con una inversión de 932 millones de pesos.

Esa misma tarde, llegó hasta las dependencias del jardín infantil y sala cuna Nueva Esperanza, ubicado en calle Los Artesanos de la población Cardenal Silva Henríquez, recinto educativo que tiene una matrícula de 127 niños y niñas y un equipo de educadoras, técnicas, auxiliares y administrativa de 32 personas. En el lugar, recorrió cada una de las aulas, saludando a los equipos educativos y a los niños y niñas, de los cuales recibió un dibujo como regalo, de parte de Francisca, alumna del nivel medio mayor 2.

Al día siguiente, su agenda de actividades continuó en la sala cuna Los Castorcitos, que funciona en la sección femenina del Complejo Penitenciario de Acha, lugar que desde mediados de los ’90 alberga a este recinto educativo que hoy tiene 11 párvulos menores de 2 años hijos e hijas de las reclusas que cumplen condena en el lugar.

La visita de la directora ejecutiva a nuestra región también contempló reuniones con el gobernador regional subrogante Leonel Huerta Fernández, el delegado presidencial Ricardo Sanzana Oteíza, el delegado provincial de Parinacota, Wagner Sanhueza Guzmán y el seremi de Educación, Francisco Valcarce Llancapichún, todas orientadas a conseguir el apoyo y trabajo conjunto en beneficio de iniciativas y proyectos para el mejor funcionamiento de los jardines infantiles y salas cuna de Integra en la región.

Junto con lo anterior y en el último de los tres días que recorrió nuestra zona, Nataly Rojas Seguel expuso en el Seminario Internacional “Desarrollando Entornos Neuroamigables para la Infancia”, a través del cual se buscó aportar una mirada desde la educación socioemocional y la neurodidáctica al ámbito de la primera infancia.

Jorge Yáñez Castro, director regional de Fundación Integra, destacó la importancia de la presencia de la directora ejecutiva en la región remarcando lo positiva que fue para el trabajo de todos y cada uno de los funcionarios institucionales ya sea de oficina regional o jardines infantiles y en especial para los propósitos de aumento de cobertura regional que se proyectan para los próximos dos años, en donde se espera materializar la construcción de dos nuevos jardines infantiles.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

El uso de pantallas con niños y niñas de la primera infancia

Uno de los temas más recurrentes en educación es todo lo referido al uso de pantallas, en especial celulares o tablets por niños y niñas. UNICEF, ha sido una de las instituciones internacionales que más se ha dedicado a dar la alerta al respecto, en especial en la primera infancia y más aún, con el segmento de que va desde los primeros meses a los 3 años por ser una etapa muy delicada en cuanto a las influencias que realizan.

Algunas de las orientaciones entregadas por el organismo internacional, señalan que los padres centran su preocupación en el contenido de lo que están viendo, pero el riesgo, según advierten, va más allá de ello. Para empezar, predispone al sedentarismos en una etapa en la que debieran estar relacionándose socialmente, explorando, jugando y moviéndose para ejercitar su desarrollo motor.

A ello se agrega que las pantallas emiten una luz de onda corta que puede llegar a dañar la retina de manera irreversible, ya que su cristalino se encuentra en pleno desarrollo y no son capaces de filtrar la luz adecuadamente.  Consecuencia de ello, vemos como ha aumentado considerablemente los casos de miopía en el mundo.

Está también la peligrosa sobreestimulación que recibe el cerebro, dificultando con ello conciliar el sueño, y si esta actividad además supera las siete horas al día, ocasiona bajos niveles de sustancia blanca en el cerebro, clave para el desarrollo cognitivo y el lenguaje en la infancia.

Es lamentable lo que se observa día a día en las casas, medios de transporte e incluso en los parques y lugares al aire libre; muchas familias o cuidadores en vez de aprovechar esos momentos para regalonear con los niños/as, jugar con ellos, hablarles, cantarles, mostrarles el mundo, en especial la naturaleza y su diversidad, sólo ‘descansan’ en estos medios, ocasionando un peligroso silencio e inmovilidad en los bebés e incipientes ‘deambuladores’.

Así no pueden conocer del todo sus posibilidades motoras, ni lo que le ofrece concretamente su contexto familiar, social y natural, lo que es el aprendizaje más crucial de esta etapa.

Recordemos que “el derecho preferente de los padres a educar a sus hijos” que se discute constitucionalmente, comprende importantes responsabilidades. Ojalá asumamos todo lo que implica, entre ellos, el amor y cuidado presencial de sus progenitores en los primeros años de vida, algo que es irremplazable.

María Victoria Peralta,
Premio Nacional de Ciencias de la Educación, presidenta de Fundación Integra
y académica de Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Universidad Central

Jardines infantiles de Integra en O’Higgins reciben material didáctico inclusivo de Senadis

Cojín sensorial que promueve la calma, autorregulación, atención y concentración; pelota medicinal que facilita la estimulación sensorial, coordinación motriz gruesa y equilibrio; paracaídas sensorial que fomenta el trabajo en equipo, resolución de conflictos y planeación ideomotora; y espejos que permiten identificar el estado de ánimo de forma individual y autónoma, son parte del material didáctico que recibieron 12 jardines infantiles de Fundación Integra.

Esto como parte del Programa de Atención Temprana, PAT, 2022-2023, que Senadis ejecuta en establecimientos que cuentan con niños y niñas, menores de seis años, con discapacidad. El objetivo es contribuir a la inclusión social y equiparación de oportunidades, procurando el acceso a los sistemas de educación regular (que incluye la educación parvularia), salud y bienestar social a través de asesoría, apoyo técnico y coordinación del territorio con diferentes actores.

“Este material es un aporte al trabajo que Fundación Integra realiza y que va a permitir que los jardines beneficiados puedan realizar una labor más minuciosa, acorde a los tiempos que estamos viviendo. Hoy los niños y niñas necesitan y reciben diferentes estímulos, por lo que este material, de algún modo, les permitirá canalizar esas energías”, señaló la directora regional de Senadis, María Eliana Urquizar.

Por su parte, Alejandra Toro, jefa de Calidad Educativa de Fundación Integra, sostuvo que “desde el año 2012 hemos estado trabajando con Senadis, son muchos años de experiencia, donde el foco siempre ha estado en el fortalecimiento de nuestras comunidades educativas a través de la inclusión. Estamos comprometidos con ese trabajo, así lo plasma nuestra Carta de Navegación, debemos generar planes de acción que nos permitan valorar y responder positiva y adecuadamente a la diversidad de niños, niñas y sus familias”.

Son cerca de 100 niñas y niños de los jardines infantiles Bam Bam (Mostazal), San José Obrero (Rancagua), Zancudín (Chépica), Santa Ana (Palmilla), Los Almendritos (San Vicente), Trencito de Sueños (San Vicente), Los Cachorritos (San Vicente), El Molino de Colores (Rancagua), Sol del Valle (Machalí), Peumayén (Requínoa), Codegua Centro (Codegua) y Diego Portales (Rancagua), los beneficiados.

Para Ximena Donoso, directora del jardín infantil Santa Ana de Palmilla, “este programa ha sido muy beneficioso tanto para el equipo como para las familias y los niños y niñas. Las estrategias para trabajar con ellos han sido valoradas al interior del establecimiento, pues es lo que necesitábamos. Sin duda, es un gran aporte”, afirmó.

De esta manera, Fundación Integra continúa avanzando en la entrega de una educación de calidad, oportuna y pertinente a las necesidades e intereses de los niños y niñas, aportando a una mejor educación parvularia y contribuyendo como fin último en la construcción de una sociedad y un país más justo y democrático.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Fundación Integra entrega recomendaciones para prevenir accidentes en las casas este invierno

Durante el invierno, las familias adoptan una serie de medidas –tanto al interior de las casas como al estar en espacios abiertos–, para que niños y niñas puedan realizar diversas actividades de forma segura, buscando prevenir la ocurrencia de accidentes o la presencia de enfermedades estacionales.

Daniela Araneda Aros, jefa nacional (i) del Departamento de Prevención de Riesgos en Fundación Integra, recuerda que “por ejemplo, ante las bajas temperaturas, las familias recurren a diversas fuentes de calefacción. Un caso son los guateros para temperar las camas, los que deben colocarse entre las frazadas evitando el contacto directo con el cuerpo o pies. La recomendación es llenarlos sólo a tres cuartos de su capacidad, junto con verificar su estado antes de introducir el agua”.

Dependiendo de la temperatura ambiental, es necesario que niños y niñas utilicen gorros, abrigos, calcetines gruesos, botas, guantes o mitones, especialmente si jugarán al aire libre. Hay que prestar especial atención a las bufandas, para prevenir que se enganchen en juegos u otras superficies.

Al momento de andar en bicicleta, patines u otros rodados, los niños/as deben utilizar casco, junto con no permitir que se trasladen solos/as cuando usen estos dispositivos. Si se registran ráfagas de viento en la zona donde residen, la recomendación es mantenerlos al interior de las casas.

CALEFACCIONAR LAS VIVIENDAS

Las familias también deben adoptar en las casas medidas de cuidado, en especial al utilizar estufas, ya sean eléctricas, a gas o las que operan con parafina –kerosene–. Este tipo de artefactos no deben utilizarse cerca de elementos potencialmente inflamables, como por ejemplo cortinas, junto con evitar que niños y niñas los manipulen, especialmente si están encendidos.

En el caso de los equipos que requieran parafina y gas, es vital mantener una adecuada ventilación de los espacios durante su funcionamiento, para prevenir episodios de peligro con el monóxido de carbono. Tampoco deben usarse en baños y dormitorios, evitando cocinar o secar ropa con ellos.

Si en las casas existe una estufa eléctrica, la recomendación es conectarla directamente al enchufe de pared, evitando usar alargadores (denominados también “zapatillas”). Pero, si es indispensable utilizar estos elementos, hay que verificar que estén en buen estado y debidamente certificados.

“Es vital también recordar que cilindros de gas y envases para comprar y almacenar parafina deben estar en lugares seguros, protegidos de la lluvia y alejados de los niños/as. Por último, bidones u otros elementos autorizados por la autoridad competente, deben contar con medidas de seguridad que dificulten, por ejemplo, que puedan ser abiertos o se derrame su contenido”, cerró Araneda.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Seguridad y bienestar emocional de niños y niñas en contexto de emergencia

Durante los últimos días recorrí algunas de las zonas afectadas por las precipitaciones y pude constatar en el territorio la situación que están viviendo niños, niñas y sus familias. Desde mi experiencia y como representante de Fundación Integra, hago un llamado a reflexionar, a mirar y tratar de entender cómo se viven estos desastres en la infancia y cómo este tipo de situaciones afectan a niños y niñas.

Desde una mirada adultocéntrica, muchas veces se suele invisibilizar las vivencias de niños y niñas y nos tranquilizamos diciendo, que debido a su edad no se dan cuenta de lo que sucede a su alrededor, sin embargo, tal como indica Unicef en su documento Derechos de la niñez en emergencias y desastres. Compromiso de todos (2008): “Para la niñez, las emergencias producen trastornos importantes en sus vidas y su desarrollo, por la rapidez con que ocurren los cambios y la manera en que son afectados”.

Muchos de los niños y niñas, que residen en las zonas afectadas por la emergencia climática pueden haber sufrido la pérdida de su hogar, de una mascota e incluso de un miembro de su familia. Ante estas situaciones, los expertos recomiendan establecer rutinas y entregar predictibilidad, para que niños y niñas sepan que los adultos son una referencia confiable que les ayudará a salir adelante.

Brindar seguridad y bienestar es prioritario para garantizar un desarrollo emocional saludable de niñas y niños en momentos de incertidumbre. Es sabido que los primeros años de vida son críticos en la maduración de las habilidades sociales y procesos cognitivos, por esto, como adultos, debemos escuchar, observar, informar y responder las preguntas que surjan en estos contextos, todo ello, irá en directo beneficio de su salud mental futura.

Como responsables del cuidado de niños y niñas, debemos tratar de ofrecer espacios de confianza y confort donde puedan expresarse, sin minimizar, juzgar o ridiculizar sus emociones. Este apoyo les permitirá comprender lo vivido y fortalecerá su capacidad para hacer frente a situaciones difíciles y cimentará su enfrentamiento en la vida adulta.

Esto es especialmente relevante, pues múltiples estudios nos confirman que la falta de contención en emergencias y desastres, puede llevar a desarrollar trastornos como estrés postraumático, depresión o ansiedad en la adultez.

Muchos de los niños y niñas, que residen en las zonas afectadas por la emergencia climática pueden haber sufrido la pérdida de su hogar, de una mascota e incluso de un miembro de su familia. Ante estas situaciones, los expertos recomiendan establecer rutinas y entregar predictibilidad, para que niños y niñas sepan que los adultos son una referencia confiable que les ayudará a salir adelante.

Hacer frente a esta situación de emergencia implica incorporar procesos de educación emocional, enseñar a los niños y niñas a reconocer sus emociones, explicándoles que no existen sentimientos buenos o malos. Mi invitación es que como adultos les ayudemos a resignificar lo sucedido de manera cariñosa, con información veraz, pero adecuada a su ciclo vital, para que puedan conectarse con sus vivencias, promoviendo en su desarrollo habilidades como la tolerancia a la frustración, la empatía y la resiliencia.

En estas semanas de vacaciones para niños y niñas, la relación con sus familias y cuidadores, será de vital importancia para enfrentar y reelaborar lo vivido en la emergencia, para esto debemos estar disponibles a conversar y cuidarnos. Desde Fundación Integra seguiremos apoyando las labores de crianza, a través de nuestro programa FonoInfancia, el que está disponible de lunes a viernes, en el fono 800 200 818 o por chat en www.fonoinfancia.cl, donde profesionales expertos podrán guiar y acompañar estos procesos.

Nataly Rojas Seguel
Directora Ejecutiva de Fundación Integra

Directora Ejecutiva visita jardines infantiles afectados por emergencia climática en el Maule

La directora ejecutiva de Fundación Integra, Nataly Rojas Seguel, recorrió junto al equipo de la Dirección Regional Maule, las zonas más afectadas en el contexto del sistema frontal que se registró en la zona centro sur del país, para conocer el estado de las salas cuna y jardines infantiles, junto con acompañar a las trabajadoras y trabajadores afectados por esta emergencia climática.

En compañía de la directora regional de la institución, Angélica Olguín Rebolledo, se trasladó hasta la comuna de Curepto, donde compartió con el equipo educativo del jardín infantil Cuncunita. También, las autoridades participaron de una visita a la escuela Juan Jesús González, que encabezó el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, donde compartieron con vecinas y vecinos.

Luego, el equipo de Integra llegó hasta Licantén donde conocieron el trabajo del equipo educativo del jardín infantil Papelucho, habilitado como centro de acopio para ayudar a las familias afectadas.

Junto al ministro Ávila y la subsecretaria de Educación Parvularia, Claudia Lagos, además se recorrió el liceo Alejandro Rojas Sierra, participaron de una reunión en la Segunda Comisaría de Carabineros de Licantén, para luego recorrer la sala cuna Capullito, dependiente de Fundación Integra, recinto que registró daños de consideración producto de la acción del agua.

Nataly Rojas Seguel, indicó que “quiero destacar el gran compromiso de las y los trabajadores de Integra, ya que se han movilizado para apoyar a las familias que asisten a nuestras salas cuna y jardines infantiles, incluso a pesar de verse también afectadas y afectados por este temporal. Estamos trabajando, con la coordinación de la oficina regional, para que tras el receso invernal podamos reabrir las puertas para recibir a los niños y niñas en condiciones normales de funcionamiento”.

ACOMPAÑAMIENTO PERMANENTE

Los jardines infantiles Alborada y Miraflores, de la comuna de Longaví, también recibieron la visita de los equipos de Integra desplegados en la zona, para conocer el estado de los recintos y las necesidades especiales que puedan tener las familias y/o trabajadoras. Lo mismo ocurrió en Linares, donde la directora ejecutiva recorrió el jardín infantil Pasitos de Ternura, para compartir posteriormente una instancia de diálogo con el equipo educativo.

Durante el recorrido por las comunas afectadas por el sistema frontal, también se entregó a las familias un kit de emergencia, proporcionado por el programa Chile Crece Contigo, el cual contiene diversos materiales y accesorios especialmente diseñados para el uso de niños y niñas.

La directora regional de Fundación Integra, Angélica Olguín Rebolledo, señaló que “como equipo regional nos preparamos para el complejo escenario climático que enfrentaríamos en el Maule, por lo que nos pusimos en acción para abordar las distintas situaciones con las directoras de los jardines infantiles, para que los niños y niñas puedan volver luego del receso de invierno”.

También, la directora ejecutiva de Integra participó de una reunión en Talca con el director regional de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles, SEC, Vicente Marinkovic, instancia donde se revisó la situación de las salas cuna y jardines infantiles afectados por esta emergencia, en materia eléctrica, junto con las acciones a implementar para la rehabilitación del servicio en estos recintos.

Por último, las autoridades recalcaron a las familias afectadas que pueden recurrir de forma gratuita y confidencial a Fonoinfancia, de Fundación Integra, el que cuenta con un equipo de psicólogos y psicólogas preparadas para entregar orientación en temas de crianza, cuyo horario de atención es de 08:00 a 19:00 horas a través del teléfono 800200 818 o por chat en www.fonoinfancia.cl.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Nicolett Gálvez: de Rancagua a Boston ejerciendo la educación parvularia

Nicolett Gálvez Lemus tiene 25 años y es Educadora de Párvulos de la Universidad del Biobío. A su corta edad, su vida profesional ha estado marcada por esfuerzos, sacrificios, pero también importantes logros, que incluso la llevarán a implementar en Estados Unidos la enseñanza recibida en el país.

“Amo tanto lo que hago, que cuando me dicen que me parezco a Patch Adams, referente al cual yo aspiraba ser, quiere decir que lo estoy haciendo bien, eso me emociona”, asegura.

Ella, al igual que su madre Mitzi, comenzó trabajando como auxiliar de servicio para luego desempeñarse como agente educativa en los jardines infantiles San José Obrero y Diego Portales de Rancagua, específicamente durante la implementación del programa “Vacaciones en Mi Jardín”. Fue en ese momento cuando se dio cuenta que quería enfocarse en la educación parvularia, su vocación.

“Me sentía feliz. Yo podía estar con pena, pero llegaba allá y era un cambio rotundo de chip. Lo pasaba bien con los niños y niñas y me di cuenta que quería hacer más por ellos”, recuerda Nicolett sobre sus inicios.

Mitzi tiene mucho que ver en esta decisión, pues desde pequeña Nicolett visitaba la Oficina Regional de Fundación Integra, en Rancagua, lugar donde su madre trabaja desde el año 2010, intercambiando ideas y conversaciones con diferentes profesionales.

“Estoy súper contenta, pero con sentimientos encontrados porque me dobló la mano. Yo nunca quise que estudiara esto porque es una carrera complicada. Hoy estoy orgullosa, fue fuerte y siguió su sueño”, afirma su madre.

Por su parte, Alejandra Ampuero, jefa de Administración y Servicios Educativos de Fundación Integra O’Higgins, también tuvo palabras para esta destacada funcionaria. “Gracias a su esfuerzo, a su empeño ella ha podido sacar adelante a su familia, a sus hijos. Me siento orgullosa, feliz y emocionada de saber que su hija hoy cumple un sueño. Le irá muy bien porque es una persona desafiada y comprometida, rasgos que, sin duda, heredó de su madre”.

Sus logros y perseverancia, la llevaron a dejar las fronteras del país. Desde el 23 de junio en Boston, Estados Unidos, comenzará su nuevo desafío profesional, pues trabajará con niños y niñas, luego de un arduo proceso de postulación y entrevistas. Su idea es permanecer allá el mayor tiempo posible, para luego regresar con nuevos conocimientos que pueda aplicar en escuelas rurales y por qué no, también en Fundación Integra.

“No me lo esperaba, estoy muy contenta, es otro cambio cultural. Siempre he dicho que quiero ser una persona muy sabia y entregar todo ese conocimiento. Siento que se me está dando de una manera que no imaginé, mi sueño era ser profesora y conocer el mundo”, señaló.

Nicolett ya sabe de viajes y de estar lejos de sus seres queridos, pues su práctica profesional la realizó durante seis meses en España gracias a una beca que obtuvo en la universidad. Por eso ahora, esta “Patch Adams de Rancagua”, personaje con quien reitera estar muy identificada, espera seguir contribuyendo a la calidad de la educación parvularia.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Análisis libro “Educar las emociones: educar para la vida”

La destacada psiquiatra infanto-juvenil y especialista en neurociencias aplicadas a la educación, Amanda Céspedes, escribió este libro para todos los adultos/as que están a cargo del cuidado y enseñanza de niños y niñas, usando un lenguaje simple y con diversos ejemplos. La autora señala que por siglos se ignoró el papel que juegan las emociones en el desarrollo humano, centrándose en lo cognitivo, y que recién a fines del siglo XX las investigaciones en neurociencias comenzaron a demostrar que somos seres emocionales.

Las emociones son respuestas pasajeras del organismo frente a estímulos y surgen desde que estamos en el vientre materno, alrededor de las 28 semanas de gestación. Las primeras emociones que experimentamos son las emociones primarias y nos acompañarán toda la vida: la rabia, el miedo, la tristeza, la frustración y la alegría. Un recién nacido experimenta miedo al dejar el cálido útero materno por un ambiente externo lleno de nuevos estímulos; ruidos, olores, temperaturas, luces.

Los bebés en gestación tienen una fuerza interna natural de búsqueda de la armonía emocional, pero al nacer ese equilibrio emocional dependerá del encuentro con los otros. Esto es clave porque somos los adultos/as los que debemos dar el cauce al torrente emocional de los niños y niñas.

La armonía emocional de un niño o niña es un fenómeno biológico, pero que se sustenta en lo social, pudiendo ser modificada para bien o mal desde la experiencia con otros. De esta forma, un niño/a que vive maltrato físico y/o psicológico, sufre un desequilibrio biológico, aumentando en su organismo la hormona del estrés llamada cortisol, alterando su emocionalidad, desarrollo y capacidad de aprender. Ante esto, cabe preguntarse: ¿qué debemos hacer los adultos/as para potenciar el desarrollo emocional de los niños y niñas?.

La autora señala que los adultos debemos acompañar respetuosamente a los niños y niñas a desarrollar y enriquecer un potencial que ya traen consigo y que les va permitir, a medida que vayan creciendo, una adecuada gestión emocional. Con los bebes, este acompañamiento consiste en confortarlos y atender de manera sensible a sus necesidades, sin enjuiciarlos (ej. “este bebé me está manipulando), nombrándole las emociones y facilitando que las reconozca.

Con los párvulos, en los jardines infantiles y los estudiantes en los colegios, también se requiere un adulto/a atento a sus necesidades diversas, capaz de contener emocionalmente, dar seguridad, escuchar, validar todas las emociones, permitir que se expresen, sin juzgarlas o invisibilizarlas (ej. “no es para tanto, no llores”), y acompañar el proceso de aprender a regular sus emociones, para una sana convivencia consigo mismo/a y los demás, esto es educar para la vida.

A través de las páginas, Amanda Céspedes nos invita a reflexionar sobre situaciones de la vida diaria de niños, niñas y adolescentes, es así como detrás de expresiones como el llanto, las mordeduras, conductas desafiantes hay una emocionalidad y es nuestra tarea como adultos acoger, validar y acompañar desde las necesidades de ese niño/a o adolescente.

Finalmente, el libro plantea que, para educar las emociones de niños y niñas los adultos, familias y educadores, debemos reconocer y regular nuestras propias emociones, así como cuidar nuestro bienestar emocional. Un Libro que, si bien se publicó por primera vez en noviembre de 2008, nos entrega enseñanzas a los adultos que están más vigentes que nunca. Todos quienes estamos en contacto con niños y niñas y trabajamos en educación debiéramos leer este texto y compartirlo.

Análisis realizado por María Andrea Huerta, profesional de la Unidad de Políticas y Proyectos de Educación de la Dirección Nacional de Educación en Fundación Integra.

La “oveja Nanai” de Integra enseña a niños y niñas importancia de conocer y explorar sus emociones

Está presente en todos los jardines infantiles y modalidades no convencionales de Fundación Integra del país. A través de experiencias educativas, la “oveja Nanai” acompaña a niños, niñas y equipos pedagógicos en el proceso de descubrir y comprender de forma lúdica qué son y cómo expresar las distintas emociones que experimentamos día a día; por ejemplo, el miedo, alegría o tristeza.

Así, se busca el desarrollo de competencias socioafectivas, las que nos permiten estar bien con nosotros mismos y relacionarnos e interactuar con otros de una forma saludable.

El Modelo de Educación Emocional de Fundación Integra se basa principalmente en el modelo de Competencias Emocionales del español y doctor en Ciencias de la Educación, Rafael Bisquerra, al cual se realizaron ajustes y revisiones por expertos nacionales, para que cumpliera con los lineamientos estratégicos de la institución.

Este modelo plantea cinco competencias centrales –conciencia emocional, regulación emocional, autoestima y autonomía emocional, compromiso social/ético y vínculos bientratantes– y 23 micro competencias adicionales. Acá, las familias y equipos educativos tienen un rol clave, ya que ellos, a través de diversas prácticas pedagógicas, permiten que niños y niñas se acerquen a ellas, las identifiquen y desarrollen aptitudes para canalizarlas de buena forma.

Es aquí donde emerge la “oveja Nanai”, que día a día recibe a los niños y niñas en salas cuna y jardines infantiles de Integra y los acompaña a vivir las emociones, a través de juegos sencillos, que tienen como objetivo, contener, consolar, ayudar a expresar y comprender sus propias emociones.

La directora ejecutiva de Fundación Integra, Nataly Rojas Seguel, indicó que “la implementación de este modelo es un paso clave de la fundación para responder a los retos que presenta la educación parvularia actualmente. Estamos en un contexto donde la pandemia aún nos presenta el desafío de reencontrarnos en el jardín infantil, reactivar los procesos de aprendizaje y potenciar las habilidades de niños y niñas”.

Y… ¿QUÉ SON LAS EMOCIONES?

Existen diversas definiciones para intentar explicar qué son las emociones, las que están marcadas por el contexto en que se consultan y aplican. En Fundación Integra, se determinó seguir lo señalado por el académico Rafael Bisquerra, quien las define como respuestas neurofisiológicas, que surgen a partir de la valoración que se hace de ciertos acontecimientos externos o internos, las cuales además forman parte indisoluble de la vida humana.

Si bien diversos investigadores e investigadoras coinciden en que las emociones pueden clasificarse como positivas o negativas, esto no implica necesariamente que alguna de ellas sea buena o mala. Entender este proceso, permite expandir nuestro lenguaje emocional, yendo así más allá de las emociones básicas y ampliando nuestro mundo de posibilidades afectivas.

“Aunque el Modelo de Educación Emocional describe diversas competencias a desarrollar en las y los párvulos, no debemos olvidar que los primeros destinatarios de la educación emocional deben ser las y los adultos. Este es un proceso que dura toda la vida, lo que compromete a los actores de las comunidades educativas, los que deben trabajar en conjunto para alcanzar el desarrollo integral y aprendizajes significativos en las y los párvulos”, cerró la directora ejecutiva de Fundación Integra.

La primera infancia es un momento clave en el desarrollo de los niños y niñas, donde se despliegan competencias que les permitirá desenvolverse a lo largo de toda su vida, incluyendo la construcción de su “biografía emocional”, la que se transformará en la base de su aprendizaje socioemocional.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

La educación de la primera infancia

En el borrador de la propuesta de Constitución sobre el Derecho a la Educación, se refiere a la educación parvularia en una forma poco clara y pertinente, atendiendo su reconocimiento mundial y la historia de este nivel en Chile. Expresa en el capítulo II, art. 16.22, que es “deber del Estado promover la educación parvularia, por lo que financiará y coordinará un sistema gratuito a partir de nivel medio menor, destinado a asegurar el acceso a este y a sus niveles superiores. El segundo nivel de transición es obligatorio, siendo requisito para la educación básica”.

La educación es un derecho del ser humano desde el nacimiento, y desde el ámbito de la educación formal extrafamiliar, se expresa claramente en el nivel de Sala Cuna desde la Ley Nº 17.301 que dio origen a la Junta Nacional de Jardines Infantiles en 1970.

Desde ese momento, existen otras leyes, institucionalidad, servicios proveedores, normativas, financiamiento a través de la Ley de Salas Cunas que viene de 1917, programas no formales, formación profesional y técnica, etc. que dan cuenta de este reconocimiento del Estado de ser un sub-nivel dentro del sistema de educación parvularia.

Por eso que extraña esta ambigüedad en el texto propuesto, frente a lo cual todo tipo de organismos del nivel planteará su adecuada formulación, reconociendo este derecho ineludible de niñas y niños chilenos desde el nacimiento. Desconocemos las causas de este planteamiento, suponemos que viene por el lado del financiamiento, tema en discusión aún para ciertos sectores, pero ello no legitima esta exclusión dentro del sistema educativo.

Esperamos que se enmiende en beneficio de niños, niñas, familias y de la seriedad y respeto que tiene la educación parvularia chilena.

María Victoria Peralta,
Premio Nacional de Ciencias de la Educación, presidenta de Fundación Integra
y académica de Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Universidad Central