La importancia del bienestar psicológico de niñas y niños

En la semana de la salud mental, nos parece muy importante detenernos a reflexionar en torno a la importancia de la protección y promoción del bienestar psicológico y emocional de niñas, niños y adolescentes. A través de diversas fuentes sabemos que en Chile los datos sobre salud mental de niñas, niños y adolescentes no dejan de ser preocupantes, más aún si consideramos la reciente pandemia de COVID-19 y sus efectos en lo que respecta a salud mental. Los contactos que Fonoinfancia ha tenido con niñas, niños y adolescentes así también lo corroboran.

En el transcurso del último año, las interacciones de Fonoinfancia con adolescentes y jóvenes de entre 12 y 17 años, han evidenciado como motivo de consulta repetitivo, malestares asociados a sintomatología ansiosa y depresiva (tristeza, decaimiento, ansiedad, pensamientos rumiantes, deseos de morir e ideación suicida, entre otros). Dentro del relato de las y los adolescentes, y transversal a los distintos motivos de consulta, destaca la sensación de soledad, aislamiento, dificultad para hablar de lo que les está ocurriendo y pedir ayuda.

Esto último se relacionaría, por un lado, con la percepción de un mundo adulto hostil, en donde madres, padres, cuidadores y/o adultas/os cercanas/os no se identificarían como figuras disponibles emocionalmente. Más bien, tenderían a percibirse como personas que toman una perspectiva juiciosa y crítica ante sus conflictos y con los cuales la comunicación se volvería amenazante. Y, por otro lado, se relacionaría también con la percepción de sus conflictos como algo “molesto” y “problemático” para las adultas y adultos a los que ya se les percibiría “suficientemente” estresados y agobiados por las exigencias del día a día.

En ambas situaciones subyace la idea de que sus inquietudes, afectos y/o malestares deben ser resueltos en soledad, sin la ayuda de madres, padres y/o adultos cercanos que puedan orientar acciones concretas en caso de ser necesario. Lo que parece más alarmante de esta situación, es que deja a las y los adolescentes muy aislados de sus redes de apoyo más próximas.

En este sentido, creemos relevante y urgente que adultas y adultos nos hagamos parte del cuidado de la salud mental de niñas, niños y adolescentes generando acciones que se orienten a acortar las barreras de acceso a sus entornos más inmediatos de apoyo (familiares, escolares, comunales). Así como también, informándonos, habilitándonos y disponiéndonos a acoger de manera oportuna y sensible no solo sus inquietudes y malestares, sino que también sus ideas, deseos y singulares maneras de percibir y habitar sus entornos.

Para ello, y a propósito de la experiencia proporcionada por los contactos que a diario sostenemos con adultas/os, niñas, niños y adolescentes, es que nos parece clave propiciar espacios de encuentro y comunicación en familia. Incluyendo un lenguaje emocional en las conversaciones que facilite el hablar de cómo cada una/o se siente respecto de distintas situaciones, dando espacio también para el disentimiento, las emociones incómodas y temáticas relacionadas con la salud mental.

Es importante que estos temas dejen de ser un tabú, que se hablen al interior de las familias, contribuyendo con eso a derribar mitos y prejuicios entorno a la salud mental que pudieran convertirse en barreras para pedir ayuda. Es por eso que no da lo mismo qué y cómo conversar. El interesarnos genuinamente por las perspectivas y singularidades de niñas, niños y adolescentes, evitar hacer juicios de valor respecto de temáticas de su interés o conflictos, sin duda es una medida que cuida y protege.

Por otro lado, disponer, facilitar y alentar espacios de participación y pertenencia (deportes, actividades escolares, comunitarias, barriales, culturales, etc.) también es una medida que promueve la salud mental sobre todo en adolescentes y jóvenes. No debemos obviar que uno de los desafíos de la adolescencia es la construcción de la propia identidad, y para ello es deseable que participen de espacios en donde se sientan escuchadas/os, validadas/os, en donde puedan identificarse y/o diferenciarse de y con otras y otros, descubran distintas maneras de hacerse parte de la sociedad y generar cambios. Por otro lado, también contribuye a reforzar vínculos y espacios seguros para recibir y prestar apoyo.

Por último, es fundamental que sepamos identificar cuándo es necesario pedir ayuda profesional. Es esperable que niñas, niños y adolescentes presenten cierto malestar ante crisis vitales normativas o emergentes. Sin embargo, si el malestar persiste en el tiempo y/o es muy intenso, es importante consultar y pedir ayuda especializada. Por esto, las adultas y adultos que se vinculan cotidianamente con niñas, niños y adolescentes debemos estar atentas/os a cambios bruscos de ánimo o comportamiento que persistan por más de dos semanas ya que pudieren requerir de ayuda especializada, por ejemplo, cambios en los patrones de sueño, alimentación, rendimiento escolar, conductas de riesgo, autolesiones, e ideas de muerte.

Si tienes dudas respecto del bienestar emocional de niñas, niños y adolescentes, puedes contactarte a Fonoinfancia de lunes a viernes de 8:30 a 19:00 horas, llamando al 800 200 818 o ingresando a www.fonoinfancia.cl. Un equipo de psicólogas y psicólogos expertos en crianza, niñez y familia está disponible para acompañarte.

Bárbara Veloso Castro
Psicóloga del Programa Fonoinfancia, departamento de Promoción y Fonoinfancia, Dirección de Promoción y Protección de la Infancia, Fundación Integra.

Animación de Fonoinfancia resalta la importancia de la comunicación con las niñas y los niños ante un proceso de separación

Fonoinfancia, programa gratuito y no presencial de apoyo a la crianza de Fundación Integra, estrenó junto a familias de la comuna de Lo Prado su más reciente animación “Dejen de pelear delante de nosotras/os”, a través de la cual se busca resaltar de forma didáctica y educativa, lo importante que es la comunicación entre las adultas/os y las niñas/os; junto con atender las distintas vivencias que puedan experimentar especialmente cuando se produce y hay que enfrentar un proceso de separación.

La pieza audiovisual muestra que cada integrante de la familia puede vivir este hecho como un duelo, sintiendo diversas emociones. Por ello es clave acompañar a niñas y niños, contándoles lo que ocurre. Esto busca prevenir, por ejemplo, que la falta de información de paso a pensamientos donde ellas/os se atribuyan algún grado de responsabilidad o culpa.

Esta presentación se realizó en la sala cuna y jardín infantil Santa Anita y contó con la presencia del director ejecutivo (i) de Fundación Integra, Carlos González Rivas; las directoras nacionales de Fundación Integra Marcela Fontecilla y Marcela Vida –Educación y Promoción y Protección de la Infancia, respectivamente–; la jefa del Departamento de Promoción y de Fonoinfancia, Alicia Varela Hidalgo; además las y los profesionales de este programa, quienes junto con revisar el video realizaron un conversatorio con las familias y el equipo educativo del establecimiento.

Durante la instancia se recalcó que las y los adultos deben estar disponibles e interesados en lo que puedan necesitar o sentir las niñas y niños. Junto a ello, es relevante transmitirles con claridad que lo que se termina es la relación amorosa entre adultas y adultos; y no el amor hacia ellas y ellos.

El director ejecutivo (i) de Fundación Integra, Carlos González Rivas, indicó que “abordar junto a las familias y equipos educativos este tipo de temáticas, nos permiten resaltar que como adultos y adultas debemos acompañar y escuchar a niños y niñas en este tipo de procesos, velando por su bienestar y seguridad. Por ello, destacamos el poner junto a Fonoinfancia este material a disposición de las familias y los equipos educativos de jardines infantiles, el cual busca ser un apoyo y una orientación ante este tipo de situaciones”.

Alicia Varela Hidalgo, jefa del Departamento de Promoción y de Fonoinfancia, expresó que “para las niñas y niños no es fácil transmitir con palabras lo que sienten, por ello suelen expresar sus emociones de diferentes formas. Esto es un llamado a que las y los adultos estemos alerta y podamos responder oportunamente ante estas señales. Para ello, es clave contar con insumos que nos permitan esto, buscando siempre el bienestar de las niñas y niños”.

La animación cuenta además con materiales complementarios dirigidos a equipos educativos, familias y público en general, consistentes en un documento de apoyo, un díptico y dos propuestas de talleres, con sus respectivas orientaciones para abordar esta temática. La animación quedará disponible en el canal de YouTube de Fonoinfancia y en la página web www.fonoinfancia.cl

Según cifras de Fonoinfancia, entre los meses de enero y agosto de este año, se cuentan en total 4.845 intervenciones psicológicas, de las cuales un 20,5% corresponden a inquietudes relacionadas con el impacto que tiene en niñas y niños un proceso de separación, en el contexto de su crianza y desarrollo.

Desde el 2007, además, este programa es parte del subsistema de Protección Integral a la Infancia Chile Crece Más (exChile Crece Contigo), dependiente del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, lo que se traduce en la implementación de acciones de carácter universal, focalizando apoyos especiales a quienes presentan una vulnerabilidad mayor.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

Adelantando los relojes: recomendaciones para que niñas y niños se adapten al horario de verano

La medianoche del sábado 02 de septiembre, los relojes deberán adelantarse 60 minutos en gran parte del país, llevándonos así a las 01:00 horas del domingo lo que marca el inicio del horario de verano. Esto implica, por ejemplo, la variación de las horas de luz natural disponibles para que las familias realicen sus actividades.

Por ello desde Fonoinfancia de Fundación Integra, destacan que las y los adultas/os deben estar atentos a las reacciones que niñas y niños podrían experimentar por esta modificación, siempre considerando que a algunas/os les afecta más que a otras/os.

Este cambio de horario podría implicar problemas para conciliar el sueño, despertares nocturnos, posibles desajustes en la rutina de comidas o siestas, cansancio, variación en el apetito o cambios anímicos. Por ello, la paciencia, cariño y comprensión de las familias o personas responsables del cuidado de niñas y niños es clave para que puedan adaptarse.

Carolina Diez Pastene, psicóloga y supervisora del Depto. de Promoción y Fonoinfancia, de Fundación Integra, destaca que “esta es una oportunidad para que adultas y adultos no sólo le expliquen a niñas y niños sobre el cambio de hora, sino también las implicancias que esto podría tener en sus vidas. La idea es que poco a poco nos relacionemos con niñas a niños como personas que tienen derecho a saber y opinar, viéndolos como sujetos de derechos”.

Esta modificación es una oportunidad para hablar sobre cómo cambian las estaciones y la temperatura ambiental, lo que permite que niñas y niños lo tomen con mayor naturalidad. Para esto se puede recurrir a cuentos, dibujos, animaciones u otros elementos. Además, es posible realizar acciones conjuntas como modificar el reloj o adelantar la ingesta de alimentos, comenzando con 15 minutos e ir aumentando este tiempo de manera paulatina.

“Si se detecta que niñas y niños están somnolientas/os en el día, una pequeña siesta podría ayudar. También, se pueden generar juegos que impliquen ejercicio físico, de este modo, no sólo podríamos conectarnos emocionalmente con ellas/os, sino que, además, liberarían energía que les facilite dormirse más temprano”, complementó la profesional.

Si se necesita apoyo en este proceso, las familias y adultas/os responsables del cuidado de niñas y niños, pueden comunicarse de forma gratuita y confidencial con las/os psicólogas/os de Fonoinfancia, de Fundación Integra, al teléfono 800200 818 o por chat en el sitio web www.fonoinfancia.cl.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

¿Cómo apoyar a niñas y niños durante situaciones de emergencia?

Observar el comportamiento, escuchar con atención y no tener miedo a expresar emociones, son algunas de las recomendaciones entregadas por la psicóloga y jefa del programa Fonoinfancia de Fundación Integra, Alicia Varela, para que los adultos puedan apoyar a los niños y niñas que han sido afectados por la emergencia climática que se vive en las zonas centro y sur del país.

Los niños y niñas necesitan explicaciones según su edad

La especialista en temas de familia y niñez, aconseja estar atento/a a ciertas señales (podría haber otras), como cuando los niños y niñas están extremadamente apegados a los padres, madres, o los/as adultos/as cercanos/as, más irritables, lloran con facilidad, golpean o muerden a otras personas, ven alterados su control de esfínter, no quieren jugar o están más retraídos/as, es necesario que como adultos/as seamos un apoyo. Lo más probable es que estas conductas vayan desapareciendo poco a poco, en cuanto el niño o niña vaya asimilando lo sucedido en un contexto que lo acoja, le ayude a entender lo que está sucediendo y retome la cotidianeidad.

Como adultos/as es fundamental que les ayudemos en su proceso de adaptación a la nueva realidad, explicándoles con claridad y palabras simples lo sucedido, sobre todo si tienen acceso a escuchar la radio o ver pantallas (celular, computador o televisión), porque pueden encontrarse con una realidad exacerbada e inapropiada para su edad. “Los niños y niñas necesitan información y explicaciones acorde a su madurez emocional y a la etapa del desarrollo en la que se encuentran, por lo que es importante escuchar atentamente sus consultas, entender bien qué quieren saber y hablarles en un lenguaje simple y cercano, para no darles información de más ni de menos y resolver sus dudas. Asimismo, es importante mencionarles que quedamos disponibles para cuando tengan nuevas preguntas”, asegura la jefa del programa Fonoinfancia de Fundación Integra.

“Podemos tomar la iniciativa de hablar con el niño/a sobre la emergencia, en la medida en que nos sintamos en condiciones de hacerlo. ¿Qué significa estar en condiciones de hablar? Significa que, si bien, puedo estar triste o angustiado/a, estas emociones no me impedirán atender y apoyar a otros/as en sus necesidades emocionales, materiales y de información”, afirma Alicia Varela. Por el contrario, si el/la adulto/a está sobrepasado/a no debe dejar de atender lo que está sintiendo, porque solo si está bien tendrá las herramientas para apoyar a otros/as.

Apoyo gratuito para las familias

Si las personas cercanas no se sienten en condiciones de apoyarlos, es importante pedir ayuda y buscar a una persona significativa para el niño/a que pueda conversar cuidadosamente con él/ella sobre la emergencia.

En el caso de que los/as adultos/as necesiten apoyo para conversar con niños y niñas en situaciones de emergencia, pueden comunicarse de manera gratuita con los/as psicólogos/as de Fonoinfancia de Fundación Integra, al teléfono 800200 818 o por chat al www.fonoinfancia.cl El horario de atención del servicio es de lunes a viernes, de 08.30 y 19.00 horas.

 

Fonoinfancia está de cumpleaños: ya son 22 años acompañando la crianza de las niñas y niños

Acompañar y responder las dudas e inquietudes que se presentan al criar, cuidar, proteger y educar a niñas y niños, es parte de la labor que realiza Fonoinfancia, programa gratuito y confidencial que entrega apoyo en la crianza integral a las familias y que este 2023 cumple 22 años de existencia.

Fundado el 31 de mayo de 2001, su objetivo es promover relaciones de buen trato hacia niñas y niños, entregando a las adultas y adultos herramientas para una crianza respetuosa. Desde su creación, y hasta abril de este año, Fonoinfancia contabiliza en total más de 229 mil atenciones, de las cuales 11.687 se recibieron sólo durante 2022.

Alicia Varela Hidalgo, jefa del Departamento de Promoción y Fonoinfancia, indicó que “en sus más de dos décadas de existencia, Fonoinfancia ha buscado contribuir al bienestar y desarrollo integral de niñas y niños, por medio del fortalecimiento de competencias en las y los adultos. Todo ello, bajo un enfoque de respeto, promoción de los derechos de la niñez y trabajo con otras instituciones.

Además, desde el año 2007, Fonoinfancia es parte del subsistema de Protección Integral a la Infancia “Chile Crece Contigo”, dependiente del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, cuya misión es acompañar, proteger y apoyar a niñas, niños y sus familias. Esto se traduce en la implementación de acciones de carácter universal, focalizando apoyos especiales a quienes presentan una vulnerabilidad mayor.

ACOMPAÑAMIENTO PERMANENTE

El programa no solo atiende a madres, padres, adultas y adultos cuidadores. También, da la posibilidad a las trabajadoras/es de las salas cuna, jardines infantiles y modalidades no convencionales de Fundación Integra de consultar cuando lo requieran, siendo así un apoyo tanto a su labor educativa diaria como por temas personales asociados a su propia crianza.

“Así como ninguna niña y niño es igual a otro, como tampoco son iguales las familias ni las historias individuales. Por ello, las y los profesionales de Fonoinfancia brindan atenciones pertinentes que buscan responder a esas singularidades, acompañando a quienes nos contactan en las inquietudes que se presentan al criar, cuidar, proteger y educar”, cerró Varela.

Durante estos 22 años de vida, Fonoinfancia ha acercado la atención psicológica a las personas sin ningún tipo de discriminación. Estas intervenciones no presenciales, vitales por ejemplo durante la pandemia por covid-19, han democratizado el acceso a la salud mental, promoviendo el bienestar de niñas, niños, familias y su entorno.

Su existencia y orientaciones, en un período donde la comunidad debió quedarse en casa a raíz de las restricciones sanitarias, permitieron a padres, madres y cuidadores/as continuar acompañando los procesos de aprendizaje y desarrollo de niñas y niños en ambientes bientratantes y amorosos, accediendo así a herramientas para adaptarse a ese nuevo escenario.

Con 32 años de experiencia y más de 1.200 salas cuna y jardines infantiles gratuitos en todo el país, Fundación Integra trabaja para lograr el desarrollo integral, bienestar y aprendizajes significativos de niños y niñas, poniendo a su disposición espacios educativos diversos, estimulantes y de calidad.

¿Por qué es importante que los niños y niñas asistan al jardín infantil?

Esta es una escena que, probablemente, se repite en más de algún jardín infantil. En un momento del día, el equipo educativo reúne a niños y niñas para, únicamente, moverse libremente al ritmo de la música. Aquel acto, que puede parecer simple desde la mirada adulta, es fruto de una reflexión pedagógica que tiene un por qué y está orientada a identificar, desarrollar y potenciar sus habilidades.

La primera infancia, o los cinco años iniciales en la vida de niños y niñas, es un momento clave en la formación de las y los párvulos. Por ejemplo, acá es donde aparecen los procesos socioemocionales y cognitivos que darán soporte a los desarrollos intelectuales y culturales futuros. Por ello, es vital que cuenten con espacios físicos, protocolos y profesionales que permitan un desarrollo armónico y sostenido.

En este sentido, María Luisa Orellana, docente de la Facultad de Educación de la Universidad de Los Andes, destaca que “en la sala cuna y jardín infantil están las especialistas en la educación para el nivel, quienes tienen conocimientos pedagógicos en relación a qué experiencias de aprendizaje ofrecer para incentivar que niños y niñas desplieguen su potencial y se desafíen permanentemente. Con las educadoras, los equipos técnicos son la piedra fundamental de los procesos educativos en el nivel”.

La profesional, a continuación, también resalta que en estos establecimientos “se cristaliza el Derecho a la Educación de los niños y las niñas, la cual, de acuerdo a la legislación y los dispositivos de la política que de ésta se desprenden, tiene por objetivo favorecer de manera sistemática, oportuna y pertinente el desarrollo integral y aprendizajes relevantes y significativos en los párvulos, de acuerdo a las bases curriculares, apoyando a la familia en su rol insustituible de primera educadora. Entonces, en concordancia con lo ya descrito, la educación parvularia es central para avanzar en la equidad en educación”.

La sala cuna y jardín infantil, como el primer espacio de socialización, es el lugar donde niños y niñas descubren aptitudes que serán esenciales en su vida, ya sea para vincularse con su entorno, interactuar con sus pares, comunicarse, incorporar el desarrollo matemático, potenciar la creatividad o la imaginación. Estos recintos, por lo tanto, deben respetar las características propias de la niñez, dando un espacio especial al juego y al lenguaje.

Alicia Varela Hidalgo, psicóloga y jefa del Departamento de Promoción y Fonoinfancia, de Fundación Integra, indica que “la experiencia del jardín infantil tiene un impacto transcendental, no solo en el aprendizaje, sino también en el desarrollo integral de las niñas y niños que asisten a estos establecimientos, ya que su desarrollo integral contempla los diferentes ámbitos de la vida: cognitivo, físico, social, valórico y emocional”.

“Los niños y niñas aprenden holísticamente, siendo este rasgo la base de todas las actividades que se planifican e implementan en los establecimientos parvularios. Por ejemplo, a través de prácticas del ámbito socio emocional se aproximan al arte, la música, experiencias motoras y sensoriales significativas (gatear, saltar, correr, entre otras), además de la percepción de formas y colores, sabores, olores y texturas, siempre bajo la lógica del juego libre y espontáneo”, complementó la especialista.

Jugando a jugar

Postular que el aprendizaje de los niños y niñas tiene como base el juego, es una empresa de largo aliento y de constante evolución. Implica, entre otros factores, estudiar, adaptar e incluso modificar protocolos ya probados, buscando así responder a las nuevas exigencias pedagógicas sin olvidar que las y los párvulos protagonizan su propio desarrollo.

Ela Valladares Reyes, coordinadora de la Unidad de Políticas y Proyectos de Educación de Fundación Integra, lo ejemplifica así: “Cuando se plantea realizar un juego de roles, imitando situaciones de la vida real, lo que hacemos es ayudar a que formen una imagen del mundo que les rodea, propiciando el desarrollo de habilidades para que manifiesten lo que ocurre en este mundo: cómo lo ven y cómo interactuar con sus pares en ese contexto”.

Algo similar ocurre si las y los párvulos son incluidos en celebraciones comunitarias. Que participen en estos eventos les aporta herramientas para que se sientan parte de su familia y de su jardín, pasando así a ser miembros de un grupo o comunidad más amplia, donde comparten valores como la cooperación, el diálogo, el reconocimiento y el respeto.

“Otro claro ejemplo es cuando niños y niñas exploran la naturaleza y juegan al aire libre. Acá, se pone a disposición de ellos/as experiencias no disponibles en el interior del aula. Pueden vivenciar las vistas, sonidos, las condiciones del clima o la temperatura. También, pueden utilizar materiales al aire libre y jugar ruidosamente (o de forma tranquila si lo prefieren), desplegando su corporalidad y moverse libremente”, indicó Valladares.

Los primeros educadores

El desarrollo que niños y niñas alcanzan durante su asistencia a la sala cuna y jardín infantil, también impacta de forma directa en las familias. El hecho que concurran de forma regular, contribuye a que tanto el establecimiento como las y los adultos que forman parte de la comunidad educativa, se transformen en una valiosa red de apoyo para madres, padres y/o cuidadores, quienes son los llamados a ser los primeros educadores.

Por ello, la mirada de la academia cobra una especial importancia, tanto por su aporte presente como los desafíos futuros. María Luisa Orellana, asegura que “la educación parvularia se construye de manera colectiva con los integrantes de cada comunidad educativa, actores que por diversos motivos en los últimos tiempos se han distanciado, debilitándose las confianzas fundamentales para favorecer procesos enriquecidos de aprendizaje, en favor de los niños y las niñas, lo cual requiere un trabajo focalizado, orientado al reconocimiento, valoración, la sana convivencia y la colaboración”.

“Hoy es fundamental la actualización de los equipos educativos, acorde a la robustez normativa y curricular que ha ido adquiriendo paulatinamente el nivel. Sin duda, es una urgencia generar instancias de formación continua con impacto en la práctica pedagógica que se haga cargo de la intensa proliferación de normas y dispositivos curriculares, los cuales establecen principios y énfasis que determinan la calidad de la educación”, cerró la docente.

Lo que las y los párvulos desarrollen, exploren y descubran durante su paso por la sala cuna y jardín infantil, será el piso desde el cual, con el paso de los años, otras aptitudes dirán presente, las que podrán, por ejemplo, mostrar a otros pequeños y pequeñas que bailar de forma libre al ritmo de la música, les permitirá conectar con habilidades impensadas.

Fundación Integra, con 32 años de experiencia, es uno de los principales prestadores de educación parvularia en el país, con más de 1.200 jardines infantiles y salas cuna gratuitos, a los que asisten más de 85 mil niños y niñas en todo Chile.

A retrasar los relojes: recomendaciones para que niños y niñas se adapten al cambio de hora

La medianoche del próximo sábado 01 de abril, los relojes en gran parte del país deberán retrasarse 60 minutos, volviendo así a las 23:00 horas. Esta modificación, a pesar del debate público que genera cada vez que se aplica, marca de forma inequívoca la llegada del período invernal y se traduce, por ejemplo, en una variación de las horas de luz natural disponibles para que las familias realicen sus actividades diarias.

Primero, es importante consignar que, a raíz de este cambio, niños y niñas podrían presentar signos como cansancio, variación en el apetito, problemas para conciliar el sueño, despertares nocturnos, desajustes en los horarios de las comidas, siesta y cambios anímicos, por lo cual la paciencia, el cariño y la comprensión por parte de madres, padres y adultos responsables son vitales para que puedan ir acostumbrándose a la nueva rutina.

Alicia Varela Hidalgo, psicóloga y jefa del Departamento de Promoción y Fonoinfancia, de Fundación Integra, destaca que “esta es una oportunidad para que adultas y adultos expliquen a las niñas y niños acerca del cambio de hora. Lo podemos hacer, por ejemplo, modificando juntos el reloj o destacando los cambios de luz en los horarios en que hacían sus rutinas habituales. Se sugiere una adaptación gradual, adelantando hitos como la ingesta de alimentos y el baño, por ejemplo, comenzando con 15 minutos e ir aumentando este tiempo de manera paulatina”.

La especialista recalca que la comunicación es clave. Esta modificación horaria también puede ser la oportunidad perfecta para hablar sobre cómo van cambiando las estaciones y la temperatura ambiental, lo que permite que lo tomen con mayor naturalidad. Para esto se pueden utilizar cuentos, dibujos, animaciones u otros elementos.

“Si notan a niñas y niños somnolientas/os durante el día, una pequeña siesta podría ser de ayuda. Se podrían generar espacios de juegos que impliquen ejercicio físico, de este modo, no sólo podríamos conectarnos emocionalmente con ellas/as, sino que además podrían liberar energía que facilite que puedan dormirse más temprano. También, es una práctica recomendable oscurecer la habitación para evitar que la luz natural ingrese directamente en las mañanas, lo que podría facilitar que poco a poco duerman hasta más tarde”, cerró Varela.

Si se necesita apoyo en este proceso, las familias pueden comunicarse de manera gratuita con las/os psicólogas/os de Fonoinfancia, de Fundación Integra, al teléfono 800200 818 o por chat en el sitio web www.fonoinfancia.cl.

Fundación Integra, con 32 años de experiencia, es uno de los principales prestadores de educación parvularia en el país, con más de 1.200 jardines infantiles y salas cuna gratuitos, a los que asisten más de 85 mil niños y niñas en todo Chile.

Subsecretaria de la Niñez se reúne con Directora Ejecutiva de Fundación Integra

Abordar los desafíos que se presentan en materia de infancia, protección y promoción de derechos, coordinar un trabajo articulado entre las instituciones que trabajan para la educación de las niñas y niños, así como trabajar en la implementación en terreno de la Ley de Garantías de Derechos de la Niñez, fueron algunos de los tópicos abordados en la reunión entre la subsecretaria de la Niñez, Verónica Silva y la Directora Ejecutiva, Nataly Rojas.

La subsecretaria también visitó al equipo de Fonoinfancia, programa de Integra que brinda atención psicológica no presencial gratuito, confidencial y de cobertura nacional. Este servicio es atendido por un equipo de psicólogas y psicólogos especialistas en temas de niñez, crianza y familia, y que en 2007 se incorporó al subsistema de protección integral a la infancia Chile Crece Contigo, como parte del Programa Educativo Masivo.

Tras la conversación con los equipos, la autoridad de la Niñez expresó que “una de las tareas que tenemos que emprender este año es la implementación de la ley de garantías, a través de distintos mecanismos que la ley ofrece. Y uno de los principales socios es Integra, sobre todo para el tramo etario que trabaja y por el despliegue territorial y las distintas modalidades que tiene. Por lo tanto, es parte fundamental del sistema de garantías”.

Respecto del acompañamiento que realiza este servicio, la subsecretaría enfatizó que “Fonoinfancia siempre está abierto a adaptarse a los desafíos que van ocurriendo, creo que es un servicio de altísima calidad que tenemos que hacer un esfuerzo para que esté a disposición de todos los niños del país y tiene que ser un eje importante en los servicios que ofrece el Estado a las familias”.

En este sentido, la autoridad de Integra remarcó que “uno de los elementos más significativos e importantes son los mensajes que se entregan a través de Fonoinfancia, que son mensajes prácticos y entendibles rápidamente, que pueda aplicar cualquier persona, es justamente lo que a veces requerimos, orientaciones cuando estamos enfrentando situaciones complejas, ya sea con nuestros hijos, con nuestros familiares y cercanos”.

“Por eso Fonoinfancia ha significado en estos 21 años un gran aporte para las familias y, por supuesto, un vínculo directo con aquellos que requieren una atención especial, un consejo, una orientación o un mensaje”, señaló Rojas.

La jefa del departamento de Promoción y Fonoinfancia, Alicia Varela, también destacó la misión de este servicio, afirmando que “nuestro programa busca contribuir al desarrollo de habilidades, en los padres, madres, cuidadoras/es, en todo adulto que interactúe con niños y niñas, ya sea en labores de crianza, educación o protección, para que estas habilidades que van desarrollando les permitan tener relaciones bientratatantes, favorecer el buentrato, desde un enfoque de derechos, un trabajo en red y también a contribuir a que la mirada que tenemos de la niñez cambie y empecemos a entender a niñas/os como sujetos de derechos”.

“Estamos disponibles para acompañarles de lunes a viernes, de 08:30 a 19:00 horas. Los canales de atención de Fonoinfancia son el canal de voz, llamando al 800 200 818, el chat en www.fonoinfancia.cl, el formulario web y nuestras redes sociales, Facebook, Instagram y Youtube, donde pueden ver las animaciones psicoeducativas, preparadas por nuestros profesionales”, finalizó Varela.

Comenzar una nueva etapa: consejos para que niños y niñas puedan adaptarse al jardín infantil

El ingreso al jardín infantil o sala cuna es uno de los hitos importantes que los niños y niñas viven en sus primeros años de vida: deben vincularse con una cultura distinta de la conocida hasta el momento, dejando así un espacio reconocible para explorar uno nuevo, junto a personas desconocidas y a la vez distintas entre sí.

Esto también es un reto para las familias y las comunidades educativas, ya que deben generar instancias, procedimientos y rutinas que permitan realizar este proceso de forma armónica, respetando siempre la visión e intereses de las y los párvulos. Por ello Fundación Integra, en conjunto con Fonoinfancia, entregan una serie de recomendaciones.

Nataly Rojas Seguel, directora ejecutiva de Fundación Integra, indicó que “invitamos a las familias a que lleven a sus hijas e hijos al jardín infantil, un espacio seguro y clave para su desarrollo. Acá exploran su entorno a través del juego, descubren y experimentan, creando habilidades que perdurarán en el tiempo. Sabemos que a algunos niños y niñas les cuesta un poco más iniciar esta nueva etapa, por eso nuestros establecimientos se encuentran con las puertas abiertas para acompañar a las familias en este proceso de adaptación”.

Niños y niñas podrían reaccionar de diversas maneras lo que dependerá, por ejemplo, de sus propias experiencias o la etapa de su desarrollo en que se encuentren. Si están en sala cuna, podrían llorar al alejarse de su padre, madre o cuidador/a, estar más irritables o podrían observarse problemas para conciliar el sueño. Las y los párvulos de mayor edad podrían llorar, sentirse tímidos, hacer una “pataleta” o entrar al jardín sin despedirse.

Alicia Varela Hidalgo, psicóloga y jefa del Departamento de Promoción y Fonoinfancia, recuerda que “podría suceder que algunos niños y niñas vivencien esta experiencia como una suerte de ‘abandono’, pues aún les es complejo comprender ciertas nociones de espacio y tiempo, por lo que la separación podría ser vivenciada de manera angustiante, ya que no saben por cuánto tiempo se va a extender.

Lo importante es que las madres y padres entreguen un mensaje de seguridad y confianza, nunca mentir o hacer promesas que no podrán cumplirse; al despedirse, decir adiós con naturalidad y enfatizar el hecho de que ‘te vamos a dejar y a equis hora te vamos a buscar’”.

UNA EXPERIENCIA POSITIVA

Si bien esta transición debe efectuarse con un enfoque positivo, las familias podrían sentir “cierto grado de culpa” por dejar a sus hijos/as en el jardín infantil o sala cuna, además de preocupación por sus reacciones, cuidados e incluso pena, por ello la comunicación es clave: se debe conversar, entregando mensajes que transmitan seguridad y confianza.

– También, es importante considerar los siguientes aspectos:Hay que estar disponibles e interesados/as en lo que niños y niñas puedan necesitar, sentir y expresar, junto con transmitirles que pueden preguntar sobre el tema.

– Las inquietudes de niños/as deben responderse de forma clara, concreta y sensible, considerando cómo se sienten, edad, etapa del desarrollo en la que se encuentren, y entendiendo lo que ocurre a su alrededor.

– Es importante que en este proceso se escuche a niños/as y se les ofrezcan espacios de contención si lo necesitan, lo que puede ser cercanía o contacto físico.

– Al momento de conversar con los niños y niñas sobre el jardín infantil, hay que tener en claro sus necesidades, inquietudes y emociones, por sobre las que tengan las y los adultos.

– Es vital entregar seguridad a las y los párvulos, por lo cual se les puede motivar a que lleven un objeto de apego (juguete, almohada, “tuto”, etc.)

– Al retirarse del jardín infantil, hay que despedirse con naturalidad y resaltar el hecho que se regresará.

– Si se necesita apoyo en este proceso, las familias pueden comunicarse de manera gratuita con las/os psicólogas/os de Fonoinfancia, de Fundación Integra, al teléfono 800200 818 o por chat al www.fonoinfancia.cl.

Fundación Integra, con 32 años de experiencia, es uno de los principales prestadores de educación parvularia en el país, con más de 1.200 jardines infantiles y salas cuna gratuitos, a los que asisten más de 85 mil niños y niñas en todo Chile.

Incendios en zona centro sur: ¿Cómo apoyar a niñas y niños durante este tipo emergencias?

Durante los últimos días, el país ha vuelto a ser testigo de múltiples incendios que afectan a diversas localidades en la zona centro sur, una realidad que nos invita a reflexionar acerca de cómo podemos apoyar a los niños y niñas que viven y/o presencian esta emergencia.

Carolina Diez, psicóloga del programa Fonoinfancia de Fundación Integra, hace un llamado a los/as adultos/as que están a cargo del cuidado y crianza de niños y niñas: “intentemos estar atentos/as a su comportamiento, observar sus gestos y juegos, así podemos entender mejor sus emociones”.

La profesional aclara que en situaciones de emergencia es normal que los/as adultos/as tengan miedo, impotencia, confusión y se sientan sobrepasados en su capacidad habitual para enfrentar problemas, así como también podría suceder que las estrategias que hemos utilizado antes para enfrentar otras crisis, esta vez no nos den los resultados que esperamos. Por eso, la psicóloga añade que, “es recomendable atender a las emociones y reacciones que surgen a partir de la exposición a una situación tan compleja como esta para manejarlas de mejor manera, y en la medida en que estemos preparados/as, hablar cuidadosa y amorosamente de lo ocurrido con niños y niñas. Los/as adultos/as cercanos son quienes les entregan la primera contención emocional”.

En la medida de lo posible, se deben retomar las rutinas, ya que la predictibilidad de las acciones es fundamental para entregar a niños y niñas seguridad en su día a día. En situaciones de emergencia, cuando los niños y niñas deben trasladarse al hogar de un familiar o habitar un albergue, las rutinas pueden verse afectadas, lo que podría causar confusión, miedo, angustia y descontrol, comenta Carolina Diez.

Los niños/as necesitan explicaciones según su edad

La especialista aconseja estar atenta/o a ciertas señales (podría haber otras), como cuando niños y niñas están extremadamente apegados a los padres, madres, o los/as adultos/as cercanos/as, más irritables, lloran con facilidad, golpean o muerden a otras personas, ven alterados su control de esfínter, no quieren jugar o están más retraídos/as, es necesario que como adultos/as seamos un apoyo. Lo más probable es que estas conductas vayan desapareciendo poco a poco, en cuanto el niño o niña vaya asimilando lo sucedido en un contexto que lo acoja, le ayude a entender lo que está sucediendo y retome la cotidianeidad.

Como adultos/as es fundamental que les ayudemos en su proceso de adaptación a la nueva realidad, explicándoles con claridad y palabras simples lo sucedido, sobre todo si tienen acceso a escuchar la radio o ver pantallas (celular, computador o televisión), porque pueden encontrarse con una realidad exacerbada e inapropiada para su edad. “Los niños y niñas necesitan información y explicaciones acorde a su madurez emocional y a la etapa del desarrollo en la que se encuentran, por lo que es importante escuchar atentamente sus consultas, entender bien qué quieren saber y hablarles en un lenguaje simple y cercano, para no darles información de más ni de menos y resolver sus dudas. Asimismo, es importante mencionarles que quedamos disponibles para cuando tengan nuevas preguntas”, asegura la psicóloga del programa Fonoinfancia de Fundación Integra.

“Podemos tomar la iniciativa de hablar con el niño/a sobre la emergencia, en la medida en que nos sintamos en condiciones de hacerlo. ¿Qué significa estar en condiciones de hablar? Significa que, si bien, puedo estar triste o angustiado/a, estas emociones no me impedirán atender y apoyar a otros/as en sus necesidades emocionales, materiales y de información”, afirma Carolina Diez. Por el contrario, si el/la adulto/a está sobrepasado/a no debe dejar de atender lo que está sintiendo, porque solo si está bien tendrá las herramientas para apoyar a otros/as.

Apoyo gratuito para las familias

Si las personas cercanas no se sienten en condiciones de apoyarlos, es importante pedir ayuda y buscar a una persona significativa para el niño/a que pueda conversar cuidadosamente con él/ella sobre la emergencia.

En el caso de que los/as adultos/as necesiten apoyo para conversar con niños y niñas en situaciones de emergencia, pueden comunicarse de manera gratuita con los/as psicólogos/as de Fonoinfancia de Fundación Integra, al teléfono 800200 818 o por chat al www.fonoinfancia.cl. El horario de atención del servicio es de lunes a viernes, de 08.30 y 19.00 horas.